Capítulo 1

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Tras una larga semana, Shoto logró zafarse de algunas reuniones que su padre había organizado para su nuevo compromiso junto a la familia Bakugou e incluso logró que dejará de insistir tanto en el tema durante las cenas familiares, lo que era sin duda un gran avance para que Enji desistiera y lo dejará en paz, por lo que decidió enfocarse en sus próximos exámenes dejando de lado su preocupación por los Bakugou y su hijo.

Inocentemente creyó que las cosas seguirían así por un tiempo hasta que Enji se diera cuenta que no estaba interesado y que tampoco lo iba a convencer, pero debió imaginar que un hombre tan testarudo como lo era Enji Todoroki no desistiría hasta que logrará su objetivo.

Ese día, Shoto soltó un suspiro cuando vio la notificación que le llegó en su celular.

Era un mensaje de su padre diciendo explícitamente que esa noche hablarían seriamente sobre su compromiso y que tenía prohibido escaparse. ¿Ese viejo no se rendiría nunca o qué? Shoto estaba un poco cansado de todo lo que significaba ese ridículo compromiso y estaba a punto de explotar... quizás si lo hacía entonces...

—Todoroki-kun —llamó su compañero Midoriya, un beta aspirante a héroe que consideraba un buen amigo—. ¿Hay algún problema?

—Un conflicto se desato en mi casa, pero lo solucionare esta noche —contestó restándole importancia.

Entonces guardo el teléfono en su bolsillo y siguió prestando atención a su profesor hasta el final de la clase. Solo cuando sonó la alarma y comenzó a guardar sus cosas notó que sus acciones se estaban volviendo lentas.

Sinceramente no quería llegar a casa temprano, algo le daba mala espina, ¿su padre queriendo hablar seriamente con él sobre un tema? Sí, eso no sonaba muy convincente. Eiji no era la clase de persona que se sentará como un ser civilizado y mantuviera una conversación mínimamente coherente y con la suficiente empatía como para que usará ese término... y Shoto tampoco era la clase de persona que tolerará tal trato por parte de su padre.

—¿No vienes, Todoroki-kun? —preguntó Yaoyorozu, otra amiga de la escuela. Una Alfa de alta clase y con un quirk envidiable que también estudiaba con ellos con la intención de ser un héroe.

—Sí... —dijo al final recogiendo sus cosas e iniciando el camino junto con sus demás compañeros—. Ya voy.

Ninguno de sus amigos sabía que Shoto estaba pasando en esos momentos, no le había comentado a nadie que su padre estaba buscando la forma de casarlo con un omega que no conocía porque simplemente no creyó que su padre insistiera tanto como para hacerlo un asunto importante.

Ahora que parecía más asfixiante, ¿Sería bueno comentarlo con alguien más?, pensó mientras veía a sus compañeros hablar de sus calificaciones parciales y de cómo eso seguramente afectaría en sus días de vacaciones.

Probablemente si les dijera sobre su situación tendría la oportunidad de escuchar otras opciones que no se le habían ocurrido o podría obtener una ayuda diferente. Yaoyorozu tenía mucho dinero y contactos, tal vez podría mandarlo a otro estado o país mientras las cosas se arreglaban...

O simplemente... Ninguno de ellos lograría entenderlo.

Los compromisos arreglados eran todavía una costumbre muy marcada en comunidades alfa y era casi una tradición, de esa forma se aseguraban de que las familias puras mantuvieran sus estatus... así que, quizás todavía era una situación que tendría que resolver él mismo.

(...)

Llegó a casa solo una hora después de lo habitual, había estado caminando en círculos mientras analizaba lo que quería decirle a su padre sobre ese compromiso y también sobre otras opciones que podría tomar para cancelarlo definitivamente. Ahora se sentía más listo para afrontarlo.

Así que, se armó de valor y abrió la puerta principal mirando de antemano si tenían visitas. Para su grata sorpresa, todo lucía normal. Solo los zapatos de sus hermanos y los de su padre estaban en la entrada.

Entró con más determinación al sentirse más seguro y camino confiando de sí hasta la sala, donde su padre ya lo estaba esperando, viendo distraídamente su teléfono antes de notarlo y guardarlo en bolsillo.

Lo miro con cierta expresión indicando que tomará asiento frente suyo y así lo hizo Shoto tras de un largo silencio. Habitualmente Enji solo habla de temas serios en la sala de tatami, como si fuera un mafioso japonés y ellos sus lacayos que atendían cada una de sus órdenes, a Shoto nunca le gusto estar sentado ahí, mientras su padre bebía una taza de té y le hablaba de su vida como si fueran simples negocios para él.

Soltó un suspiro y con ello Enji comenzó su ridículo discurso.

—Sé que hemos tenido algunas diferencias estos días —Shoto soltó una risita burlona, porque ambos sabían que siempre han tenido diferencias, sin embargo, Enji continúo como si ese hecho no le importará—. Y sé que no es fácil para ti aceptar este compromiso, pero es lo mejor para ti, Shoto. El hijo de los Bakugou presentó un quirk increíble antes de que fuera suprimido por su segundo género y...

—No me interesa —interrumpió—. No me importa si es el único omega en todo el planeta o si es la mejor opción para contraer matrimonio. No me pienso casar con él, tu no decides mi destino... Ya te lo he dicho.

—Ya todo está preparado —contestó Enji ignorando los sermones que Shoto le había dicho—. No hay vuelta atrás, ya firmé lo documentos necesarios...

—¿Qué? —gimió Shoto sin entender, sintiendo sus músculos tensarse mientras miraba estupefacto a su padre esperando una respuesta a lo último que había dicho, ¿de qué documentos estaba hablando? No lo podían casar sin él estar presente, ¿verdad? Su corazón comenzó a latir con fuerza dentro de su pecho y comenzó a transpirar sintiéndose un poco estresado... Su padre no habría hecho eso, eso sería caer muy bajo... ¿verdad?

—Te vas a casar con el Omega de los Bakugou —declaró su padre con el ceño fruncido—. Te guste o no. Ya está decidido, punto final.

—¡No es justo! —bufó el más joven con la voz temblorosa pero llena de rabia—. Es ridículo todo este plan que tienes en tu cabeza, ¡No me voy a casar con el Omega a tu elección solo porque así lo quieras!

—¡Suficiente! —gritó Enji golpeando con la palma el suelo de tatami haciendo retumbar un poco el suelo y las paredes, no por nada era el segundo héroe del ranking japonés—. No pienso discutir al respecto, todo está arreglado y no importa si quieres huir las cosas ya están hechas. Si quieres deshacerte de esto, tendrás que pensar en otra cosa...

Shoto prendió un poco de su poder y luego, se levantó para salir de la sala. Su padre era un imbécil, pero le había dicho algo que le podría funcionar, si no podía evitar el matrimonio, entonces podía deshacerse de él una vez que demostrará que ese omega "perfecto" no era suficiente para él... Shoto tenía una oportunidad.

Perfect *OMEGAVERSE* [TodoBaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora