El deber como creadores

964 81 17
                                    

Eones más tarde;

Drake se encontraba en el camino de acabar su etapa como sparkling y comenzar como youngling, la cybermateria de su cuerpo había evolucionado y estaba cogiendo altura, era casi tan grande como Ultra Magnus, Predaking tenía claro que en 2 eones más lo superaría en tamaño, los colores no habían cambiado, sus patrones bicolor entre marrón y azul celeste seguian igual, llamativos ópticos diferentes por llevar el color de cada creador generaban asombro ante cualquier transformer corriente, era un bot único, un híbrido. Ya tomaba energon común, caminaba solo y hablaba con el poco vocabulario que conocía, lo normal para un youngling aprendíz, no tenía edad suficiente para poder transformarse, su crecimiento no había acabado, no era un físico maduro del todo.
Obviamente ya no pertenecía a las guarderías predacon, Magnus se encargaba de enseñarle su parte autobot mientras que asistía con madres experimentadas predacon para aprender lo necesario de la otra raza, era algo así como comenzar clases en primaria.
Se relacionaba con las crías de predacon del reino, Magnus y Predaking le dejaban unos astrociclos al día para poder merodear con sus amigos por todo el reino siempre con algún predacon merodeando cerca para vigilarlos.
Poco salían del reino, siempre con sus creadores, no era suficientemente maduro como para ir solo fuera del reino, ya conocía a Optimus, y le encantaba escuchar las historias tan impresionantes que él y los anteriores Primes vivieron.

...

Magnus se encontraba fuera ese día, asi que el pequeño híbrido estaba a cargo de su padre;

- Padre, ¿seré una bestia como tu? - preguntó entusiasmado.

- Seguramente Drake, aún faltan eones para que estés listo pero ¿ves tus alas? Es buen indicador de que serás un predacon. - se transformó, Drake siempre lo miraba con gran asombro, le llamaba mucho la atención esa parte predacon.

Predaking extendió las alas, mostrando a su hijo la grandeza y fuerza de la genética predacon.

- Intentaron extinguirnos sin éxito, hoy somos más de lo que hubiésemos imaginado, somos la raza más dura que hay en todo Cybertron, asi que lleva con orgullo tu parte predacon Drake, porque muchos se reiran de ti por ser diferente, por ser un híbrido, pero...¿Sabes lo que eso esconde? ...Envidia hijo, pura envidia.

El pequeño incrédulo y sin saber bien que decir extendió sus pequeñas alas que aún no le daban esa capacidad de volar, sonriente miró con orgullo a su padre, Predaking lo cogió con sus mandibulas, sin causar un mínimo daño y lo dejó justo en su dorso metálico.
Drake conocía perfectamente el juego, le encantaba desde la primera vez que lo hizo, soltó un intento de rugido, su voz infantil no daba más, era mas gracioso que temible, pero eso cambiaría con el tiempo. Predaking lo acompañó rugiendo él también, haciendo más ilusión a su sparkling quien se aferró a las placas de su padre sabiendo lo que venía a continuación. Predaking cogió vuelo, subió alto y bajó en picado, haciendo después giros y acrobacias, causando risas e ilusión en su hijo, avivando así su instinto predacon, los predacons en el aire les daban espacio para que Predaking pudiese maniobrar a su gusto, los de abajo miraban con asombro, las crías pedían a sus padres hacer lo mismo y Magnus cuando llegaba sentía una emoción y satisfacción enorme, eran su mayor orgullo.
Predaking divisó desde las alturas a su conjux, jugó algo más con Drake y después en un épico aterrizaje delante de los amigos del híbrido, lo dejó para volar de nuevo y llegar junto al azulado.

- Me encanta veros así de unidos, siempre pensé que sería yo solo quien quedaría cuidandolo - le dió un abrazo y un beso rápido a su dragón café.

- Eso queda en mi pasado, aprendí de mis errores, pues los cometí muy gordos - los dos rieron.

- Habrá que prepararse para su adolescencia, no será facil, eso es lo que me dicen otras madres - acentuó algo preocupado Ultra Magnus.

- Hay que seguir enseñandole bien, órdenes y modales desde pequeño, si lo doblegamos ahora no causará problemas - respondió el Rey mientras lo veía jugar con los otros predacons.

- Más adelante sería bueno que se acostumbre a estar por otras ciudades, que se relacione con otros bots, si lo hace desde joven le aceptarán antes, no me gustaría que lo excluyan como te pasó a ti, ¿me entiendes? - lo miró.

- Si, claro que te entiendo, yo he vivido eso Magnus y no es para nada agradable, pero necesita tiempo, necesita controlar sus dos lados, la parte predacon le llevará más tiempo, y no me refiero a la física, si no a controlar los instintos y emociones, sobretodo las negativas, si no tiene autocontrol y acaba hiriendo o matando en el peor de los casos, Optimus lo tendrá que expulsar, son las reglas de la ciudad, por eso te pido tiempo para Drake - le habló sinceramente, pues él ya había experimentado por esas etapas de aprendizaje en un pasado.

- Si, claro, es lo correcto - se abrazó a su Rey.

Quedaron juntos mirando la felicidad que desprendía su hijo, jugando con los suyos,  sin saber lo dura que era la vida fuera del reino...

Mientras pudiesen le darían la mejor vida que pudieran, de eso estaban seguros.

FIN
_______________________________

Finalizo aquí esta historia, espero que haya sido de vuestro agrado e inspire a los lectores a los que llegue.
Aprovecho para decir que comencé con un libro nuevo, ya hay subido un capítulo.
Se trata de un libro que involucra drogas y sexo, hablando de drogas...obvio tenía que ser Drift.
No haré mas spoiler hah, gracias por leerme mi gente, de verdad.

¡¡Nos vemos en el próximo libro!!

~ OriPax ~

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 16, 2024 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Yo, ¿tu Reina?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora