0

693 37 0
                                    

warning

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

warning. +18
smut

2005.
Bangkok, Tailandia.

Pavel amaba absolutamente todo de Pooh.

Y cuándo digo todo, amigos míos, me refiero a literalmente todo, TODO de él.
Es que aún no podía creer que contaba con el novio más lindo del universo, con el corazón más precioso de todos, con la más hermosa sonrisa, hermoso cuerpo, hermosos ojos... absolutamente todo de él era hermoso. Durante todo su tiempo de relación que mantenían, Pavel había aprendido a conocer cada parte de Pooh. Y cuando hablaba de cada parte, se refería a cada uno de los pensamientos del menor; sus demonios y sus preocupaciones. Sin embargo, aún había algo que Pavel no conocía, algo que se había muerto por ver y conocer todo este tiempo.

Su cuerpo.

En todo ese año de relación ninguno había querido dar "el siguiente paso". No se sentían seguros de hacerlo y no porque no quisieran, era más bien el miedo a hacerlo tan jóvenes. Y es que ambos aún asistían a la escuela secundaria. Pavel estaba cerca de graduarse, ese era su último año en la escuela antes de ingresar a la universidad. Por otro lado, Pooh es solo un año menor que él, por lo que también está en solo un grado más bajo.

Ese era su último año juntos en la escuela, pero ambos aseguraron tener un fuerte amor a distancia en caso de que Pavel asista a la universidad que su mamá tanto quiere que vaya. O al menos eso era lo que ellos creían. Para conmemorar el inicio de su relación, Pooh decidió hacerle una gran sorpresa a Pavel, quien curiosamente también había decidido sorprender. Luego de discutir entre qué restaurante era mejor cenar [porque sí, habían reservado dos lugares diferentes y al darse cuenta, ellos querían comer en el lugar que preparó el otro] decidieron que preferían más pasar su tiempo juntos en lugar de pelear por algo tan tonto y tierno a la vez.

Pooh lo invitó a su departamento, ya que por alguna razón él aún no había podido poner un pie en el castillo del más alto -como le gustaba llamarle a su mansión-. Le dijo a Pavel que pusiera la película que deseara en el televisor y se acomodara en el sofá mientras él hacía ramen para los dos. Algo muy simple, lo sé, pero ambos eran muy fanaticos del ramen y solían comerlo todo el tiempo. Pavel le obedeció en lo primero y puso una de sus películas favoritas de acción, pero después prefirió acompañar a Pooh en la cocina incluso si no lo ayudaría a cocinar y solo iba a distraerlo.

Cuando llegó la hora de que el ramen se quedara unos segundos en agua, Pavel aprovechó para situarse detrás de él y abrazarlo por la cintura mientras el por incercia movía su cabeza a un lado para que Pavel pusiera la suya sobre su hombro. Una posición perfecta para la pareja perfecta. Pavel sonrío cuando notó su diferencia de altura, siempre le pareció muy tierna.

-Y... ¿que haremos con las reservaciones? puede que para tí no sea nada pero a mi me costó varios turnos de noche en el supermercado.– se quejó Pooh. Aunque disfrutaba de pasar tiempo con Pavel, una parte de el se sentía muy mal por desperdiciar el dinero que con tanto esfuerzo y noches sin dormir había conseguido recolectar. Tenía un trabajo de mediotiempo como cajero en el supermercado, y aunque a simple vista pareciera algo extraño que alguien como él saliera con alguien tan adinerado cómo Pavel, quién para empezar ni siquiera debe trabajar, a ellos simplemente no podía importarles menos.

𝗼𝘂𝗿 𝗯𝗮𝗯𝘆 𝗳𝗼𝘂𝗿𝘁𝗵 [𝗽𝗮𝘃𝗲𝗹𝗽𝗼𝗼𝗵]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora