D E S A N I V E R S A R I O
segunda temporada
▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬
ｍａｉｔｅ
▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬
Los días pasaban, cada día faltaba menos para el bautimos de Paulo, literalmente era mañana.
También estábamos organizando todo para la boda, eligiendo los colores y cómo iban a hacer las invitaciones.
Últimamente estaba muy metida en todas esas cosas, Luca me ayudaba pero tampoco daba mucho su opinión, a veces sentía que no tenía la misma emoción que yo.
— ¿Qué onda? —se sienta al lado mío, Luca con Paulo en brazos.
— mira, ¿Éstos colores te gustan? —le mostré las paletas, él quedó mirando.
— ¿Un azul y amarillo no te gusta más? —arquea una ceja y yo lo quedé mirando.—, No sé, elegí el que quieras.
— vos también tenés que dar tu opinión amor, deberías. —me cruce de brazos.
— todo lo que a vos te guste me gusta a mí. —se acerca a darme un beso.
Se vuelve a levantar con nuestro hijo y desaparece por la puerta del patio, se había ido a jugar con Paulito y Max, yo me quedé terminando todo.
Me hago mates, también estaba buscando referencias de vestidos, la verdad me emocionaba mucho esto, elegir el vestido, los colores, en si organizar tu boda, me parece algo increíble.
El timbre estaba sonando, me levanté a abrir para encontrarme con Exe y Agus, en los brazos de mi cuñado estaban las mellis, Lionel estaba en los brazos de Agus.
— ¿Vos no estás grande para que te hagan upa? —lo miré a mi sobrino.
— es que me duelen los pies. —me hace brazos y yo me reí, lo terminé alzando.—, Hola tía.
— hola ramirito. —lo llené de besos.—, ¿Qué onda ustedes?
— yo vine con mi amigo, hola cuña. —me saluda el chango y desaparece, se fue con Luca.
— vine a ayudarte con las referencias del vestido. —me abraza Agus, las dos entramos.
Las mellis estaban con su padre, mientras que Lionel estaba mirando videos de Boca en Youtube. Con Agustina nos concentramos en el vestido, ella estaba más emocionada que yo.
— mira, el corte de la espalda es hermoso. —me señala la pantalla.—, Muy lindo, y la caída del vestido también.
— me da miedito caerme. —la miré algo asustada.—, Encima todas las miradas van a estar en mí.
— todos los nervios se te pasan cuando lo veas ahí parado con el traje. —ríe acariciando mi mano.—, A mí me pasó lo mismo, pero al verlo ahí se me pasó todo.
— ¿Exequiel te ayudaba con las cosas? Osea con el vestido claramente no, pero a elegir.
— si obvio, el chango participo mucho en los planes de nuestra boda. —sonríe.—, ¿Luca no te ayuda acaso?
