Capítulo 10

25 7 2
                                    

Quinto día de visita de Blas y tercer día de cortejo de Marcos. 

Me llegó una invitación del segundo a una sesión de fotos para la revista "Gente" . Al principio me negué, iba a ser súper aburrido estar 2 horas parado o sentado esperando que Mar terminara de probarse trajes, encima que después seguro le harían una entrevista para acompañar las fotos. Pero después de tanta insistencia , acepté.

Como siempre, lleve a Blas conmigo y no debí hacer eso. 

Cuando Mar me vio llegar con él, nos saludó bien a la distancia y siguió haciendo su sesión. Mientras con mi amigo nos pusimos a recorrer todo el lugar, y perder el tiempo. 

Cuando terminó, antes de ir a hacer la entrevista, se acercó a nosotros. Ahora si saludo bien, pero cuando mi acompañante se fue al baño. Empezó la charla seria.

-¿Por qué trajiste a tu amigo?- 

-No entiendo cual es el problema. No quería dejarlo en casa solo y tampoco quería aburrirme yo esperandote- realmente no entendía.

-Lo que pasa es que yo te invite a VOS, no a los dos- por si no se dieron cuenta, hizo énfasis en el "vos"- esperaba que después de esto tuvieramos una cita, de pareja. Ir juntos a donde vos quieras pero "solos"-

Que boludo soy. Así que trate de solucionar las cosas; llame a Coti, que por obra y gracia del destino estaba desamparada por su ruptura con Alexis entonces aceptó rápidamente a conocer a mi amigo Blas en una cita doble. 

¿Quería hacerlo? Obvio que no, no quería ver a Blas ser feliz con alguien más. Pero se lo debía a Marcos.

 
                       ————
 

Cuando salimos del estudió, nos subimos al auto del amigo de Mar, que manejaba él, no el amigo. Y me decidí por ir a un sitio al que hace tiempo no iba y me parecía perfecto para una primera cita: El zoológico.

¿Por qué hay un zoológico en la ciudad? Ni idea, no se hagan preguntas y solo disfruten. 

Como somos figuras públicas, nos cumplieron el capricho de monitorear que no nos saquen ningúna foto . Pero si podíamos sacarnos fotos con la gente que pedía, pero debía ser por separado, nunca juntos.

Comenzamos a caminar los tres, mirando los leones, pandas, koalas, y cuando estábamos mirando a las nutrias, me llegó el mensaje de Coti , estaba buscando donde estábamos, le di indicaciones de nuestra dirección y a los minutos apareció.

Se acercó, los saludo a cada uno y cuando fue mi turno, le pedí en el oído, disimuladamente, que se llevará a Blas. Ella aceptó, y con una excusa de que quería ver a las ardillas, se fueron.

Apenas desaparecieron de nuestra vista, entramos en otro modo. Mar me tomó de la mano y seguimos recorriendo pero se sentía diferente; ahora le señalaba con emoción los animales que me gustaban, él compartía mi felicidad dando saltitos en el lugar. Pasamos por un puesto y me compro un helado para compartir juntos, a un lado había un cartel sobre una exposición de delfines dentro del acuario gigante. 

Nos decidimos a entrar y vimos una pecera enorme, que contenía peces de todos colores, quedamos fascinados. En un momento apagaron las luces para apreciar mejor la poca iluminación. 

Mire para los costados para fijarme que no hubiera nadie, me puso de puntas y lo atraje hacia abajo para darle un beso corto. Lo tomó por sorpresa pero me siguió la corriente . Nos separamos un poco, pero aún lo tenía agarrado del cuello.

-Pensé que querías esperar. Todavia no termine con los regalos- me dijo

-Ya está, olvida eso. El único regalo que quiero a partir de ahora es que seas mío- refregué mi nariz junto a la suya.

-Yo siempre fui tuyo Agu'. ¿Pero vos sos mio?- levantó una ceja.

-Si vos sos mío, yo soy tuyo para la eternidad-  

Y el resto del día no tiene importancia. Nada podría superar esa primera cita. 

De Rencores Y VenganzasWhere stories live. Discover now