La historia de un pecado

Preludio "Un amor enfermizo"

--E-estás segura de esto?-- --tranquilo, ya todas están dormidas-- --lo sé pero...-- --Lincoln tranquilo... mírame, todo está bien-- la noche envolvía al pueblo de Royal Woods bajo su oscuro y estrellado manto, y en la casa Loud dos jóvenes hermanos se encontraban teniendo un momento de intimidad, aprovechando el sueño de su familia, para poder disfrutar simplemente de la compañía el uno del otro, sin tener que esconder sus sentimientos del resto del mundo, ni verse interrumpidos por el incesante ruido que siempre reinaba en su casa, Lynn y Lincoln estaban solos en el cuarto del chico albino, tan solo conversando y compartiendo un momento juntos --Lynn yo... no sé si debamos hacer esto-- --que, a caso no quieres hacerlo?-- --no, no es eso, es solo que...-- --solo, qué?...-- --no... no siento que esto sea correcto-- --en serio? De verdad te vas a hechar para atrás ahora? Porque si no mal recuerdo fuiste tú quien me pidió hacer esto-- --lo sé, pero... estoy algo nervioso, quiero decir... somos hermanos, no deberíamos de estar haciendo esto...-- --bueno, si en serio quieres que me vaya, está bien, te veo mañana apestoso-- la chica de cabello castaño estaba a punto de irse, cuando sintió como la mano de su hermano menor la tomo gentilmente, deteniendola antes de que se fuera --Lynn... quiero hacerlo...-- --muy bien, entonces hazlo-- Lincoln estaba nervioso, su corazón latía con rapidez mientras su mente no dejaba de dar vueltas, sus manos sudaban como si estuviese corriendo una maratón, el chico de cabello blanco entonces cerro sus ojos y lentamente se inclino al frente, mientras su rostro estaba cada vez más y más cerca del de su hermana, su mente resonaba con mayor intensidad (voy a hacerlo, en serio voy a hacerlo) pensó y se repitió a sí mismo una y otra vez, pero por más que se inclinaba no lograba llegar a ningún lado, Lincoln entonces abrió sus ojos, solo para ver el rostro risueño de Lynn, que a duras penas lograba contener la risa mientras veía la cara del chico albino, la castaña estaba inclinada hacia atrás, mientras que el peliblanco tenia su cuello totalmente extendido, como si de una tortuga asomando su cabeza fuera del caparazón se tratase --jajajajaja tu cara jajajaja-- Lincoln molesto cruzó ambos brazos mientras volvió a sentarse de forma normal y giraba su cabeza para no tener que ver a su hermana --jajajajaja lo siento jajaja, no pude evitarlo jajajaja-- --no es gracioso Lynn! De haber sabido que solo ibas a burlarte no te hubiese pedido que vinieras en primer lugar-- la chica castaña limpió sus lágrimas por tanta risa y recupero la compostura --ya ya... ya dije que lo siento jaja... vamos mírame, prometo que está vez no me burlare de tí, ok?-- Lincoln seguía molesto y sin intención de prestarle atención a su hermana, hasta que sintió como una mano tomaba su cara, para hacerlo voltear suavemente, quedando cara a cara una vez más con su hermana, que sin perder tiempo, cerro sus ojos y planto un beso en los labios del joven albino, Lincoln conmocionado y aturdido por el repentino beso, movió lentamente sus manos por la espalda de Lynn mientras cerraba los ojos, envolviendola en un suave y cálido abrazo, luego de unos segundos unidos finalmente ambos hermanos se separaron, Lincoln veía totalmente ruborizado el rostro de su hermana, que a pesar de su actitud, su físico y su reputación en la escuela, era ciertamente bastante linda, con su cabello castaño y brillante suelto, callendo sutilmente sobre sus hombros, sus suaves labios razados, sus mejillas sutilmente marcadas con un tono rojizo y algunas pecas, y sus grandes y brillantes ojos almendrados de color verde, Lincoln no estaba seguro de cuando fue que comenzó a notar la belleza de su hermana deportista, pero no podía negar que le resultaba bastante atractiva --y... cómo te sientes? Te gustó?-- --sí... se sintió, muy bien...-- --me alegro que te haya gustado, porque ese fue mi primer beso-- --en serio? Pero creí que ya habías besado a un chico antes-- --sí bueno, sobre eso... mentí, solo dije que ya había besado a alguien antes para no quedar mal con Margo y las demás-- --entiendo... espero no haberlo arruinado entonces-- --no te preocupes Linc, no lo hiciste mal, se nota que haber practicado con Ronnie dió sus frutos-- en cuanto Lynn mencionó el nombre de la chica latina, vio como la expresión de Lincoln cambió a una ligeramente abatida --perdon, no quise decir eso-- --no, está bien...-- --aún la extrañas, verdad?-- --sí, un poco... es solo... ya sabía que sería difícil mantener nuestra relación con ella lejos pero... no creí que fuera a terminar conmigo...-- --bueno... si a mí me lo preguntas, ella se lo pierde-- --de que hablas?-- --bueno, es cierto que puedes llegar a ser bastante raro y nerd a veces, pero también eres lindo, atento, servicial, amable, gentil, cariñoso-- --enserio lo creés?-- --no es que lo crea, si no que lo sé, te conozco bastante bien, somos hermanos después de todo-- hermanos, luego de oír esa palabra Lincoln no pudo evitar sentirse mortificado, era cierto después de todo, ambos eran hermanos, y en su interior Lincoln estaba consciente de eso, él sabía que un par de hermanos de deberían de estar haciendo lo que ellos acababan de hacer, menos aún debería de sentirse atraído hacia Lynn, pero entonces, por qué? Por qué es que él se sentía de esa manera? No es como si fuera la primera vez que se enamoraba o le gustaba una chica, antes le gustaba Cristina, luego la señorita Dimartino e incluso había sido novio de Ronnie Anne, hasta podía recordar cuando fue que comenzó a ver a su propia hermana como una mujer, fue dos meses después de que su relación con Ronnie Anne terminara, él sabía todo eso, pero lo que no podía entender, era porque de todas las chicas que él conocía, y de todas las personas que había no solo en su escuela si no también en el pueblo, la chica con la que se había enamorado nuevamente tenía que ser Lynn de todas las personas, él era consciente de que aquello no estaba bien, su conciencia le repetía incesante que debería de estar avergonzado, incluso asqueado consigo mismo por sentir tan repulsiva y sacrílega atracción, y en efecto una parte de él se arrepentía, luchaba por mantenerlo recto, por reprimir aquel impuro sentimiento de romance que nacía desde lo más profundo de su alma, pero mientras su ser conciente lo reprendía y contenía, otra parte de él no podía dejar ir aquel sentimiento, su parte más emocional, más impulsiva e imprudente, gritaba anhelando con fuerza por la compañía de la chica deportista, en ese momento luego del beso, el chico albino estaba librando una batalla consigo mismo, una batalla entre la razón y el sentir, sus emociones estaban encontradas, por un lado el arrepentimiento, el asco, la repulsión y la negación de sus emociones, por el otro la alegría, la emoción, la calidez, incluso la satisfacción de haber besado a la chica que le gustaba, Lincoln estaba perdido en sus pensamientos en aquel momento y Lynn lo tenía claro --Lincoln, te puedo preguntar algo?-- dijo la chica castaña, Lincoln entonces volvió en sí y centro su atención en su hermana --sí claro, que pasa?-- --que es lo que sientes por mi?-- Lincoln se quedó frío, aún se encontraba conflictuado, él sabía bien lo que sentía, pero aún no entendía bien el porque ni el como, más aún no quería admitirlo para no caer más en ese profundo agujero que eran sus emociones en aquel momento --yo... no estoy seguro, Lynn... tú que sientes por mi?-- --no lo sé... llevo tiempo preguntándome lo mismo sabes? Es raro... es raro porque cada vez que estoy contigo, me siento feliz, y no me refiero a que no esté felíz cuando estoy con las demás, o cuando estoy con mis amigas, es diferente, es... es como cuando Lori y Bobby están juntos, o mamá y papá, o incluso cuando Paula está con su novio...-- Lincoln estaba sin palabras, no sabía que contestar a eso, aunque de cierta forma no lo sorprendía tanto, después de todo, si ella no sintiera lo mismo, entonces era obvio que no hubiese aceptado besarse en primer lugar --Lynn... sabes que somos hermanos verdad?-- --claro que lo sé tonto!-- --entonces, por qué? Por qué te sientes así por mi?-- --no lo sé... solo sé que ya tengo tiempo sintiéndome así, incluso antes de que comenzarás a salir con Ronnie Anne, hasta antes de que te empezará a gustar Cristina...-- Lincoln veía en silencio a su hermana, sin poder creer lo que estaba escuchando --oye no me mires así, sé que es raro de acuerdo? Sé que está mal, pero no puedo evitarlo, está bien?! Incluso he intentado salir con otros chicos para olvidarme de ésto, pero nada, no importa a quien me acerque, no importa cuánto tiempo pase con alguien, no importa si sé que no debería sentirme así, simplemente no puedo evitarlo!-- Lynn despotricó mientras sus ojos se humedecían fruto de la frustración que sentía en aquel momento --sabes que? Olvídalo, fue una mala idea venir aquí-- Lynn refunfuño y se levantó de la cama, caminando con firmeza e ira hacia la puerta, Lincoln la siguió y la detuvo antes de que pudiera salir --Lynn espera, yo... yo también... también me siento así...-- Lynn no dijo nada, no volteó a verlo, simplemente se quedó inmóvil, mientras el silencio envolvía la habitación --mira, yo tampoco sé bien porque me siento así, también sé que no es correcto, incluso sé que si nuestros amigos y familia lo supieran entonces ambos estaríamos arruinados, pero yo tampoco puedo evitar sentirme así, yo... quiero intentarlo, intentar ser algo más contigo, por favor...-- Lynn se dio la vuelta y miro a Lincoln a los ojos, su cara sonrojada como un tomate y sus ojos inundados con lágrimas, le tomo unos segundos reunir la fuerza para hablar, hasta que finalmente logro articular sus palabras --sí sabes que si lo hacemos, entonces tendremos que mantenerlo en secreto, verdad?-- --lo sé...-- --y sabes que si alguien se entera, entonces ambos estaremos en problemas, cierto?-- --sí...-- --aún así, quieres hacerlo? Quieres que seamos novios?-- --sí... lo quiero...-- y con esas últimas palabras, ambos hermanos sellaron su relación, reafirmandola con un tierno beso, para luego pasar un poco más de tiempo juntos acostados en la cama, solo charlando y planeando como es que mantendrían su recién formada relación oculta del mundo, luego de unas horas, Lynn finalmente se despidió de su hermano, trepó hasta la rejilla de la ventilación y silenciosamente volvió a su cuarto, Lincoln por su parte se tumbo en su cama, miro fijamente el techo y dejo que su mente divagara, aún estaba en conflicto, ésta vez preguntándose a sí mismo, si es que había hecho lo correcto, no sabiendo que eso era solo el inicio, de todo lo que vendría después.