━━ Los niños que vivieron...
Ese es el apodo con el que el mundo mágico conocía a los mellizos Potter. Aquellos niños que con tan solo nueve meses de nacidos habían perdido a sus padres de forma trágica a manos de quien entonces era conocido como e...
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Privet Drive Little Whining. Surrey Inglaterra.
Habían transcurrido ya varias semanas desde aquel desafortunado incidente en el zoológico con la boa. Semanas desde que el tobillo de Liliane había sufrido una leve fractura. Aunque la lesión había sanado considerablemente, todavía no se encontraba del todo recuperada, por lo que Petunia seguía muy pendiente de los cuidados de su sobrina.
Por otro lado, el severo castigo que Vernon había impuesto a Harry finalmente había llegado a su fin. Curiosamente, este pequeño cambio en la rutina había contribuido a mejorar, al menos un poco, el estado de ánimo de la pequeña Liliane, quien empezaba a mostrar señales de mayor entusiasmo y vitalidad.
El año escolar de los menores había terminado hacía apenas unos pocos días, y con ello, las vacaciones de verano se habían hecho presentes una vez más. Sin embargo, lejos de ser motivo de alegría, esta noticia no entusiasmaba en absoluto a los mellizos. Para ellos, asistir a la escuela representaba una breve escapatoria de la constante vigilancia y las miradas de desaprobación que Vernon les dirigía casi cada cinco minutos. Ahora, con el tiempo libre, esas miradas solo parecían intensificarse. Y como si eso no fuera suficiente, Dudley había comenzado a recibir visitas constantes de sus insoportables amigos, cuya presencia no hacía más que empeorar la situación. Esos niños, sin duda, podían ser una auténtica pesadilla, trayendo caos y alboroto cada vez que cruzaban la puerta de la casa.
Es por esa razón que ambos Potter procuraban pasar la mayor parte de su tiempo lejos del alcance del Dursley. Ya fuera encerrados en su habitación, dedicados a leer los pocos libros que les estaba permitido tener, o alejándose por completo de la casa para refugiarse en un parque algo distante del vecindario, cualquier opción les resultaba mejor que soportar el ambiente tenso y sofocante del hogar. Allí, al menos, podían respirar con algo más de tranquilidad y fingir, por un rato, que todo era diferente.
━ Gracias, Lily ━dijo Harry, llamando la atención de su hermanita, quien se mecía suavemente en el columpio contiguo.
━ ¿Por qué? ━preguntó la niña con genuina confusión, deteniendo el movimiento del columpio para mirar a su hermano.
━ Por no dejarme ir a esa escuela solo ━respondió Harry con un nudo en la garganta━ Aunque... aunque debiste aceptar esa oportunidad, Lily.
El castaño no quería separarse de su hermana. La sola idea le resultaba insoportable. Sin embargo, tampoco deseaba que ella desperdiciara la posibilidad de estudiar en una de las mejores escuelas de Inglaterra.
