parte 3

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- Creí que viniste a enfrentar a tu amigo- Metatron observó con curiosidad a Crowley

- Así es, vine a enfrentar a Aziraphale - dijo tranquilo Crowley, mirando a través de sus lentes al arcángel

Metatron dió unos pasos atrás, en señal de que sólo sería espectador. Al mismo tiempo Aziraphale dió unos pasos adelante, parecía dispuesto a comenzar la batalla que le correspondía contra Crowley.

- De verdad...vas a pelear...contra él?- la voz de Shax era entrecortada, se encontraba de rodillas en el suelo, jadeando se dirigió grave hacia Crowley, con tono incrédulo.

-Dije que lo enfrentaría...pero no voy a pelear. Jamás pelearía de esta forma con él. Durante todos estos miles de años, siempre se presentan discusiones, desacuerdos, incluso distanciamiento, pero nunca una pelea, y mucho menos una que- pero sus palabras se detuvieron abruptamente con otro ataque del arcángel.

Está vez Aziraphale había lanzado un rayo más grande y este llegó al costado derecho de Crowley, haciendo que se doblará por el impacto y el dolor.

-Hablas demasiado- Aziraphale entrecerró los ojos algo irritado

-Jajajajajaja, es gracioso...agh, pero...ugh, nunca te quejaste antes de mis momentos de diálogo largo, es más, demandabas más comunicación jeje- Crowley hablaba con dificultad por el dolor, a pesar de no necesitar el aire para vivir, su cuerpo físico reflejaba la falta de aire por el impacto previo. Al mismo tiempo que decía esto, se levantaba del todo y caminaba lento hacia Aziraphale.

Cualquiera pensaría que la guerra estaba lejos, como podían estar tan tranquilamente en sus asuntos? Todo pasaba a su alrededor, en apariencia sin interrupciones, pero no era más que Crowley y su manejo del espacio/tiempo dándoles un poco de privacidad, como si hubiera una cubierta de cristal rodeándolos, pero el desastre fuera de ésta, simplemente estaba empeorando, no quedaban dos días para poder detenerlos antes que el mundo fuera desmoronando. Tanto los dos demonios como los dos seres celestiales podían sentir los estragos fuera de ese pequeño espacio, incluso sobre los problemas que estaban implicando los portales entre cielo, tierra e infierno.
La constante apertura de portales, la fluctuación insesante de energías, el choque de fuerzas y el daño por armas humanas estaba alterando la estabilidad, algunos espacios entre infierno y tierra simplemente no terminaban de cerrar y algunos portales al cielo se abrían demasiado, por lo que demonios trataban de ir y atacar directamente al cielo, y los ángeles evitaban acercarse al infierno demasiado, sabían que estaban en desventaja en ese lugar.

Crowley sentía demasiada presión, no quería morir sin saber que la tierra no explotaría, sin intentar que su ángel recobrara el sentido, sin volver a probar por lo menos una vez más el delicioso alcohol, sin volver a ver las estrellas, sin volver a probar sus labios, sin volver a ver esas estrellas. Respiró profundo, casi se le estaba haciendo costumbre imitar esa conducta humana, caminó zancadas más amplias hacia Aziraphale, imaginando que sin importar qué, resistiría cualquier ataque que pudiera recibir, la energía celestial una vez fue parte de él, definitivamente podía resistir unos ataques más, los que fueran necesarios para llegar al ángel y regresarlo.

Metatron sintió que algo no iría bien, pero no podía intervenir, las instrucciones eran claras, era la misión de Aziraphale destruir a Crowley y liderar el exterminio de la tierra, porque en el trasfondo, también era su castigo, y nadie debía hacerlo por él. Sin embargo se mantuvo pendiente de la situación, lo suficientemente cerca para asegurarse de que las cosas sucedieran, pero no estaba cien porciento tranquilo.

Crowley por fin llegó hasta Aziraphale, lo tomó por los hombros, lo miró unos segundos y tragó saliva - Sé que lo que sea que te hayan hecho, no es lo que tú querías... sé que todo lo que creías, querías y amabas, no era ni de cerca un segundo armagedón...Dime Aziraphale, esto es lo que el Dios que tú seguías y amabas haría? No es Dios amor y vida?! Dime!! Dónde ves aquí la vida y la creación con la que describes a Dios?! Dónde está el amor que Dios promete y promueve?! Hah?!- la voz de Crowley se quebraba de vez en vez, su tono era alto y con desesperación

-Mira a tu alrededor, ángel, ves algo de eso? Sientes algo de eso?- Crowley dejó salir un suspiro, aún sosteniendo los hombros de Aziraphale, bajó su cabeza y luego sintió algo tocando su brazo. Se incorporó mirando la mano del arcángel alrededor de su antebrazo, luego volvió la mirada a su rostro y estaba por decir algo, pero pudo sentir la energía pasando a través de él, lastimando y quemando por todo su cuerpo.

- Lo siento, Crowley - Aziraphale dijo en voz baja y apretó el brazo del demonio un poco más.

Crowley pensó que todo había acabado, pero luego algo le hizo click en el cerebro... Aziraphale demostró emoción en su tono, así que miró sus ojos, pero seguían teniendo el brillo púrpura... brillo? No tenían brillo hacía unos momentos! Seguían siendo púrpuras, pero no eran vacíos, la pupila ya no era como antes... Ahí habían un par de estrellas!

Crowley no sabía si era por estar siendo martirizado o la emoción, pero su corazón estaba acelerado y latiendo fuerte, como si fuese a salirse. De alguna forma su amigo estaba ahí, pero no totalmente, sólo necesitaba seguir llegando a él con las palabras adecuadas, y sabía cuáles eran.

- No me importaría morir por tu mano, no me importaría morir por ti y en tus brazos...si con eso logro hacerte volver a ser el verdadero Aziraphale, si con eso logro hacerte ver qué lo que necesitas no es el amor de Dios, porque todo lo que amas y quiénes te aman, estaban contigo, aquí en la tierra...- Crowley sonrió y se acercó al rostro de Aziraphale, el cuál mostró asombro de lo tranquilo que se veía el demonio que estaba siendo lastimado con la energía celestial, como si fuese una constante corriente eléctrica pasando por su cuerpo. Crowley estaba tan cerca que podía sentir el calor de su aliento y escuchar ligeros "cracks" de la energía quemándole, pero antes de que sus labios se tocasen, algo jaló a Crowley y lo lanzó a varios metros de distancia, dejándole en el suelo, recostado boca arriba, semi inconsciente.
Metatron había roto su encomienda y tuvo que intervenir, tenía seguridad de que dejar que siguiera aquello sólo acabaría con el plan.

- Sigue con las indicaciones que te dieron, matalo y termina con todo, Aziraphale - Metatron lo miró serio y le habló con tono fuerte

Aziraphale miró el piso y luego miró a Metatron, asintió en silencio y se dirigió hacia Crowley mientras abría su mano derecha y la levantaba, apareciendo una espada flameante en ella. La tomó y suspiró viendo que cada vez estaba más cerca del demonio que yacía en el suelo. El arcángel sentía inseguridad en lo que hacía, aunque no sabía bien Porqué, si Dios era la verdad, el todo, lo único. Pero, no estaba ahí, viendo a los suyos peleando, o si? De verdad podía verlo todo? Estaba en todos lados? Y cómo obraba entonces en esta ocasión? Si era amor y vida, por qué se podía sentir el odio, la ira y el dolor de la destrucción ahora, y en su nombre, y por su dicho y mandamiento?!
Todas las preguntas le causaron dolor en la cabeza y el pecho, sentía como si algo se rompiese poco a poco dentro de él, pero no lo suficiente para poder detenerse de lo que le ordenaron hacer.
Por su lado Crowley apenas respondía a su conciencia, tenía los lentes rotos, los ojos semi abiertos y le dolía el cuerpo como nunca antes. Escuchó pasos cerca y por fin reaccionó con más atención, se incorporó con dificultad para ver qué se aproximaba, topando su vista con un Aziraphale que reflejaba angustia en su rostro, y eso significaba que sentía de nuevo, que estaba tan cerca que ya no había otra opción que llegar hasta donde los límites le permitieran o incluso más allá, pero Aziraphale volvería. Finalmente se levantó del sueño, se quitó los lentes destruidos arrojandolos por ahí y dando pasos hacia el arcángel.

- Crowley...no quiero hacer esto...- la voz de Aziraphale era baja, con dolor- Pero no puedo detenerme!!

-Todo va a salir bien... sé que harás lo que es correcto, eres un ángel después de todo- Crowley le sonrió con dulzura

Aziraphale sintió lágrimas correr por sus mejillas y se apresuró hacia Crowley, movió su brazo y la espada zigzagueó en el aire, al mismo tiempo que Crowley bajó de rodillas al piso y agachando el rostro. Metatron observó la escena satisfecho.

Había sangre oscura, casi negra, regada por el suelo al rededor del demonio que sostenía con su brazo en su torso una gran herida; Se podía observar más líquido oscuro en las comisuras de su boca aunque seguía escondiendo el rostro, y pasados unos segundos, Crowley cayó boca abajo al piso, inmóvil.

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Hasta aquí la parte 3 :) espero esté siendo de su agrado y pues la siguiente ya será el final. Muchas gracias por leer y cualquier comentario es bien recibido❤️☺️ no me odien xD

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