My different alpha ✧ KookTae

O18

Aunque todo este de color de rosas, las tres semanas estaban siendo muy complicadas para JungKook y la empresa. Por fin consiguió un contador, quien era beta; un contador que no tratara de robarle o coquetearle.

La empresa ha requerido mucho de su presencia, la nueva cámara de seguridad avanzada en estos tiempos se encontraba lista para salir al mercado. Papeles que firmar, sueldos que pagar.

Esas mismas semanas su secretario, WooYoung, entró en celo, eso significó que el secretario de YoonGi tampoco estaba. Los dos tuvieron que hacer el triple de su trabajo. Al volver WooYoung, JiMin empezó su celo, entonces YoonGi tuvo que ausentarse cuatro días. Después la siguiente fue YeJi, quien lo pasó con un alfa de internet.

JungKook tenía mucho trabajo en su espalda, el estrés lo tenía de un humor inaguantable. Su lobo gruñía sin ningún motivo, aunque viera a su alfa en las noches, su humor empeoraba cuando llegaba a su cama solitaria sin el olor de su alfa.

Las ventas subieron gracias a la nueva cámara que JJS Company sacó al mercado. Las cifras en su cuenta bancaria subieron a millones, JunSeo disfruta mucho esos millones comprándole regalos a su Omega, a su mamá y mejor amigo Jeong-In.

JungKook lo regañó unas cuantas veces para después darle una tarjeta que llenaba de dinero cada domingo.

Ahora, JungKook se encontraba en su oficina escribiendo en su computadora. Acomodaba registros, cuentas y muchas cosas más mientras una taza de té se encontraba a su lado.

Eran las 5 de la tarde y estaba muy enojado con uno de sus empleados. Gruñó mucho mientras hacía el reclamo amenazando de despedirlo si sigue siendo un inútil. Aunque eso último fue su alfa quien habló.

Se encontraba estresado y con ganas de propinarle un golpe al primero que cruce esa puerta.

Para su mala y buena suerte, la puerta de su oficina se abre con delicadeza para que después un alfa alto y rizado entrara junto con una pequeña bolsa.

JungKook siente el aroma de su alfa relajarle de una manera necesaria, sus pulmones llenándose del olor más maravilloso del universo.

— Alfa — JungKook gruñe un poco dejando de lado su trabajo en la computadora. Se coloca de pie para tomar a su alfa en un abrazo que hace sus pelitos erizarse.

— Kook — la voz grave y profunda de TaeHyung hizo una danza en los tímpanos de JungKook, quien se deleita con la voz que tanto extraña y ama — Espero no molestar — JungKook niega mientras sale de su escondite. Sus rostros quedan cerca, aunque JungKook deba inclinarse un poquito.

— Nunca molestas — JungKook junta sus labios con ansias, extrañaba a morir los labios de su rubio. La danza no se hizo esperar, sus labios se movían en un compás mágico — Mmmm, extrañaba tu boca — TaeHyung ríe adorablemente.

— Yo también, te traje esto — se separa un poco para entregarle la bolsita que traía consigo.

JungKook se separa dando dos pasos hacia atrás, al abrir la bolsa su estómago ruge. Unos deliciosos espaguetis con crema se hicieron notar.

— Espero te gusten, tuve el presentimiento de que tenías hambre — TaeHyung le entrega una botella de jugo — Ven alfa, ven y come — lo dirige al mueble de la oficina.

JungKook empieza a comer sin evitar soltar algunos sonidos de satisfacción; los espaguetis estaban deliciosos. TaeHyung se encontraba feliz viendo a su alfa comer sus espaguetis hechos con amor.

— Están deliciosos, amor — la sonrisita en los labios de JungKook mientras come es lo que TaeHyung quiere ver siempre. También quiere ver siempre los ojitos brillosos de su cachorro JunSeo cuando bebe de su chocolate caliente.