Viviendo Con El Asesino

Madrugada

4:02 am

No podía creerlo. Y ahora que se supone que haga. No he dormido muy bien que digamos y voy de mal en peor. Siempre he sido buena para las batallas mentales pero nunca había tenido una tan pésima.

Papá y mamá ya se marcharon al trabajo, mucho más temprano de lo normal. Y yo sin poder descansar. Si no tengo opción, me iré a la ducha.

Me levanté con desgana y caminé hacia el baño. Me cepille los dientes casi sin mirar al espejo. Me deshice de la pijama y me metí bajo la ducha. El agua salió helada, pero al segundo tomó una temperatura aceptable. Metí primero la cabeza para luego proseguir con el cuerpo. Trataba de que todo el peso el agua, de alguna manera, cayera sobre la cabeza para que se llevara todos mis pensamientos. Cuando estoy apunto de lograrlo, la sensación de escalofríos se hizo notar. Me estremecí lo suficiente como para no seguir malgastando el agua. Cerré la llave, me envolví en la toalla y fui a mi habitación. Me coloqué lo primero que encontré. Una camisa de color gris sin mangas y algo estirada. Si, ya sé. Y no, no me coloqué pantalones. Me dejé caer sobre la cama.

Se preguntarán de que se trata todo esto, pues verán. No he dejado de pensar en la declaración y propuesta de Zack. Aun no puedo creerlo y me parece algo...irreal. Lo digo por como todo ha pasado. Supongo que ya es momento de darle "Erase" a eso de mi mente o no podré seguir.

Me siento de golpe y golpeo mis mejillas con las manos abiertas. Miré el reloj y aun eran las 4:48 am. Me levanté para tomar uno de los libros que tenía en el estante siguiente a la ventana cuando algo desvía mi atención. La luz de la habitación contigua a mi ventana estaba encendida y una sombra caminaba de lado a lado, era Jeff, pero... ¿Porque levantado a esta hora?

Traté de ignorar ese hecho y me concentré en la búsqueda del libro. Seleccioné "Juramento de Sangre" una de mis novelas favoritas. Arrastro el silla hacia el escritorio y cuando me siento, un ruido desvía mi atención, nuevamente.

Provenía de la ventana. Camino y me paro en frente corriendo las cortinas. Era Jeff...

Creo que voy a morir....

Al otro lado y en la ventana contigua, estaba él. No sabía si estaba viendo una ilusión o algo así pero era.... algo diferente. Tal vez divino.

No llevaba su abrigo blanco o alguna camisa algo menos gruesa. Debía admitir que no esperaba semejante aspecto corporal. Parecía una escultura, gracias a la palidez de su piel. Y su cabello... al descubierto y empapado, como si hubiese salido de la ducha. Parecía modelo para perfumes o colonias masculinas de Paco Rabanne.

Mi mente estaba en proceso de admiración total. No emití ningún sonido. Lo contemplaba con la mente en blanco. Gracias a Dios que rompió el silencio.

- Emm...Buenos Días. ¿Despierta desde temprano?-preguntó curioso

- Eh.. Oh.. Si. No he podido dormir y pues, tenía pensando leer.- respondí algo nerviosa, pero no entendía el motivo

- ¿Leer? ¿Cómo que tipo de lectura sería esa?- mostraba más interés que otra cosa

- Pues... en estos momentos estoy leyendo "Juramento de Sangre".

- ¿Escrita por Christopher Farnsworth?- abrió sus ojos fascinado

- Si. Veo que le conoces.- sonreí tímida

- Por supuesto. De hecho, mi novela favorita es Juramento de Sangre.- admitió

- ¿De verdad? La mía también.- no pude resistirme

- Vaya! ¿Que es lo más que te gusta de ella? Claro, además de que el agente Cade es todo un galán según la novela.- se sentó en el marco de la ventana y sus pies quedaron colgando

- ¿No crees que eso sea peligroso? Podrías caerte.- me preocupé

- No pasara nada, no te preocupes.

- Pues, la verdad. Diría que lo que más me gusta es como Christopher puede unir a una criatura de las tinieblas con un ser humano para convivir como compañeros de trabajo, hablando básicamente de Cade y Zach. Es decir, ¿Seria eso posible? ¿Humano y algo inhumano? El no saber si Cade podría atacarle mientras duerme o mientras le da la espalda, pone a cualquiera en situación de tensión.- me sumí en mi propia opinión sin darme cuenta

- Eres bastante atenta en ese aspecto. Pero.. ¿Que me dices del hecho de que Cade aunque quisiera, no podría atacar a los funcionarios del presidente?- preguntó profundizando más el aspecto

- Digamos que toda la culpa de eso la tiene el juramento de sangre que hizo a cambio de vivir. Aun si fuera bajo el mandato del hombre más cruel del mundo. Todo sea para vivir.

- Entonces ¿Estarías a favor de la unión de dos cosas totalmente opuestas o diferentes?

- No le veo el caso negarme. Tenemos que aceptar las diferencias, fueran buenas o malas.

- Veo que eres todo una chica lectora. Eso me gusta.- otra extraña sensación recorrió todo mi cuerpo en cuestión de segundos

- Y tú, nunca pregunté. ¿Qué haces despierto desde tan temprano?- pregunté tratando de no sonrojarme

- Para ser sincero, no suelo dormir mucho. De hecho, suelo dormir muy rara vez.-desvió su mirada hacia el cielo nocturno

- Eres una especie de vampiro.- jugué con las palabras para no decir algo fuera de lugar

- Je je je.. Algo así, pero sin comer o beber sangre.- respondió

- Vaya.... Esto....- me puse como tomate, me percaté de algo que ni siquiera Jeff había notado o al menos eso creí

Al ver mi desconcierto, Jeff volteó hacia mí.

- Deberías fijarte más en lo que vistes.- se rió algo pícaro y atrevido

Si, se había dado cuenta y ahora mi vergüenza es más que colosal. Doblé mis rodillas, de manera que él no pudiese continuar con su ligue. Aunque cuando le miré segundos después , se encontraba mirando al cielo de nuevo. Sonreía pacífico y calmado.

- Tranquila. No diré nada de que utilizas ropa interior de osos pandas.- sonrió igual de calmado

- No es gracioso. Te estabas aprovechando.- ¿sonrojada? ¿Que es eso?

- Vale, vale. Recuerda que tenemos una salida pendiente.

- Bien. Recuerda que me debes una partida en el play.- dije triunfante

- De no haber sido porque os quedasteis hablando sobre Christopher, habríamos tenido esa partida.

- ¿Y ahora yo tengo la culpa?

- Algo así.-dijo burlón

- Sobretodo mi culpa. Si, claro.- me pongo de pie- Supongo que te veré en el colegio. Me iré a cambiar y a prepararme. Deberías hacer lo mismo.

- Tienes razón. Eso haré.- dijo bajándose del marco de la ventana dónde estuvo sentado- Partiremos a las 7:00 am, te parece bien?

- Si, hasta orita.

- Hasta orita.

Ambos cerramos las ventanas y corrimos las cortinas.

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Heyaaaaaaa😁😁😁😁

Ya lo tienen😍😍😍

Voten y continuen😃😃😘😘