Me sentía de lo peor...
Hace unos días había peleado con Aldo, mi novio o ex novio... la verdad no lo sabía.
Me hacía tanta falta su presencia, él lo era todo para mí.
Yo lo conocí mucho antes que él a mi y aún así logré llamar su atención, no sabía cómo... pero lo logré.
Supongo que después de todo la vida se trataba de esto, a veces habían problemas, algunos tenían soluciones y otros solo un final.
No podías elegir, aunque quisieras todo ya estaba predestinado.
—Lavare los platos antes de irnos — informo a mi madre que está terminando de acomodar las maletas.
Iríamos de viaje a un crucero con la Familia Garza y Guarnizo, así que teníamos que ir a tomar un avión que salía en un par de horas.
Deje mi teléfono a un lado, después de haberlo revisado por décima vez en lo que iba el día, esperando algun mensaje de él.
Me acerque al lavadero y recogí las mangas de mi chaqueta negra para no mojarlas.
Y así comencé a lavar cada plata.
No sé porque, pero cuando lavaba los platos miles de cosas venían a mi cabeza.
Intentaba que en alguno de esos momentos pudiera encontrar una solución a este problema con Aldo.
—¿Qué sucede, Annie? — escuché detrás de mi.
Gire mi rostro levemente encontrando a mi mamá en medio de la puerta que dividía a la cocina y sala.
La mayor se acerca a mi lado.
—¿Qué tal si tu enjabonas y yo enjuagó? Y de una vez me cuentas que pasa por tu linda cabeza.
Sonrió.
Siempre tuve una linda relación con mis padres, los amaba con toda mi alma.
Nunca tuve hermanos, así que siempre éramos solo ellos y yo contra el mundo.
—¿Y bien? — cuestiona mi mamá.
Al parecer fingir no había sido suficiente.
—Mamá, ¿Por qué el amor es tan cruel? — pregunto mientras mi voz se vuelve un hilo con cada palabra que menciono.
—Cariño — murmura acariciando mi espalda — ¿Paso algo con Aldo?
Asiento y siento mis ojos llenarse de lágrimas.
—Nos peleamos por algo tonto — contesto — Pero parece que ninguno de los dos quiere dejar el orgullo atrás.
—Annie — la observo — Cuando eres jóven las cosas se ven imposibles, pero solo dale tiempo, Aldo y tu son tan diferentes, pero tan iguales a la misma vez, yo se cuánto te ama ese muchacho, solo déjalo que se de cuenta de su error y volverá.
—¿Tu crees? — interrogo y ella me sonríe.
—Claro que si mi niña, esperemos a que pase este viaje y verás como las cosas se solucionarán, ¿Sí? — asiento — Ven, dame un abrazo.
—Pero tengo las manos mojadas.
—¿Y eso que?, solo es ropa.
Me acercó a ella y la enrolló entre mis brazos, sintiendo ese calor tan especial que solo ella sabe darme.
Característico de una madre...
—Ya es hora de irnos — anuncia papá entrando a la cocina — No puede ser, arruine el hermoso momento.
ESTÁS LEYENDO
Si decido quedarme || Aldo Geo
FanfictionNuestra historia ya está escrita... no sabemos el final, así que solo tenemos que seguir la vida tratando de fingir no tenerle miedo a la muerte. Annie tendrá una segunda oportunidad. ¿Tú que elegirías? La vida o la muerte... ¡Adaptación de la pelíc...