Roier, te odio - [[Roier y tu]]

21. Don't know if you love me or you want me dead

- ¿Y que esperabas? Osvaldo ya sabe todo.

- Lo sé... el dejó de hablarme y se fue a dormir a la sala.

- ¿Y no te sientes mal por él?

- Si y no. - Soltó.

Lo miré confundida.

- Me siento mal, porque se que el sentía cosas por ti. Pero a la vez no tanto, porque ahora sabe que eres mía.

- ¡¿Quién te crees que eres para reclamarme como tu propied...

- Shhhhh. - Había puesto su mano en mi boca. - No grites, sigue siendo de madrugada.

Su cara estaba tan cerca de la mía que podía sentir su aroma. Agradezco que me haya tapado la boca porque no me hubiera resistido a probar esos labios.

- Eres un idiota. - Dije con su mano aun cubriendo mi boca.

- ¿Qué dijiste? - Me quitó la mano.

- ¡Idiota! - Susurré. - Ni creas que soy tuya.

- ¿A no? - Se acercó más y me acorralo contra el armario. - Eso no parecía el día de ayer cuando alguien me beso.

- Eso lo decidí yo. En todo caso tu llegaste a ser mío. - Quería seguirle el juego.

- Que tramposa eres. - Soltó una risita. - En ese caso me toca a mi llevar el mando.

Y sin decir más empezó a dejar pequeños besos en todo mi cuello.

Traté de moverme y apartarme, pero me agarró los brazos y los subió por encima de mi cabeza.

- No irás a ninguna parte. - Y unió nuestros labios en un beso que fue incrementando a uno cada vez más húmedo.

- No quiero huir. - Dije agarrando aire. - Simplemente quiero que sepas que yo también puedo tener el control.

Acto seguido levante mi rodilla haciendo que el se separa y aproveché el espacio para patearlo del abdomen y que caiga a la cama.

El me miró sorprendido.

- No tenía idea que eras tan agresiva.

Comencé a acercarme lentamente y me senté sobre sus piernas.

- No me conoces lo suficiente. - Dije soltando mi peso y sintiendo toda su erección a través del pantalón.

El llevo la cabeza hacía atrás sintiendo placer.

Le quité la camiseta dejándome ver su abdomen bien trabajado que me tenía hipnotizada desde hace mucho. Puse mis manos en su pecho y comencé a deslizarlas sintiendo su calor.

El trataba de buscar mis labios desesperadamente, pero yo solo me alejaba.

- Tranquilo. - Dije sonriendo.

- Me vuelves loco. - Sonaba agitado.

Desanudé el cordón de sus shorts y comencé a bajárselos. Mientras me arrodillaba al medio de sus piernas.

- ¿Qué harás? - Me miró asustado.

Saqué su miembro frotándolo de arriba abajo haciendo que el gimiera por lo bajo. Y sin previó aviso me lo metí a la boca.

- ¡Mierda T/N! - Le tomó por sorpresa.

Comencé a succionar lentamente y poco a poco iba aumentando la velocidad. Me gustaba tener a Roier en esta posición.

- Para, para para. Me harás terminar. - Dijo el sentándose y tratando de pararse. 

- Fue para que no se te olvide que no siempre puedes tener el control. - Me levanté lentamente y solo sentí un brazo jalar por mi cintura tirándome a la cama con agresividad. 

Me hizo soltar un leve grito.

Sentí como empezó a gatear sobre mi lentamente. Traté de poner las manos en sus hombros pero las agarró con fuerza al rededor de mi cabeza.

- ¿Crees que te dejaré salir ilesa después de eso? 

- No creo que seas capaz. - Dije cínica.

Unió nuestros labios sintiendo como nuestras lenguas bailaban a su propio ritmo. Y sentí un leve mordisco en mi labio inferior.

Comenzó a levantarme la blusa, dejándome en sostén. Soltando besos cada vez más cerca al escote de este.

Se sentó en mi abdomen y podía ver su erección en primer plano. No me había dado cuenta que ya estaba sacándome el sostén y amarrando con él mis brazos.

- ¿Te digo señor Grey o amo? - Susurre en una carcajada.

- Cierra la boca. - Dijo besando mis pechos, haciendo que suspirará y cerrará los ojos ahogando un gemido.

Acto seguido comenzó a sacarme el short examinando mis piernas y mi pequeña braga la cual ya estaba totalmente húmeda.

- Aaaah. ¿Con que reclamando por mi? - Soltó acercándome a mi área y sacando la braga muy lentamente.

- Cállate. - Suspiré nerviosa.

Se levantó un momento a observar el panorama mientras buscaba sus shorts y sacaba un paquetito del bolsillo. Lo rasgó y lo deslizo por su erección.

- Mas 10 de IQ por saber poner un condón. - Sonreí cínicamente.

- Menos 10 de IQ para ti por no haber preguntado si tenía uno. - Me guiño un ojo.

"Touché" pensé.

Me separó las piernas y se puso al medio buscando camino. Se inclinó una vez más para besarme.

Fue cuando sentí sus dedos acariciar mi sexo. Solté un gemido en respuesta.

- ¿Estas lista? - Susurró en mis labios.

No podía hablar. Sus dedos sabían moverse.

- Hazlo. - Dije con dificultad.

- ¿Qué dijiste preciosa?

- ¡Hazlo!

- No te escucho.

- Por favor. - Gemí.

- Exacto. - Sonrió. - Quiero que supliques.

Y empecé a sentir como se deslizaba dentro de mi.

- Te odio Roier. - Añadí.

Sentí como se detenía y volvía hacía atras.

- ¿Qué dijiste? 

- Te...

Y sentí como me embestía con fuerza haciendo que soltará un grito.

- ¿Qué opinas ahora? - Dijo moviéndose suavemente. 

- Que puedo odiarte más tarde. - Y busqué sus labios una vez, haciendo que el aumentara el ritmo y fuerza de sus embestidas.

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Aaaaah es primera vez que escribo escenas sexosas xd no me juzguen y espero les haya gustado. <3