Emily
Después de salir de la mansión Torrance me siento más tranquila. Rubén me trajo a un lindo restaurante, no es un lugar de lujos, pero es muy tranquilo y bonito.
La mesera llega a nuestra mesa y nos pasa la carta para elegir qué comer.
—Bienvenidos, este es el menú. ¿Qué desean pedir?Rubén eligió unas botanas; yo elegí pasta, papas a la francesa y dos copas de vino. Luego la mesera se retira con nuestro pedido.
—¿Qué planes tienes a futuro? —Rubén rompe el silencio entre nosotros. No dejo de pensar en la forma tan sucia en que me habló el señor Cole, y lo peor de todo es que me gustó lo suficiente como para mojar mis bragas.
—Me encantaría estudiar arte. En cuanto mi mamá y yo estemos lo suficientemente estables, entraré a la universidad.
—¡Wow! Eso es interesante, Emily. —Se queda unos segundos mirándome fijamente y luego agarra mis dos manos, envolviéndolas en las suyas—. Te seré sincero, Emily, me agradas y me gustaría intentar algo contigo.
Me quedo sin palabras, aunque eso ya lo venía venir. Solo he salido dos veces con un chico en mi vida y, después de lo que me pasó con mi antiguo padrastro, no volví a salir con nadie.
—No sé si estoy lista para intentarlo con alguien. Vayamos despacio, por favor, Rubén.Rubén se relaja en su asiento y me regala una sonrisa.
—Entiendo, al menos no me rechazaste.El resto de la cena transcurre entre risas. Conozco más a Rubén; me contó sobre su infancia. Cada vez que trataba de saber de la mía, yo apartaba el tema. No me gusta hablar de mi infancia.
7 años atrás:
Entro en nuestra casa y veo que todo esta silencioso, de seguro mi madre aún sigue en su trabajo. Cuando estoy apunto de dirigirme a mi habitación veo una figura salir de la cocina.
—¿y mi madre?— es lo único que me sale decir, el miedo se apodera de mi, y observo cómo Fran "mi padrastro" me mira las piernas y los pechos. Siempre uso ropa holgada y eso a él nunca lo detiene. Veo en la forma en que me mira los pechos y de repente me siento desnuda. No se a vuelto a trever a tocarme cuando le dije a él que se lo iba a contar a mi mamá si me volvía a tocar, aún soy menor de edad, tengo solo 15 años, el puede ir prision.
—La Perra de tú madre no ha llegado—Siempre me he imaginado a Fran con un cuchillo clavado en su pecho, Amaría verlo, a eso yo le llamaría arte, ver la forma en que su sangre se derrama por todo su pecho. Mi madre aún no ha llegado y estoy encerrada arriba en mi habitación, para que Fran no entre, hoy ese hijo de Punta va a golpear a mi madre solo por llegar unos minutos tarde.
Presente
Rubén me deja al frente de la mansión, un poco alejado de la puerta de entrada, y me ayuda a salir del auto.
—¡Wow! Este lugar es impresionante, esa familia debe tener mucho dinero —me digo a mí misma: "Más de lo que te imaginas".
—Gracias por invitarme a salir contigo hoy —me inclino y le doy un beso en la mejilla.
—Gracias a ti por aceptar salir conmigo, Emily —agarra mis manos entre las suyas y me dice mirándome a los ojos—. No olvides lo que te dije hoy en la cena, de verdad me agradas.
Luego Rubén entra en su auto y veo cómo se aleja. De repente, me siento observada y alzo la vista hacia la mansión antes de dirigirme por la puerta trasera de la cocina. Veo una sombra mirando hacia abajo, hacia mí, desde la tercera planta: el señor Cole Torrance.
Siento que alguien se acerca por detrás de mí y veo a Drystan aproximándose con su rostro serio, como siempre.
—El señor Cole me pidió que le ordenara que subiera a su habitación apenas llegara. —Siento cómo mi alma abandona mi cuerpo. ¿Qué quiere este loco ahora?
—¿Estás seguro? —le pregunto con nerviosismo a Drystan.
Veo casi una sonrisa en su rostro.
—Si fuera tú, ya estaría subiendo. Al señor Cole no le gusta que lo hagan esperar.
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Peligroso Deseo +18 [libro 1]
RandomEmily es una chica de bajos recursos que llega a la ciudad de Londres cuando su madre consigue trabajo para la familia Torrance, una de las tres familias más adineradas, no solo de Londres, sino de toda Europa. Ahí es donde conoce a Cole, el hijo he...