En la situación anterior vimos como nuestras protagonistas estaban en una evento particular, en dónde tras haber ayudado a una mujer, esta al parecer comunicó esto al pueblo cercano, lo cual hizo que en cuestión de un oard e semanas armarán un lugar de adoración en dónde esa mujer dijo que fue ayudada por unas arañas divinas, así esperando la aparición de estas criaturas, hasta que un día llega corriendo una mujer joven, la cual ese día le tocó hacer la guardia para verificar en cualquier momento la aparición de queiens esperaban, dodne comunicó lo que tanto esperaban, así que rápidamente prepararon todo para partir a ese lugar. Después de unos minutos de caminata llegaron al lugar, donde al instante vieron a aquellas arañas reposadas en la edificación que hicieron para ellas, poniéndose alegres, curiosos y felices, empezando todo el rollo que vimos antes, unos adorando a las Taractect, otros dando ofrendas y unos pocos poniendo puestos como si esto fuera un festival.
Hiiro: Este es el paraíso *felizmente comiendo las frutas que le daban como ofrenda*
Casilda: No te acostumbres, ellos piensan que somos una especie de protectores, pero lastimosamente sabes que seguimos en el ojo del águila de ese Rey demonio, así que no les hagas más iluciones y aclaremos todos esto, súmale también a aquellos elfoa ques subimos acabando durante estos días, cada vez hay más presencias de ellos en esta zona, por lo que deben buscar algo o a alguien, ni hablar de los bandidos que asechan cada vez más los alrededores *seria*
Hiiro: *Suspira* es cierto, se me olvidó por un momento, pero debes admitir que es lindos de querido de esta manera, en mi vida anterior siempre era intimidada y dejada de lado *algo decaída*
Casilda: No te preocupes, pero a pesar que me pasó a mi igualmente en gran parte de mi vida escolar, no quita lo nervioso que me pone esto, pues jamás busque ser adorado de esta forma, solo buscaba ser un investigador, historiador o maestro, si fuera lo contrario me hubiera echo youtuber
Hiiro: Se suponía que yo era la tímida, pero veo que incluso alguien cómo tú tiene su lado vulnerable socialmente hablando
Casilda: Cállate, una cosa es tener una charla ocasional con alguien, y otra es tener que hablar con un grupo de personas que esperan algo de tí de manera fanática o similar
Hiiro: Ok, bueno, deja guardo las pequeñas montañas de frutas que dejaron en mi dimensión de bolsillo para más tarde *haciendo lo dicho, sorprendiendo a todos al ver cómo sus ofrendas desaparecían en la nada, maravillandolos más*
Casilda: Parecen niños chiquitos cuando ven algo muy colorido en la televisión o en la pantalla de un celular/tableta/computadora/etcétera *suspira*
Los pobladores)
Casilda:
Hiiro: Jajajaja, los dejé asombrados, ¿verdad?
Casilda: Y allí sigue
Hiiro: Bueno, es hora de comunicar lo que tengamos que decir
Casilda: Ok
Así ambas se comunican con los pobladores, los cuales se sorprende aún más, peus ahora entendían lo que decían entre ellas, aunque no creyeron la parte contada por aquella mujer de que sabían hablar el idioma humano, pero ahora estaban contemplando como esas arañas que consideraban protectoras les decían el como sencillamente no podrían protegemos todo el tiempo y que había una amenaza que las asechaba que hería incluso más fuerte que ellas y estaban cambiando de posición para que no debastaran este lugar, dejandolos algo decaídos, otros molestos, pero comprendieron lo último, pues sabian ahora que un ser poderoso estaba en busca de la cabeza de queiens asesoraban y estaban haciendo lo posible para que en una hipotética pelea no destruyan el lugar.
YOU ARE READING
Soy un pendejo, ¿y qué?
FanfictionTras los desafortunados acontecimientos de un joven adulto, dónde se vió liado en un asunto que no debía atestiguar, el cual lo lleva a la muerte, pues gracias a un ser de le otorga una nueva vida, sin embargo tendrá que superar varios retos para lo...