Esta noche iba a beber, bailar y vivir. He gastado 4 años de mi vida para obtener que mi -ex- novio Aaron me encagañara con Alexandra. Su "mejor amiga".
Apenas vi aquella escena de Aaron embistiendo a Alexandra, sentí mis muros caer. Tomé mis maletas y las llené con mis pertenencias rápidamente para luego irme de ahí sin prestarles atención.
Ahora estoy terminando de maquillarme para salir a un club muy famoso en la ciudad de Los Ángeles.
Terminé en colocarme mi labial rojo, montarme en mis tacones de aguja negros para empezar a bajar del hotel donde me hospeda.
Las cosas que te han pasado, Mia.
Me dije a mí misma. Lo que me paso fue vergonzoso, pero hoy no era para pensar. Era para olvidar.
Ya había llamado a el taxi cuando estaba maquillándome. Así que, apenas baje estaba el taxi esperando.
Le dije el nombre del Club a el señor conductor y este rápidamente empezó a conducir.
Cuando llegue, no tuve que hacer fila. El guardia era mi amigo.
- Hermosa como siempre, Mia.- me piropeó Steve.
- Gracias.- conteste con una sonrisa forzada.
Él sonrió de vuelta dejándome entrar.
El club estaba repleto. Supongo que era lo que quería una chica de veintitres años.
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De Jason ©
Teen FictionUna noche bastó para conocer a un ser despreciable. Y una noche bastó para que me diera la cosa más hermosa de mi vida. Un hermoso bebé. "Es tuyo." "¿Y qué quieres que haga? Si tan fácil te lanzaste a mis brazos, no me quiero imaginar con cuantos m...
