Larry Stylinson - One Shoots.

Jared

🌼

Louis ama a Harry, y Harry ama a Louis. Pero Harry tiene un hijo, uno irrespetuoso que odia a Louis, y presiona tanto que los rompe.
Donde Jared tiene que aprender a vivir con sus cagadas, sin poder reparar todo en el proceso.

[•hay final feliz•]

[L.S]

-Esto es asqueroso.- Masculló borde, escupiendo la comida directo a la mesa, mirando con desprecio al hombre sentado al lado de su padre.

Si algo era Jared Styles, definitivamente era un puto mal aprendido.

-¡Jared!- Harry soltó los cubiertos, enojado, mirando furioso a su hijo de 15 años.- ¡¿Qué te pasa?!

-¡La comida de tu noviecito de mierda es asquerosa!- Contestó altivo, mordaz. Y Louis se hartó.

-No toqué una sola cosa de la cocina.- Comentó neutro, dejando sus cubiertos, y le alzó las cejas al adolescente que le frunció el ceño.- Si piensas que cociné solo porque me viste servir, te equivocas, acabas de escupir la comida de tu padre. Buen provecho.

-¿Te vas?- Preguntó ilusionado al verlo ponerse de pie, alzándole las cejas cuando se quedó quieto.

-¿De verdad quieres que me vaya?

-Hace años.- Aclaró, frunciéndole el ceño a su padre que se tapó el rostro.- No te soporto, no te quiero en mi familia.

-¡Joder, Jared, es suficiente!- Harry realmente le gritó, haciéndolo saltar y mirarlo mal. Pero su padre estaba muy ocupado moviéndose tras el otro, enojándolo.

-¡Él preguntó!- Se defendió, molesto.- ¡Ven a cenar conmigo!

Louis se metió en la habitación de Harry, pensando que las pocas cosas que tenía por ahí eran sacrificables. No soportaba estar en esa casa ni un minuto más.

-Louis...- Harry corrió tras él, como siempre, pero negó cuando escuchó la puerta cerrarse.

-No te quiero escuchar.- Dijo duro, poniéndose sus zapatos.- Estoy harto, Harry. Harto.

-Podemos...-

-¡No podemos una mierda, joder, abre los ojos!- Le gritó él ahora, con los ojos aguándose demasiado rápido.- ¡No puedo más, no quiero soportarlo más! ¡Me merezco más que un mocoso de mierda jodiéndome la puta vida, joder, ya no es suficiente pensar que al final del día voy a estar contigo porque ni siquiera quiero estar aquí! ¿Tienes una puta idea?- Rie, sacándose el anillo que pesaba demasiado en su mano izquierda, tirándoselo a la cama sin dejar de verlo, duro.- ¿Tienes idea lo que es ver tu anillo de compromiso y querer llorar de frustración? ¿Tienes idea de la mierda que es que quiera inventar mil y un excusas para no venir a esta puta casa porque ya no sé qué hacer para que tu mocoso...?- Hizo énfasis.- ¿Me respete? Ni siquiera pido que le caiga bien, dejé esa puta esperanza hace demasiados años, pero con que no me escupa la puta comida en la cara me alcanza.