LA CAPITANA [Levi × reader]

Capítulo 07.

—Capítulo 07—.

“Hacer lo que nos dé la gana”.

La alta mujer se miró en el pequeño espejo por última vez todavía algo indecisa, se pasó el mechón de cabello tras la oreja, suspiró pesadamente y, tras plancharse un poco la chaqueta marrón, salió del baño dispuesta a empezar el día correctamente.

Para cuando salió, se sentía realmente extraña, ansiosa. Se dirigía al comedor a acompañar a su escuadrón en el desayuno, ya ella había comido más temprano junto a Hange y Nanaba, pero, de cualquier forma les acompañaría por un rato, sin contar que, esa mañana estaría entre ellos dicho pelinegro.

Los pocos cadetes por los pasillos y, otros superiores o compañeros, la miraron discretamente, algunos incluso de forma directa. No sabía si eso era bueno o malo. Era la primera vez que hacía ésto, era la primera vez que permitía que su larga cabellera estuviera suelta. Siempre llevaba una coleta alta o, trenzas distintas que, le hacía Nifa o Nanaba.

Nunca le gustó, desde que salió de la policía militar, asumió que, ser femenina, era un símbolo de debilidad, que el simple hecho de lucir "bonita" la hacía vulnerable y fácil.

Pero ese día no tenía problema, bueno, sí que estaba algo incómoda, sobre todo por las miradas de sus compañeros, sentía que eso era una falta de respeto hacia ella, no un halago. Pero, lo estaba haciendo por una razón en específico, por una persona en específico.

Llegar al comedor fue peor para ella. Dudaba de si atarse el cabello con la liga que tenía en la muñeca o no, pasó de cualquier forma con la mirada en alto y, el rostro serio, al menos así, sentiría menos humillación. La mayoría de las mujeres en la legión llevaban cabello corto, Nanaba, Nifa, Hange, Petra y otras mujeres de distintos escuadrones, nunca pasaban de debajo de los hombros, sentía que, estaba incumpliendo con algún elemento del uniforme.

Pasó de largo a la mesa donde estaba Erwin, Mike y Hange siempre para saludarlos antes de irse con su escuadrón.

—Buenos días —Saludó ella sentándose.

El trío lucía estupefacto, hasta la misma Hange.

—¡Capitana, luces muy hermosa! —halagó Hange poniendo las manos en la mesa—, te ves mejor así, eh.

Erwin sonrió repetidamente ante el comentario de Hange, cruzado de brazos con media sonrisa.

—Siempre dije que lucías todavía más hermosa con el cabello suelto —Soltó Mike, embobado.

Ésto sólo la frustraba más. Así que, sólo pudo ponerse en pie nuevamente, tratando de no lucir tan molesta por los comentarios positivos que estaba recibiendo.

—Voy con mi escuadrón, nos vemos más tarde. Buen provecho.

Y huyó de ahí desesperadamente, aunque lo disimuló lo más que pudo.

Mike tenía razón, él siempre le decía esa clase de comentarios, pero, nunca le importó, nunca le hizo caso. ¿Por qué ahora le importaba que lo dijera Ackerman? Empezaba a preocuparse cada vez más por su propio comportamiento.

¿Estaba actuando débil?, ¿Estaba permitiendo que Levi la pisoteara?

—¡Buenos días, capitana! —Saludó Nifa con una sonrisa.

Antes de que hubiera podido recogerse el cabello, ya estaba frente a la mesa y Nifa habló saludándola sonriente.

—Buenos días, muchachos.

Y ahí estaba, mientras todos hablaban y comían, él estaba justo en medio, en silencio, comiendo tranquilamente, ignorando a sus compañeros.

—¡Buen día, capitana! —Saludaron al unísono casi todos