CAPÍTULO 50.- segundo fragmento

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—Si, ustedes hablan muy alto —gruño Murat—, creo que la sentenciaran a muerte a la desgraciada y posiblemente el mate de Bastian asesinara a Auguste si lo declaran inocente.


—Deberías huir mientras puedas Auguste —le pico Isaac—, los mates celosos son capaces de muchas cosas.


—En ese caso debería huir de toda civilización —dijo Auguste—, si los mates de todas las personas a cuáles les gusto se juntan, tendría que enfrentarme a un ejército.


Casi todos los futuros alfas bufaron.


—Tan humilde como siempre —se burló Joon.


Bastian se puso demasiado sonrojado. Era humillante que Auguste hubiera escuchado toda su conversación.


Auguste se dio vuelta en su asiento, sonriéndole.


—Tengo que disculparme —susurro Auguste—, me... ayudaste, no quería ponerte en esta situación.


—¿Auguste Legrand se está disculpando? —preguntó Joon actuando estar demasiado sorprendido—, se cae el cielo hoy mismo.


—Cállense idiotas entrometidos —Auguste se enfocó en Bastian—, yo creo que el problema real es que Kerim me odia y el sentimiento es mutuo. No ha sido tu culpa Bastian, si quieres hablo con él.


—No te preocupes —Bastian miró hacia adelante—, lo único que me importa en este momento es que Kerim tenga un buen resultado de todo esto.


Los futuros alfas se miraron entre sí, si bien el padre de Bastian, el alfa Luke había movido todas sus influencias. Hasta ahora ningún acusado se había librado de una condena menor a treinta años encarcelado.


La mayoría fue sentenciado a muerte.


—Todo saldrá bien —le sonrió Auguste—, sé que Kerim se librará de esto.


Auguste volvió a sentarse con rectitud dándole la espalda a Bastian. De su rostro se borró su sonrisa, si fuera por él mandaría a Kerim a la horca al igual que su padre.


El juicio terminó con una condena de muerte y Deniska fue la más feliz por eso.


Entonces el corazón de Bastian se agitó cuando su tío Oliver empezó a recitar que el siguiente acusado era Kerim.


Lo mandaron a llamar y Kerim fue llevado ante el tribunal. Bastian quería sentarse a su lado. Tomarle la mano y decirle que estaba con él en esto.


Su padre había intentado que Kerim no fuera juzgado por el tribunal en pleno. Aunque al comienzo Luke dio gritos al cielo y quiso convencer a Bastian de que lo rechazara. Le grito, le ordenó y después le suplico.


Bastian se mantuvo firme en su decisión, él apoyaría a Kerim hasta el final, porque eso fue lo que se prometieron mutuamente. Sin embargo, Bastian le dio su palabra a su tío Oliver, le juro que Kerim iba a hacer debidamente procesado y en caso de que fuera acusado culpable. Bastian lo rechazaría y no intentaría usar sus influencias para interceder por él.

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