El Pequeño (Gran) Crush de Kageyama {Kagehina Omegaverse}

"Sour Berry"

Kageyama había dejado está vez una nota en los zapatos de Hinata.
Era un código para una canción de amor, cursi, sí, pero su madre lo había convencido de hacerlo (a cambio de que ella iba a hacer curry para cenar ese día.)

Ya que ese día no tenían práctica de Volley, Hinata caminó directamente hacia sus zapatos apenas llegó, pocos segundos después de que Kageyama dejara la nota y se fuera por sus zapatos.
"Que bueno que Hinata sea lento a veces ." Pensó el menor.

-¡Buenos días, Kageyama!- Hinata lo saludó con una sonrisa. Encontró la nota de Tobio y vió el código. Sonrió al ver que tenía una estampita de corazón y una de osito en las esquinas (que Miwa le había pegado anoche.)

-Oye Kageyama, ya sé quién me está cortejando.- Dijo cuando ambos caminaban lado a lado hacia sus aulas.
-¡¿Eh?!-

¡¿Cómo?! ¿¡Cómo lo supo?! ¡Kageyama estaba siendo muy cuidadoso!

-B-bueno, ya lo sabes entonces...- Kageyama quiso tomar la mano de Hinata, pero el más bajo se giró antes.
-¡Sí! Ayer estuvimos hablando tooooda la noche. Se llama Hideki y es mayor que nosotros por un año, ¡Está en el equipo de básquet de la escuela! Y me dijo que es muy bueno y también me dijo que le parecía un Omega muy bonito, ¡Y también creo que él es un Alfa muy guapo!-

Oh no.
¡Oh, no!
¡A Hinata le gustaba otro!

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Hideki llegó al salón de Shoyo, tocó dos veces la puerta para hacerle saber al Omega que había llegado a buscarlo. Cuando Hinata levantó la cabeza, el castaño lo saludó moviendo la mano.
-¡Miyamura-San!- Shoyo se levantó con rapidez y tomó su bento para salir con el Alfa.
Ayer habían hablado de desayunar juntos para conocerse mejor.
Caminando juntos, hablando con tanta naturalidad cómo si se conocieran de toda la vida, parecían una pareja muy bonita de Alfa y Omega.

El aroma a matcha de Hideki no resonaba bien con el aroma a naranja de Hinata, pero ambos estaban muy a gusto hablando de los deportes que practicaban.

¡Hideki era un gran amigo!

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En la práctica de hoy, todos notaron que el aroma de moras de Kageyama estaba mucho más ácido y turbado. Estaba molesto.
No. Molesto no.
Estaba celoso.
¡Estaba muy celoso de ese Alfa castaño que había traído a Shoyo al gimnasio! Sobre todo cuando acarició el puente de la nariz de Hinata y luego pellizcó sus bonitas mejillas.
¡Cómo se atrevía a tocar al Omega que otro Alfa había reclamado (en su imaginación) como suyo!

Que día tan terrible había tenido Kageyama.

Primero Shoyo empieza a hablar de ese idiota de Hideki, pasaron el descanso juntos (cosa que solo hacían ellos dos para practicar), lo llevó al  gimnasio y acarició sus mejillas frente a él y ahora ¡Por lo tenso que estaba le habían dicho que se sentara, que Suga-San lo iba a cubrir!

Estaba muy, muy incómodo.

Incluso Tsukishima, que disfrutaba molestarlos cada vez que podía, podía notar como si te acercabas a Kageyama en ese momento, iba a ocupar tu cabeza de balón la próxima vez. 

Shoyo notó la tensión en Tobio y se acercó a él.
-Oye Kageyama, ¿Qué tienes? Estás como muy molesto.- Dijo sentándose a su lado.
"¡Claro que estoy molesto! ¡Ese idiota de Hideki quiere robarse a mi Omega!" Pero mejor no dijo nada. Solo hizo un puchero.
-Otra vez estás haciendo cara de mono.- Le dijo Shoyo.
-¡¿Hah?!- Le respondió Tobio con el ceño fruncido.
-¡Haces cara de mono! ¡Siempre que te enojas pones cara de gorila!- Imitó la cara que Kageyama suele hacer cuando estaba molesto, sacando el mentón y frunciendo el ceño.
-Uga uga, yo Kageyama enojado.- Dijo Shoyo burlándose del azabache, el mencionado sintió como su vena empezaba a palpitar.
-Shoyo, corre.- Le dijo Noya desde lejos, Hinata volteó a ver a Kageyama y se dió cuenta de algo.

La había cagado.

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Hideki buscó a Shoyo saliendo de su propio club, encontrando al pelinaranjo practicando fervientemente con un Alfa de cabellos azabache. La sensación de familiaridad que había entre ellos dos era algo que incomodaba demasiado a Miyamura.

Accidentalmente (o no) empezó a soltar feromonas al llegar a la cancha, el aroma a matcha con una sensación picante molestó el aroma a cítricos y frescura que soltaban el dúo del Karasuno.

Cuando Shoyo hizo contacto con Hideki su mirada se iluminó, se distrajo un segundo, tiempo suficiente para que el balón golpeara la cabeza de Hinata, causando un ruido sordo.
-¡Hinata ¿Estas bien?!- Gritó Miyamura desde la distancia, el mencionado lo volteó a ver y puso su mejor sonrisa, levantó el pulgar y soltó inconscientemente feromonas calmantes que regularmente los Omegas con cachorros soltaban para calmar el llanto de sus bebés.

Kageyama notó la evidente atracción mutua entre Hinata Shoyo y Miyamura Hideki.

-¡Miyamura-San, aún no terminamos de entrenar, ¿Te importaría esperarme un poquito?!- Preguntó Shoyo, el ojiesmeralda asintió y paso a sentarse dentro del gimnasio.

Kageyama estaba evidentemente molesto.

Hideki notó que no era una simple molestia por tener a un alfa ajeno en la cancha donde el único dominante era él. Porque, oh sí, el aroma de Kageyama delataba que era un Alfa dominante, y asimismo, a Hideki también.
Lo que realmente estaba turbando la paz del azabache era que ese Alfa en particular estaba tratando de cortejar al mismo Omega que él.

Y realmente, no podía permitirlo.

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-¡¿Y vas a dejar que un intruso se robe a Hinata-Chan?!- Preguntaba Miwa, acostada en su cama usando una mascarilla de osito con una diadema en su cabeza, mientras que Tobio usaba una mascarilla de tigre y una diadema con orejas de gato.
Ambos veían una película con un vaso con helado cada uno.
-No sé, los dos se gustan...- Metió una cucharada de helado a su boca.
-¡No, Tobio! ¡Debes estar decidido a salir con ese Omega!- Gritó su hermana.
-¿¡Pero qué hago si ellos dos se gustan!? ¡No es cómo que pueda meterme o algo!- El menor se dejó caer en su espalda.
-... El que se entrometió fue él. Tú conoces a Hinata-Chan desde hace mucho, ¿Él qué?- Preguntó Miwa. Kageyama soltó una risita.

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"¡Debes ser más directo! ¡Déjale claro que no eres ese intruso, que eres mucho mejor!" Esas habían sido las palabras de su hermana mayor hace una semana, pero ¡Cómo podría si ese idiota de Hideki no sé despegaba de Hinata!

Quería decirle de frente que le gustaba pero, ¿Cuándo? ¿Cómo?

Le daba vergüenza reconocer que le gustaba Shoyo, tanto que de verlo cerca de Hideki las cosas se ponían tensas.
¡Y la peor parte es que el Omega no se daba cuenta de su gran Crush!

Así que, al día siguiente, para retomar su cortejo, dejó unos bombones de chocolate con la siguiente nota:

"No soy el estúpido de Hideki, yo te conozco desde hace más tiempo. Mucho más tiempo."