Compañero de Departamento //•Park Chanyeol y tu •//

Capitulo 9

Otra vez escuela. Si, al principio es divertido y emocionante ir a la escuela, pero cuando ya pasó una semana ya no quieres levantarte a las 6 de la mañana.
Estaba reaccionando cuando sentí un peso sobre mi cintura. Miré hacia abajo y me encontré con unos brazos rodeándome. Me ruboricé al instante. Sentí el respirar de Chanyeol y eso hizo que mi piel se erizara. Lo peor era que mis manos estaban sobre las suyas. ¡Santo cielo! Se suponía que íbamos s dormir uno de un lado y el otro del otro. Pero no, estábamos completamente abrazados.
No sabia que hacer. Mi mente me decía que debía apartarme y hacer como que nada había pasado y mi yo interna me decía que me callara y me quedará ahí. Si, se sentía bien. Que digo bien, se sentía increíble. Me sentía cómoda. Me sentía tranquila. Pero no podía simplemente hacer eso. Quité mis manos delicadamente de las de el y las puse bajo mi cabeza. Esperaría a que el despertara para que se levantara mientras yo me hacia la dormida.
Pero también estábamos con el tiempo encima, faltaba poco para que la alarma sonara.
10 minutos después sonó la alarma y sentí como Chanyeol se removía pero no apartaba sus manos. Quise reír pero escuché un suspiro seguido de la voz de Chnayeol.

- ¡Ay! - dijo asustado -. Perdón, perdón. - dijo aunque yo aún seguía actuando estar domida. - ¿Como le hago? - dijo y con extremo cuidado apartó sus manos de mi cintura y apagó la alarma. Se paró de la cama y fue a mi lado arrodillándose junto a la cama. Quería saber que haría así que seguí con los ojos cerrados. - Hola, bonita - <<bonita>>. Mi piel se erizo de nuevo y sentí una sensación fuerte en mi estomago. Me emocionó que me dijera así. Yo seguía con los ojos cerrados. Escuché una risita tierna salir de el -. Vamos, hermosa levántate - dijo me dio un beso en la frente. Dios, ¿cuán tierno podía ser este hombre? ¡Basta, _____! Con cuidado abrí mis ojos y lo vi ahí observándome con una sonrisa. - Hola.

- Hola - lo salude con una sonrisa.

- Es hora de ir a la escuela - dijo y yo negué con la cabeza riendo. - ¿Como que no? Anda, vamos. - reí.

- No quiero.

- Yo tampoco - río -. Pero tenemos que ir. Si no te levantas harás que pierda los estribos y después de eso, te lleve cargando - reímos. No creí que de verdad lo fuera a hacer, así que volví a cerrar los ojos. Los abrí de golpe cuando de repente sentí unos brazos rodearme y sin previo aviso Chanyeol me puso sobre su hombro mientras reía.

- ¡Chanyeol! - grité - ¡Bájame en este instante!

- No lo haré - dijo riendo. - Te lo advertí y no me hiciste caso - en eso abrió la puerta y comenzó a salir por todos los departamentos. Algunos se nos quedaban viendo. Era vergonzoso. - Y créeme que no me importa que ambos tengamos nuestros pijamas puestos - reímos.

- ¡Ya! - grité- Lo haré, me arreglaré y hasta te haré un delicioso desayuno pero por favor, ¡bájame! - dije y el se detuvo pero aun me tenía en brazos.

- ¿De verdad?

- De verdad.

- Bueno, vamos - dijo y me bajó.

- Ahora veremos como entras - dije y comencé a correr lo más rápido que pude. Esto seria mi venganza. Corrí con Chanyeol siguiéndome y rápido entré al departamento cerrando la puerta detrás de mi. El dio ligeros golpes a la puerta. Reí.

- _______, ábreme.

- No - canturreé.

- Querida, ábreme la puerta.

- ¿Habrá algo que me haga cambiar de opinión? - pregunté divertida.

- Eso depende. Si la abres ahora habrá algo muy bueno.