SEMPITERNO ll

Capítulo 37

Pov Sophia.

Llegamos a la oficina y segundos después escuché la puerta cerrarse tras de mi. Los latidos de mi corazón iban al 1000%, mis manos comenzaron a sudar mientras la idea de que Bella quisiera llevarse a Mía invadía mi mente.

-Sophia, escúchame…-

-No! Tú escúchame a mí, Bella- me giré interrumpiéndola- ¿Qué es lo que pretendes? Llegas de sorpresa y de un segundo a otro ya quieres pasar tiempo con mis hijos, te ofreces a cuidarlos, a ayudarles con sus tareas, les haces postres y ellos comienzan a encariñarse contigo y de pronto ya te llaman tía... ¿Qué quieres Bella? ¿Porqué regresaste? Acaso tú… ¿Estás aquí porque quieres llevarte a Mía?-

-Espera un segundo Sophia, estás muy equivocada- dijo- No pretendo nada o bueno por lo menos no pretendo lastimarlas, ni a Toni y mucho menos a ti-

-¿Entonces?- pregunté- Te fuiste hace años, te buscamos por meses y jamás logramos saber de ti, abandonaste a Mía y no te importó, ahora regresas como si nada, hemos pasado años sin saber de ti, de tu vida, de lo que has hecho, así que respóndeme ¿A qué has regresado a Riverdale?-

-Quería conocer a Mía, quería verla en persona a ella y a tus otros hijos…lo cuáles son muy hermosos, Sophia- negué incrédula ante sus palabras, pues aquello me parecía una simple excusa-

-Tienes que irte Bella, no pienso permitir que lastimes a mis hijos, no pienso permitir que destruyas mi familia y menos permitiré que lastimes a Mía, mí hija…- hablé firme sintiendo un nudo formarse en mi estómago- No necesito más caos y menos teniendo a Cheryl aquí-

-Siempre supe que harías un gran trabajo como madre- habló ella ignorando lo anteriormente dicho- y vaya que no me equivoqué, tienes unas hijas e hijo maravillosos... Toni y tú hacen un gran equipo, las felicito-

-Bella, por favor… Ya conociste a Mía y a mis otros hijos, eso era lo que deseabas así que ahora por favor tienes que irte- dije y caminé hacia la puerta, cuando estaba a punto de abrir esta, sus palabras me detuvieron-

-Sophia, estoy muriendo- me giré para observarla- Y yo no… no quiero morir estando sola…-

-¿Estás hablando enserio, Bella?-

-Hablo muy enserio…- fijó su mirada en mi y sonrió- Me casé con un hombre fantástico y tuve un bebé, su nombre es Collin-

-Espera Bella, espera vas demasiado rápido- negué un par de veces- ¿Tú tienes esposo y un hijo?- pregunté y ella asintió bajo mi mirada-

-Cuando Mía nació yo no estaba preparada… No quería tener hijos, mi vida era un caos y sentí seguridad al decir que Toni era la otra madre de Mía, pero luego la realidad volvió a caer en mi y después de pensarlo por mucho tiempo decidí que dejarla con ustedes sería lo mejor y por eso lo hice, siempre tuve la confianza de aceptar que Toni y tú serían unas madres excelentes. Escúchame bien Sophia, no estoy aquí para llevarme a Mía, ella es tú hija y no voy a arrebatarla de tu lado, pero, yo necesitaba conocerla, necesitaba estar cerca de tus hijos, necesitaba sentir el amor de madre en mi corazón una vez más porque yo necesitaba sentirme feliz…- la pizca de alegría que había visto en sus ojos cambio- Estoy muriendo y me siento vacía, no tengo a nadie…-

-¿Tú esposo y tu hijo? ¿Dónde están?- pregunté- ¿Porqué estás enfrentando tú enfermedad sola?-

-Jack, el nombre de mi esposo era Jack… Tenía los ojos azules más hermosos y me amaba como nunca nadie lo había hecho- una lágrima rodó por su mejilla- Jack y mi pequeño Collin fallecieron hace unos meses… un auto los impactó cuando ellos volvían del centro comercial y no lo resistieron-

-Bella… De verdad lo lamento- dije acercándome a ella- estoy segura que ambos están muy orgullosos de ti, sé que te acompañan siempre a cada segundo y cada día-

-Ese estaba siendo mi mejor momento, el momento más feliz de toda mi vida y lo perdí en un abrir y cerrar de ojos… muchas veces he pensado que esto que estoy pasando es mi castigo por haber abandonado a Mía- un sollozo se escapó de su boca y aún en contra de lo que mi mente dictaba me acerqué para rodearla con mis brazos-

-No Bella, esto no es un castigo por nada… El universo mueve sus cartas de manera inexplicable y al final nos toca aceptar- me alejé de ella y limpié su mejilla- Escúchame bien, sé que han pasado muchas cosas y sé que te sientes sola… pero a partir de ahora nosotras seremos tú familia-

-¿Hasta mi último día?- preguntó con sus ojos cristalizados-

-Sí… hasta tú último día, nosotros siempre seremos tú familia- le respondí para rodearle de nuevo con mis brazos- Te lo prometo…-