15. Caja de vidrio

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Advertencia contenido sexual

Esta vez nos quedamos en una tienda de muebles donde venían camas y bueno lo necesario me acosté en la cama algo cansada y con sueño para luego ver que el se quitaba la sueta y daba un suspiro.

--Esta muy linda la noche ¿no lo crees Shun?.

--Si, es linda. -se acercó a mi luego yo me senté en la cama quedando cara a cara el toco mi rostro. --Ahora, ¿Podemos seguir? Siendo honesto un área de juego no fue un buen sitio para tener sexo, teníamos el tiempo medido y sin duda no podíamos movernos bien. -la mano de él se dirigio a mi cuello. --¿Puedo seguir?.

--Si, si puedes.

El me beso para después sentir como la mano de el fue corriendo por mis muslos hasta mi cadera, para luego subirse encima de mi. Yo no me quedaba quieta intente quitarle la camisa aunque me fue inútil el paro para dar una pequeña risita.

--¿Quieres que me desnude ya?. -di una sonrisa coqueta luego el se quito la camisa dejando ver ese pecho y abdomen un poco marcados por el ejercicio, no apartaba mi mirada de ellos. --¿Que? ¿Te gusta lo que ves?.

--Me encanta. -lo bese nuevamente.

El quito de mi short y de la blusa que andaba para luego con besos fue hasta mi entrepierna empezó a mover un poco sus dedos en mi entrada para luego meter dos de estos intente callarme por si las moscas.

--Hey. -dijo el. --Tranquila, quiero escucharte esta vez relajate y déjame escucharte.

Su boca se dirigio de manera perfecta para sentir como su lengua danzaba sobre mi entrepierna mientras que movía sus dedos a una velocidad media mientras que yo enrede mis dedos en el cabello de el. Él empezó a mover sus dedos a una velocidad alta al igual que su lengua encorve mi espalda al sentir como llegaba al orgasmo.

El me beso mientras que con una de sus manos tocaban mis pechos dejo una ligera marca en ellos y en mis clavículas luego fue introduciendo su miembro en mi para dar movimientos lentos pero poco a poco fue subiendo la intensidad haciendo que me salieran varias lágrimas.

--¿Te duele?.

--Un poco pero puedo soportarlo.

--¿Quieres que pare?.

--No, sigue. -lo bese.

Poco a poco empezó a dar embestidas mucho más fuertes arrancandome gemidos de placer el daba uno que otro gemido aunque más que todo eran jadeos luego el empezó a bajar la velocidad haciendo que diera una pequeña queja.

--Shuntarō... -dije entre jadeos. --Ve rápido.

Y eso hizo. Empezó a moverse mucho más rápido y más fuerte puso una de sus manos en mi cuello nuestros cuerpos empezaron a llenarse de sudor.

--¿Te gusta así?... vamos muñeca di mi nombre.. -susurro a su vez daba jadeos. --Mierda... si... me encantas princesa si...

--Shuntarō..

El me agarro de mis caderas para luego hacer que me suba encima de el claro no podía ir igual de rápido que el por lo que ahora iba lento.

--¿Porque la lentitud? ¿Porque bajaste tanto el ritmo?. -el agarro de mis caderas. --Déjame ayudarte. -ahora el movía mis caderas con fuerza y rapidez haciendo que llenará de fluido el miembro de el.

Estuvimos así un buen rato hasta que el me tomo de mi cintura y me volvio a poner en la cama las embestidas eran rápidas y fuertes. A tal punto que literalmente rompimos la cama.

El se puso de pie me agarro de mi muñeca para luego ponerme de rodillas moví con agilidad mi lengua en la punta de su miembro para luego chupar todo el tronco, chupaba con agilidad poco después sentí como el agarro de mi cabello empujandome un poco ahora el llevando el ritmo de esta acción. Empezó a agitarse en signo que el orgasmo estaba cerca para luego echar su cabeza hacia atrás... sentí aquel líquido caliente y espezo en mi boca trague esta sin embargo cayó un poco por mi barbilla me limpie un poco.

Ambos nos acostamos en la cama agitados mientras intentamos recuperar el aliento nuestras respiraciones era lo unico que se podía escuchar... dimos una pequeña risa al ver la cama que estaba rota.

--Deberíamos dormir un poco... estoy cansado. -dijo el.

--Si.. aunque después deberíamos intentar arreglar la cama, la rompimos.

--Si eso si. -me beso. --Eres perfecta, eres increíble. -paso su mano por mi mejilla.

--Tu igual lo eres.

Ambos nos vestimos para luego pasarnos de cama e ir a dormir caímos como troncos para después despertarnos bastante tarde.

--Buenos días. -dijo.

--Buenos días. -le di un pequeño beso. --¿Como dormiste?.

--Bien, aunque sigo con sueño ¿tu como dormiste?.

--Me duele el cuerpo. -el dio una pequeña sonrisa.

--Vamos a desayunar después te conseguiré una pastilla para el dolor.

--Si te lo agradecería mucho.

Como teníamos comida enlatada desayunamos para luego el salió a por la pastilla y claro por la pastilla del día después.

Pasaron las horas nos la pasamos hablando un poco incluso el se acostó en mis piernas mientras que le hacía cariños en el pelo para luego ya empezar a prepararnos para ir a los juegos.

--¿Princesa?. -dijo el yo voltee.

--¿Um?.

--Vamos a distintos juegos hoy.

--¿Eh? ¿Porque?.

--Porque tengo un mal presentimiento así que vamos a ir a distintos juegos.

--Pero ¿que tal si..? Alguno puede morir.

--Eso no pasará, lo prometo. -me agarro de la cintura y me acerco a él. --Ninguno morira de eso estoy totalmente seguro no te preocupes, bonita. -me beso. --Sabes.. eres la luz de mis ojos ¿lo sabes no? Mi primer y único amor. -me agarro de la nuca y me volvió a besar.

--¿Tu único amor? Que romántico.

--Aunque no parezca si soy romántico. -sus ojos brillaban como nunca tenía ese brillo de enamorado.

--Bien ¿que te picó esta vez? Nunca me dirías eso...

--Solo es por una razón. -la luz del sol le iluminó los ojos esos lindos ojos cafés brillaban como una luciérnaga.

--¿Porque tengo la sensación de que me quieres decir algo?. -el asintio. --Bien.. ¿entonces que quieres decirme?.

--Yo... yo te amo. Te amo con todo mi corazón. -un leve sonrojo en sus mejillas se hizo notar. --Te amo ___ Arisu.

--También te amo Shuntarō Chishiya, eres el amor de mi vida.

Los ojos de el estaban iluminados como si de un niño pequeño se tratara al ver algo que le gusta, sus pupilas estaban dilatadas se veía increíblemente hermoso.

--Daría lo que fuera por ti ¿lo sabes no?. -dijo el.

--Lo sé, estoy tan enamorada de ti.

La mirada de el se notaba brillante una que jamás había visto se veía tan hermoso así..  me dio un cálido beso. Aquel beso transmitía el verdadero amor, ambos estábamos enamorados del otro.

--Ahora, mi princesa vamos a jugar estoy seguro que sobreviviras.. debes de sobrevivir pase lo que pase.

--Lo entiendo. -lo agarre de la mano para empezar a caminar. --Te estaré esperando.

--Yo igual.

El fue a un lugar que era la corte suprema y yo a un hospital. En el hospital habían seis personas para luego escuchar una voz.

--Reconocimiento facial completado. -era aquella voz característica. --Bienvenidos, doctores... las manos son lo más importante para los doctores así que este juego necesitarán sus manos. -en la gran pantalla se mostraba nuestros rostros para luego que a la par de nuestros rostros se mostraran un número. --En cada habitación está el número que corresponde entren a su habitación para dar las instrucciones. -todos entramos yo estaba en la habitación 7. --Bienvenida doctora Arisu. -se cerró la puerta. --Al frente de usted hay un vidrio en medio de este esta la llave que abrirá la puerta. -me acerque a ese vidrio tenia unas cosas de metal para meter la mano allí. --¿De que eres capaz para sobrevivir? ¿Aprecias tus manos o tu vida? Tienes 5 minutos para sacar la llave de la caja de vidrio si no lo haces la habitación empezará a arder. Y empieza.

True love // Chishiya ShuntarōDonde viven las historias. Descúbrelo ahora