Miradas indiscretas {Bakudeku} (Terminada)

26. Inesperado

Despierto al sentir caricias sobre mi cabello. Sonrío al ver esos ojos que tanto amo. Amaba que sus ojos fueran lo primero que viera al despertar. Kacchan también sonríe y deja un tierno beso sobre mi nariz. Me sonrojo.

—Buenos días bebe.

—Buenos días, mi amor.— me pego más a él, abrazándolo con fuerza.

—¿Cómo has dormido?

—De maravilla.— susurro sobre su pecho.

Era tan cálido.

Y me hacia sentir tan seguro.

Amaba estar entre sus brazos.

No soportaría perderlo.

—Deku.

—Dime.

—¿Quieres tener una cita conmigo?

Alzo la cabeza, mirándolo sorprendido.

—¿Una cita?

Nunca había tenido una cita.

—Si, lo he estado pensando y he llegado a la conclusión de que a pesar de llevar tiempo saliendo, nunca hemos tenido una cita.— sonríe—. Me gustaría cambiar eso.— acaricia mi mejilla con suavidad.

Se me humedecen los ojos. Jamás me imagine algo así.

—K-Kacchan...

—Entonces, ¿quieres tener una cita conmigo?

—C-Claro que quiero.

Sonríe, besa mis labios con ternura.

—Te amo.

—Y yo a ti.

Al final acordamos que la cita seria esta tarde.

Después de eso nos cambiamos de ropa y nos dirigimos al comedor.

—Buenos días chicos —nos saluda Ochaco al sentarnos.

—Buenos días —sonrío.

—¿Y esa sonrisa? ¿Ha ocurrido algo bueno?— pregunta Ochaco curiosa.

Me sonrojo.

—P-pues si...— sonrío. Kacchan sonríe y deja un beso en mi mejilla.— Kacchan y yo vamos a tener una cita.

—¡Eso es genial, chicos! Espero que os lo paséis muy bien.

—Gracias.

—Lo haremos— murmura, Kacchan.

≈≈≈

Término de colocarme la camisa y sonrío mirándome al espejo.

Perfecto.

—Bebé, ¿estás listo? —pregunta, Kacchan detrás de la puerta.

—¡Si! Ya voy —anuncio, acercándome a la puerta y abriéndola.

Kacchan sonríe ampliamente al verme. Me sonrojo por su mirada. Lo observo de pies a cabeza.

La palabra increíble se quedaba corta para describir semejante belleza. Me había dejado sin palabras.

Se acerca a mi y pasa un brazo por mi cintura, atrayéndome hacia su pecho.

—Estas increíble —susurra en mi oído—. Tengo el novio más guapo y perfecto.

—El que tengo el mejor novio soy yo.—lo abrazo, pegando la cabeza en su pecho—. Te amo.

—Yo mucho más. —agarra mis mejillas entre sus manos, besando mis labios con ternura.