el Amor de Morfeo

Capítulo 16

Caminaba por el oscuro bosque de árboles tan altos e imponentes, con ramas y follaje tan espeso  que al mirar arriba a penas si se podía ver el cielo, solo ciertos rayos de sol escurridizos que permitían iluminar el cálido bosque que con su abundante vegetación era irreconocible en todas las direcciones posibles

Un paisaje que provocaría miedo en cualquier persona o criatura que se encontrara sumido en medio de tan majestuoso bosque, el verde de las plantas se tornaba naranja al ser tocados por los hábiles rayos del sol. Y las flores que parecían encender sus colores, con las minúsculas gotas de rocío que quedaban adheridas en sus pétalos cual joyería en la piel de una dama 

El mundo de la vigilia era tan hermoso naturalmente, eran un suspiro de los sueños, era la musa para el Señor Morfeo y crear sus maravillosas fantasías

Para Frey este mundo era tan hermoso como podría serlo cualquier otro, solo se debe tomar atención, escuchar y sentir para ver la belleza que alberga el flamante mundo real 

La Diosa se detuvo a la orilla de un río del cual el impacto de sus aguas eran como melodía acompañando el ambiente del bosque, observó con detalle cada roca siendo pulida por la corriente del agua con el paso del tiempo. Se inclinó y tocó el agua helada proporcionándole paz, se pasó el cabello por su hombro derecho y con su mano en el río tomó agua de este para refrescar su cabellera 

-- Te estuve buscando

Una voz grave y sombría habló atrás de ella, pero la Diosa no se inmutó, sin temor alguno de la posible amenaza

-- Aquí me tienes -- respondió dulcemente acariciando su cabello -- Ha pasado mucho tiempo

-- Traté de hablarte durante tu visita en el Olimpo pero las circunstancias hicieron tardío nuestro encuentro 

Frey continuó refrescando sus blancos cabellos con total serenidad aún escuchando el tono del Dios detrás de ella 

-- No me mal entiendas Ares, tu compañía me es grata, sin embargo nunca es bueno cuando tienes que buscarme tanto para solo hablar 

-- Pero es real, es algo de lo que deberías preocuparte -- más preocupado parecía él 

-- Estaba teniendo un momento bastante tranquilo en este bosque, con las aguas de este río -- dijo tranquila -- No deseo escuchar malas noticias 

-- Pero es por tu bien -- regañó el Dios 

-- Mi bien es el de las personas -- contradijo -- Lo que me pase en cuerpo no es importante mientras viva en alma 

-- Alguien planea hacerte daño con intenciones egoístas hacia otro ser

Frey dejó de acariciar su húmedo cabello y se quedó en silencio. Se puso de pie y lentamente volteó hacia el Dios detrás de ella y aún así no se reflejaba ningún tipo de miedo o angustia en el rostro de la Diosa 

-- No deberías interferir en estas cosas, querido -- habló con tono afable 

-- Entonces lo sabías? 

-- No. Pero si así debe ser... 

-- No! -- interrumpió -- Con todo respeto, pero no pareces estar al pendiente de lo peligroso que es esto. Una guerra se avecina, lo ví, y tú estás en medio 

Frey se acercó al Dios que era mucho más alto e imponente que ella y acarició su rostro calmando la tensión de Ares 

-- El Dios de la Guerra preocupado por una -- rio suavemente 

-- Pero no es una guerra cualquiera -- suspiró agobiado -- Es una donde el equilibrio está en riesgo inminente. Donde las contrapartes harán lo que sea para destruirse y a su vez a este mundo