todos se levantaron a la vez; la figura de su padre se recortó en el umbral antes de que ninguno pudiera hacer o decir nada más. a su lado, jeno se tensó entero; casi olía la tensión y el instinto protector emanando del cuerpo ancho de su alfa, oía el gruñido que todavía no había salido de su garganta.
―qué... ―su padre frunció el ceño al entrar en la habitación ―¿qué están haciendo aquí? ¿qué estás haciendo tú aquí?
se le escapó el aire de los pulmones al mirarlo después de lo que ya parecía una eternidad. su padre parecía todavía más amenazador de lo que lo recordaba, enorme y ancho, y todo en él gritaba "alfa"; los dientes al descubierto entre los labios tensos, la mandíbula contraída y los ojos hechos de lava, las enormes manos cerradas en puños.
sólo con coger aire, donghyuck notó el violento contraste entre los dos hombres; jeno olía a furia, a proteger, a posesividad. pero su padre olía a rabia, a odio, a atacar; no era la diferencia de tamaño lo que aterrorizaba.
jeno tiró de él hasta dejarlo tras su espalda. donghyuck temblaba; se llevó una mano al vientre en un acto reflejo, pero conservó la otra entre los omóplatos de su alfa, notando la vibración de su cuerpo cuando jeno gruñó. su padre no se movió.
―nos vamos ―consiguió decir jeno entre los dientes apretados. ―nos vamos, ahora.
―qué demonios haces aquí. qué demonios haces aquí, niñato, ahora sí que las has cagado...
jeno lo empujó hacia atrás con una mano, despacio. retrocedió, manteniéndose detrás de él pero sin apartar la mano.
―tomar lo que es mío, no tenías ningún derecho...
su padre seguía hablando, su madre había retrocedido hasta toparse con la pared a su espalda, y jeno temblaba de furia. cuando habló, lo que salió de sus labios se parecía más a un rugido.
―mío.
―...ocuparme de este asunto, y después me ocuparé de ti, y de ese parásito que le has met...
jeno consiguió mantener la calma hasta que su padre empezó a avanzar hacia ellos, pero en ese momento perdió los nervios; empujó a donghyuck hacia atrás de nuevo y lanzó un puñetazo hacia el rostro del furibundo alfa que avanzaba hacia él.
consiguió pillarlo desprevenido; el enorme alfa se tambaleó y retrocedió; donghyuck corrió a refugiarse detrás del mostrador de la cocina; su madre, agachada tras él, le cogió las manos con ansiedad, sin dejar que se asomase a observar la pelea entre los dos alfas.
―¿estás bien? donghyuck, ¿est...?
―estoy bien ―intentó soltarse, al borde del pánico ―mamá, suelta. jeno...
―¡ni se te ocurra salir ahí! ―su madre pareció endurecerse al instante; un brillo hercúleo asomó en sus ojos apagados. ―ni se te ocurra, donghyuck. no te voy a dejar. no te lo voy a permitir.
―jeno... ―lo sobresaltó un golpe sordo; el corazón amenazó con salírsele del pecho. ―jeno está herido, déjame...
―piensa en tu hija ―susurró su madre, y se dio cuenta de que parecía al borde del llanto. ―por favor, piensa en tu bebé. va antes que tu alfa, va antes que todo lo demás. no cometas el error que cometí yo, donghyuck, eres mejor que eso.
se soltó de un tirón de sus manos. cada palabra que le oía sólo le encogía más el corazón.
―nada va antes que mi alfa ―susurró ―nunca dividiría a mi familia por orden, mamá. por eso es mi familia.
un nuevo golpe los sobresaltó.
―¡donghyuck!
su cuerpo entero reaccionó a la voz grave, nerviosa. se puso en pie; su madre tiró de él hacia abajo, con los ojos casi desorbitados.
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mountains not hills
Fanfictiondonghyuck acude a su mejor amigo cada vez que necesita ayuda con su celo. jeno definitivamente no está enamorado de él.
