Visión de Espejo

Visión de Espejo 5

La carrera armamentista del imperio continua creando unas cuantas fuentes de trabajo, y unos cuantos multimillonarios que influencian las esferas de sus gobiernos y del tercer mundo haciéndoles reprimir a las naciones pobres y a sus nacionales a los que acusan de quejarse sin justa causa. Los ejércitos de las potencias crecen en tamaño y armamento; y más tarde son el lastre económico de su nación pues mantener millones de hombres en armas improductivos en bases militares al rededor de todo el mundo resulta bastante costos. Además es un plan estratégico el continuar financiando conflictos locales que suman desplazados y destrucción de infraestructura dejando a mas naciones necesitadas y endeudadas para la eternidad.

Otra estrategia para mantener vigentes los conflictos de las grandes potencias es ofrecer entrenar fuerzas especiales de combate regular o irregulares según sea el caso, con la obligación de la compra del equipo bélico respectivo, posiblemente viejo a precio de nuevos y valorado en varios cientos de millones; por supuesto la venta se hace al crédito y se aceptan pagos a cambio de manejo de recursos naturales o servicios. Se da además capacitación para líderes politicos como Bin Laden, quienes luego de ser instrumento para llevar adelante sus intereses, terminan siendo tildados de fanáticos y asesinos pues se vuelven en contra de quienes los capacitaron. Estas acciones llega a derivar en luchas entre connacionales, quienes esgrimiendo slogans ya sea en forma de reclamos ante la desigualdad, injusticia, diferencias étnicas o religiosas culminando con su propia destrucción y mayor dependencia. Así las potencias se benefician y pierde el tercer mundo gente, recursos e independencia.

Posteriormente los líderes por ellos capacitados y que sirvieron a sus intereses dejan de ser útiles, se convierten en estorbo y son acusados por sus preparadores de violar derechos humanos, de crímenes de lesa humanidad, etc., o son derrocados pues nunca son producto de elección popular y desaparecen del panorama politico sin atreverse a atestiguar que fueron instrumento para intereses extranjeros y que obedecían sus órdenes, otros son asesinados o con los millón robados se les da asilo y protección en agradecimiento por los servicios prestados. El Sha de Irán, Hosni Mubarak, Anastasio Somoza, se encuentran dentro de este privilegiado grupo

Mas adelante se forman bloques de países unos que siguen a EE. UU., por su cercanía, promesas de ayuda, creditos brindados u ofrecidos y se someten a seguir la doctrina del liberalismo, el capitalismo, la democracia a su estilo (dictadores o regímenes militares) y el otros bloque que decide seguir el pensamiento de la URSS o la RPC; quienes dicen clamar por la igualdad, el fin de la explotación, la mejor distribución de los bienes y riqueza y considera que el dador de esta justicia y riqueza debe ser el estado.

Mientras ambos bloques de poder polarizan a las masas con la escalada de guerras locales y la posibilidad de la destrucción del mundo por un holocausto nuclear, crece en los países pobres la ignorancia, la pobreza y la miseria; el logro del desarrollo pasa a ser una meta inalcanzable pues a los poderes hegemónicos no les interesa el capacitar a los nacionales de estos países cualquier intento de resaltar valores nacionales es tildado de extremista y presionado a desaparecer.

Mucho de esto sucede sin que la mayoría de los nacionales instrumento de estos gobiernos y las políticas foráneas no se den cuenta de que tras la propaganda de polarización, las potencias se van convirtiendo en propietarios de sus bienes, servicios y recursos a través del endeudamiento y la explotación de sus riquezas como diamantes, petróleo, uranio, oro, madera, agua y otros recursos que son extraídos de sus suelos utilizando el adelanto industrial que ellos poseen y cuyas ganancias no comparten, heredando a los pueblos del tercer mundo una creciente pobreza que favorece a las confrontaciones internas, la criminalidad y la desintegración familiar que a ellos favorece. Sin duda esto contrasta con la generación de riqueza amasada por unos cuantos empresarios en los imperios; la mayoría de la masa en los países pobres ignoran y desconocen como esto sucede.