Miss maximoff

20- Algo

Me encontraba sentada en una de las bancas del parque mientras esperaba a Wanda, ayer quedamos de vernos aquí.

Vi su auto estacionarse enfrente de mi, ella bajo luego de unos minutos y se acercó hacia donde yo estaba sentada.

–Hola-dijo jugando con sus manos.

–Hola, Señorita Maximoff-hable.

–Bien..seré directa Natasha-hablo mientras se sentaba a mi lado y yo la mire alzando una ceja- me gustas-dijo viéndome directo a los ojos, no supe que decir.

Me quedé callada por unos minutos, ella me miraba esperando una respuesta.

–Tambien me gustas, Wanda-hable por fin, ella suspiro de alivió al escucharme hablar.

–Bien..lamento el haberme ido y no buscarte Nat, estaba asustada por los sentimientos que estaba descubriendo hacia ti, jamás sentí algo así, nisiquiera con mi esposo-hablo.

–Wanda, yo tampoco me había sentido así pero tú misma lo acabas de mencionar, tienes esposo y no solo eso..también tienes hijos-hable.

–Natasha, quizá no sea lo más sano pero podríamos..podríamos tener algo en secreto y ver si funciona-dijo mientras tomaba mis manos entre las suyas, sonreí ante eso.

–Yo..no lo sé Wan, en este tipo de casos siempre termina una persona lastimada-dije.

–No será nuestro caso nat-hablo, me quedé callada pero no tuve que hablar, pues ella ya había unido nuestros labios en un beso.

Era claro que sí sería nuestro caso..este tipo de relaciones siempre terminará con una persona jodida, pero sus labios..sus labios me hacen olvidar todo, como si solo fuéramos ella y yo.

Pero muy en el fondo sabía que yo iba a terminar jodida, sabía que yo iba a salir lastimada de esto.

Me hubiera gustado equivocarme por eso, pero no fue así, no me equivoqué al decir que yo sería la jodida.

[•••]

Reía mientras veía como Wanda trataba de quitarle su zapato a un perrito que nos encontramos, había pasado ya un mes desde que ella me pidió que lo intentaramos y definitivamente a sido el mejor mes de mi vida.

–Amo a los perros pero este me cae mal-gruño Wanda mientras veía hacía mi con su zapato en la mano.

–¿Que puedo hacer para que se te quite el mal humor?-hable mientras ella se sentaba en la manta junto a mi.

–Un besito por fis-hablo y yo sonreí, me acerque a ella y dejé un rápido beso en sus labios.

–¿Ya?-dije al separarme.

–Mhm, no lo sé..tal vez debería darme uno más largo señorita Romanoff-dijo y reí para luego juntar nuestros labios de nuevo.

No sé cómo pero ella me empujó y ahora yo estoy acostada en la manta riendo mientras ella está arriba de mi haciendo cosquillas.

–¡Para, Wanda!-me queje mientras seguía riendo.

–¡Mi dulce venganza, bebé!-dijo mientras me llenaba la cara de besitos mientras yo reía.

–Eres lo mejor que me a pasado Nat-hablo ella cuando dejó de darme besos por la cara.

–Tu también eres lo mejor que me a pasado Wan-Confesé y ella sonrió para luego dejar un besito en mis labios.

No mentí, realmente era una de las mejores cosas que me pasó, sin embargo aún sabía que iba a salir jodida de ahí.

Pero tomaría el riesgo con ella, la vida es una sola y si no te arriesgas no sabrás que pasaría si lo hubieras echo.

La vida es un riesgo y tienes que vivirla, tienes que arriesgarte por qué al final de todo de eso se trata la vida.