Nuevo día y nueva oportunidad para pedirle a Minho tener una segunda cita, solo ha pasado un día desde nuestra primera cita, pero no puedo esperar más para tener otra.
Es tiempo de ser yo quien tome la iniciativa, igual que con el beso lo cual me encanto, en general me encanta cualquier cosa que tenga que ver con Lee. Comencé a pensar en Minho y sonreí, me distraje un poco del hermoso jarrón de flores que estoy pintando para guiar mi mirada hacia la ventana del idiota molesto que me tiene mal.
Su ventana está cerrada y su persiana corrida, pasa por mi cabeza la idea de marcarle para hablar con él, pero recuerdo que son las malditas cuatro de la mañana y que probablemente yo sea el único maldito loco que está despierto a esta hora, así que hago una nota mental de tan pronto den las diez de la mañana mandarle un mensaje o marcarle. Para mi es una severa falta de respeto hablarle a alguien antes de las diez, ya que a pesar de que la otra persona ya se encuentre despierta probablemente esté de mal humor por despertar tan temprano y más aún si es lunes(hoy es lunes), es el peor día de la semana si eres estudiante o persona en general.
Debo de admitir que a pesar de ser lunes estoy bastante animado, supongo que mi cita con Lee me ayudó a obtener fuerzas para enfrentar al mundo, el hecho de que me hizo sentir como si fuera la persona más importante de la tierra por un par de horas me alegro más que el día o la semana, me alegro el año, por eso espero con ansias una segunda salida con el. Aunque en general sea en una cita o no, me encanta pasar tiempo con Lee, con él puedo sentir que solo somos él y yo. Gracias a eso por fin conozco el sentimiento que tanto veía en películas o series, ese palpitar del corazón que te envuelve, creo que aún es demasiado pronto para llamarlo amor.
Vivir al fin mi romance de película me tiene en una nube y casi olvido todos mis problemas, casi olvido que mi madre solo llega al departamento a cambiarse y otra vez se va, pero al menos ya no me he sentido tan solo, ahora se que tengo a alguien y sorpresivamente ese alguien es Lee Minho mi peor enemigo hasta hace un par de meses. Me pregunto si todo el tiempo siempre fue él, tal vez desde que nos conocimos estábamos destinados a estar juntos y nunca me paso por la mente, tantas peleas desperdiciadas para que al final termináramos hurgando en la boca del otro, eso sonó un poco asqueroso.
Casi sin notarlo el amanecer comienza a hacerse presente, la luz entra por la ventana e ilumina mi cuadro casi terminado, empiezo a recoger mis pinceles y todo mi material de pintura, decido tomar una ducha para quitar las manchas de pintura. Una hora después estoy listo para ir a la escuela, bajo en el elevador y al salir de mi edificio se encuentra Lee Minho parado siendo tan perfecto como siempre.
—¿Me estabas esperando?— Le digo riéndome por lo tierno que se veía.
—¿Qué? No, yo venía apenas saliendo de mi...—Fingió demencia–Esta bien si. Te estaba esperando.—
Lindo.
Me acerque a él y me dedico una tierna sonrisa, comenzamos a caminar juntos algo más cerca de lo normal, note como él volteaba a verme y sonreía.
Sorpresivamente se detuvo y volteó a verme.
Tomó mi cara y plantó un corto beso en mis labios.
Tan pronto nos separamos una sonrisa salió de mis labios, Minho miro para todos lados evitando mi mirada aprovechándome de eso le dejé un beso en su mejilla.
—¿Dormiste?—Pregunto mirando mis ojeras.
—Si. Tal vez un par de horas.—Mentira.
Entrecerró los ojos dejando en claro que no me creía, yo tampoco lo haría así que le dediqué una sonrisa y él rodó sus ojos para después entrelazar su mano con la mía y seguir caminando.
A tan solo unos pasos de llegar a la escuela Minho soltó mi mano, esto me desconcertó, no sabía porque lo había hecho pero sin duda eso movió algo en mi. Tal vez le doy vergüenza.
Baje mi mirada al suelo como mecanismo de defensa ante lo que se avecinaba, sabía que tan pronto llegáramos se alejaría de mí y fingiría que no nos tomamos de la mano hace tan solo un par de segundos, aparentaría que no nos besamos y que no tuvimos una cita hace tan solo dos dias, pero esta bien puedo aceptarlo a mi tampoco me gustaría decir que salgo con el patético Hwang Hyunjin.
Estaba por ponerme mis audífonos cuando alguien tomó mi mano y la entrelazó con la suya, ese alguien era Minho. Levante la vista y me dedico la sonrisa más linda que he visto en toda mi maldita vida, "vamos" susurro mientras yo lo seguía como un perrito.
Al entrar me imaginé que todos voltearían a vernos y descubrirían que es verdad el dicho "del amor al odio solo hay un paso" pero esto no pasó, cada quien parecía estar enfocado en sus cosas como para prestarnos atención a nosotros, agradecí eso.
Tal vez debo considerar seriamente dejar de hacerme películas en la cabeza, soy menos relevante de lo que imagino y obviamente no soy el personaje principal de esta mierda llamada vida.
¿Sabía que teníamos que ir a salones distintos? Si
¿Me gustaba la idea? No ¿Nos veríamos en el almuerzo? Tal vez.—Supongo que ahora cada quien tiene que ir a sus clases.—dijo mientras jugaba con mis dedos.
—Si, supongo que es lo que tenemos que hacer.
Nos detuvimos y quedamos frente a frente en medio del pasillo, poco a poco se iban los alumnos a sus clases dejándonos solos.
Ninguno de los dos quería ir a sus respectivas clases eso era seguro, pero aún así debían hacerlo.
Sin titubear mucho me acerque a su rostro y plante un tierno beso en sus suaves labios, lo acepto enseguida, el beso no fue más que un pico pero se sintió tan bien hacerlo en la escuela, sin tener que escondernos de todo.Al entrar a mi clase se plantó en mi un pensamiento claro.
Lee Minho tenia que ser mi Novio.
Hola chic@s ya termine de escribir la historia y pronto podrán leer el final, espero les guste tanto como a mi. El sábado tienen dos capítulos nuevos espero y los disfruten :).

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Enemies - Hyunho
FanfictionMinho y Hyunjin se odian a muerte. ¿Habrá algo que oculten detrás de todo ese odio? Segunda parte: Lovers Posibles faltas de ortografía. ------ *Enemies to lovers* Inicio:14/02/22 Final:06/11/22