CAPITULO 35

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Pov's Daniela

A los dos días me encontraba en mi habitación, aburrida. Llevaba un gran yeso que me cubría el brazo fracturado. Debía esperar un mes para que sanara. ¡Gracias Chase-pito-corto!

Por suerte, mis amigas, que me habían visitado ayer, me contaron que después del incidente expulsaron a Chase del colegio durante una semana y que había recibido una gran reprimenda de la entrenadora. También me contaron con detalle la gran pelea que había tenido con María José, en la cual la morena le gritaba que era un idiota como cien veces.

Eso mejoró mi día al máximo, el cual era un asco, ya que estaba sin hacer nada. Respirar no contaba como una actividad. Solo podía pensar en la ojiverde, y para ser sincera, también en como estarían las cosas en la escuela. Mis pensamientos también viajaban a las otras dos castañas que adoraba, las Garzón me tenían hundida. Mi brazo dolía si le daba un golpe o lo sacudía. Así que no podía moverme mucho.

Ya era muy tarde y mis amigas debían de quedarse para el entrenamiento de Nessa. Entonces María José también debería de estar allí, me lamentaba, ya que quería ver a la morena. En verdad quería ir a la escuela, pero mi madre era paranoica.

Leí varios libros durante las últimas horas, pero me aburrían, vi la televisión e intenté hacer cualquier otra cosa que no requiriera utilizar mi brazo. Gracias a Dios que era el izquierdo, si no estaría completamente inútil. Ya era tarde cuando llegó mi mamá y me saludó, mi padre y ella estaban abajo en la cocina mientras yo seguía encerrada.

Estaba terminando de usar la computadora, y llevaba uno de los audífonos, cuando escuché el timbre. No le presté mucha intención, ya que debía ser una visita para mi madre. Seguía mirando unos videos en YouTube cuando escuché la voz emocionada de mi mamá.

___ ¡Cariño, es para ti! ___dijo con la voz alegre y yo fruncí el ceño, quitándome los audífonos.

___ ¿Para mí? ___pregunté gritando para hacerme oír.

___ ¡Sí, es una amiga tuya! ___dijo aún a gritos y me extrañé, pero una sonrisa apareció en mis labios. ¿Podría ser Addi?

___ ¡Ya voy! ___exclamé divertida, sabiendo que Addi igual subiría.

Pero si fuera ella, ¿mi madre no me lo diría como siempre? Digo, solo tenía tres mejores amigas.

___ ¡Tomate tu tiempo, yo le muestro la casa a María José! ___dijo riéndose mientras yo me caía de la silla.

___ ¡¿QUIÉN?! ___grité alarmada, agradeciendo no haberme golpeado el brazo y salí corriendo por la puerta.

___ ¡María José! ¿No escuchas? ¡Me la llevaré un rato! ___dijo mi madre maligna mientras yo corría por las escaleras.

Prácticamente, salte los escalones y quede de rodillas frente a la entrada, con el cabello alborotado. Llevaba un pantalón y camiseta de pingüinos para dormir. No era la mejor vestimenta para dar saltos mortales.

Me levanté lentamente ayudándome con la barandilla, hice una mueca por mi brazo y me encontré con mi madre mirándome con desaprobación. Pero mis ojos se clavaron en la puerta. María José vestía una falda y una blusa muy linda mientras me mostraba una sonrisa tímida y sus ojos oliva brillaban con diversión.

___ Daniela, debes tener más cuidado con tu brazo. No quieres volver al hospital, ¿verdad? ___advirtió mi madre. Al notar el rubor en mi rostro, observo como miraba a la morena.

___ Perdona, mamá, es que... María José, ¿qué...? Bueno, ¿qué haces aquí? ___pregunté levantándome mientras me rascaba la cabeza y torcía el cuello.

Rivales - CacheWhere stories live. Discover now