El Entrenador Distante.

Capítulo 40: Siempre se puede Mejorar.

Terminado todo el evento, la familia regreso a su hogar y a su habitualidad. Mientras Arisa se mantenía siempre entretenida con sus amigas y enseñándoles cosas de ese mundo. Por su parte Allen, ahora tenía su atención en otras cosas, y la principal de todas era el cuidar de Nora y Aurora.

-Cómo te sientes? -Pregunto al estar sentado al lado de su Pupila acariciando sus cabellos y que ella usara su pierna de almohada.

-Me siento un poco rara, pero no creo que sea malo.

-Rara en qué sentido?

-No sé, he sentido mis sentidos un poco fuera de control, a veces cuando me levanto a ir al baño, me mareo o no enfoco bien las cosas, pero ya luego pasa, y entonces que me doy cuenta de que veo las cosas con más claridad que antes, o está el que puedo escuchar todo lo que pasa allá afuera, incluso las conversaciones.

-Tal parece que tus sentidos se están agudizando, pero tu mente se tarda en asimilar esa mejora, es lo mismo que paso cuando aprendiste a usar el aura.

-Entiendo... eso es por el Mutageno cierto.

-Así es. Está alterando tu genoma lentamente. Pero no te preocupes, Albedo dijo que ya estaba cerca de perfeccionar la cura.

-Aun no me creo el que me esté ayudando.

-Bueno en realidad ella tienes sus razones para ayudarte.

-Lo sabía.

-Lo importante es que lo está haciendo. Nada más importa, quiero que estés bien y que puedas volver a sus cosas con normalidad.

-Yo también, digo no es que me queje de estar acostada viendo videos y que vengas a mimarme seguido, pero seguro mis Pokémon me extrañan y mi cuerpo me exige que haga ejercicios.

-Entiendo eso, pero hasta entonces, nada que exija mucho a tu cuerpo ni tu corazón, lo que menos queremos es exagerar el proceso del Mutageno.

-Lo sé, pero al menos unos besos no me harán daño.

-Supongo que no.

Ella sonrió y se sentó en su cama para poder acercarse a su hombre y poder abrazarlo de cuello y así intercambiar unos largos besos con él seguido de ambos verse a los ojos y unir sus frentes mientras se mantenían viendo al otro.

-Eres lo más importante que tengo Allen.

-Lamento no poder decir que eres la única.

-Jejeje lo sé, Mamá es el top, y también está la pequeña Nora, Mamá me ha contado que ahora son como padre e hija, he incluso Nirvana esta en esta lista, pero ella no tiene los privilegios que yo sí.

-No abuses de tu poder.

-Jejeje solo decía.

-Por ahora descansa. Iré a ver cómo le va a Albedo, lleva varios días sin pegar los ojos.

-Cómo le hace?

-No tengo idea. Descansa.

-Descuida me puse a ver una serie que se llama One Piece. Se ve que tendré para mucho rato.

-Eso es seguro.

Dejando a su Padawan descansar, Allen bajo del segundo piso y se encontró con su Madre en la cocina junto a sus amigas preparando el almuerzo mientras les enseñaba técnicas de cocina nuevas.

-Cielo cómo está Aurora?

-Tranquila y descansando, se le ve de muy buen humor.

-Qué bueno, le estoy enseñando a las chicas como variar más la comida que hacen, deben cuidar más su alimentación.