Gudako, Maestro Supremo De Chaldea

¿¡DÓNDE ESTÁN LAS PATATAS FRITAS!?

Cuando la luz se calmó, Gudao se paró cerca del borde del bosque. La vista frente a él mostraba una imagen clásica del campo europeo.

" El proceso de Ray Shifting es exitoso. Fujimaru-kun, ¿está todo bien en tu destino?"

"Sí, doctor Roman, nada parece fuera de lo común hasta ahora", respondió Fujimaru.

"¡Sempai!" Gudao se dio la vuelta y vio a Mash salir corriendo del bosque detrás de él. La seguían sus Servants, menos Babbage, que se quedó atrás para ayudar a reparar Chaldea, y Scheherazade, que no era apto para este tipo de tareas. Fou también estaba sentado en su hombro. "Estamos reunidos. ¿Cuál es el siguiente paso, Maestro?"

"¿'Reunidos'? ¿No extrañamos a la Maestra Gudako y todo su equipo?" Lakshmibai cuestionó.

"¿De verdad quieres a Gudako aquí?" Medusa respondió.

"¿Ella? No. ¿Sus sirvientes? Sí", respondió la rani.

"Puff, gran cosa, podemos lidiar con lo que sea que cree esta Singularidad, no hay problema", se jactó Ceanis.

" Espera, estamos detectando algo enorme que viene del bosque. Se dirige a tu posición. ¡Mantente en guardia!" gritó el doctor Román.

Todos los Servant presentados inmediatamente se prepararon para el combate mientras todos se giraban hacia el bosque. Se colocaron en una formación no coincidente, pero táctica: Shielder, Casters, Archers y Assassins formaron la línea de fondo para brindar apoyo y proteger a su Maestro, mientras que otras Clases formaron la línea de frente para hacer frente a la amenaza que se les presentaba.

Algo emergió de la línea de árboles. Una criatura con dientes afilados y alas que invocaba la imagen clásica de un dragón, específicamente del tipo wyvern. Sin embargo, lo que realmente llamó la atención del grupo fue algo en su boca, una víctima a medio comer, con un par de piernas delgadas y pequeñas que sobresalían de su boca.

Tras una inspección más cercana de la comida del wyvern, el vestido blanco drapeado dejó bastante claro quién era la víctima.

"¡Esteno!" Medusa chilló cuando inmediatamente se separó de la formación. Al ver esto, los demás rápidamente siguieron su ejemplo.

El lagarto gigante trató de alejarse volando, pero el Jinete de cabello púrpura fue mucho más rápido. Envolvió su Daga sin nombre alrededor de la criatura alada antes de golpearla contra el suelo. Medusa y sus compañeros Servants hicieron un trabajo rápido con el wyvern. Pronto se desvaneció en la mota dorada de luz, como un Servant, dejando a Stheno húmedo (con saliva) e inexpresivo donde una vez estuvo.

"¡Hermana!" Medusa lloró y abrazó a su amada hermana mayor.

"¿Por qué estamos aquí solo para sufrir...?" Murmuró la Gorgona mayor, aunque a su hermana menor no podría importarle menos; estaba contenta de que su hermana mayor estuviera bien.

"Me alegro de que estés bien, Stheno", dijo Gudao mientras él y Mash se acercaban para inspeccionar al Asesino. "¿Pero dónde está Gudako?" El Asesino de cabello púrpura simplemente señaló en dirección al bosque.

"Espero que un dragón se la trague entera", maldijo Stheno.

Hablando del diablo, un gran dragón real, no un simple wyvern, salió volando del bosque y pasó sobre su cabeza.

"¡Consigue esa cosa!" Alguien gritó desde la línea de árboles destruida que dejó el dragón. Todos se dieron la vuelta para encontrarse con Lancer Cu y los dos Hassan corrieron tras la gigantesca bestia. "¡Esa cosa se tragó al Maestro Gudako!" El Lancer azul gritó y señaló al dragón que huía.