Rivales - Cache

CAPITULO 1

Inicio de clases.

Pov's Daniela

Tenía razones para estar nerviosa, era mi primer día de clases. Después de las vacaciones familiares había olvidado completamente que tendría que volver al instituto. Ahora cursaba mi primer año de secundaria. Esperaba que cualquier compañero de mi escuela anterior estuviese en la misma clase que yo, aunque no serían muchos.

Eche mi cabello hacia atrás como un acto inquieto, sentía las manos bañadas en sudor al entrar al salón. Había varios chicos y chicas que no reconocía. Eso, hasta que logre visualizar a una castaña de pelo tupido entre la multitud y prácticamente salte, pegando gritos.

___ ¡AVANI! ___la llame, emocionada, mientras me acercaba a la chica más bajita.

La mencionada pareció reconocerme y se lanzó a abrazarme. Mi amiga era más bajita que yo y siempre estaba sonriendo. Su cabello era castaño, y bastante tupido, su piel un poco más oscura que la mía.

Éramos distintas. Mi piel era blanca -casi pálida-, y mis cabellos castaño claro con algunas mechas en rubio que hacían resaltar mis brillantes ojos miel.

___ ¡Daniela Calle, gracias a Dios! Pensaba que estaría sola.

Le sonreí y fuimos a sentarnos juntas.

___ ¿Has visto a alguien más? Yo juraba que estaba sola, no muchos se matricularon en este instituto ___comento, cruzando las piernas. Yo me recosté en la mesa.

___ Hasta ahora, solo tú, pero es mejor así ___confesé, con una sonrisa juguetona.

Los estudiantes iban entrando al salón y aún no había alguien que me fuera conocido. Parecíamos estar en mundos diferentes. Yo era una chica relajada. Podía durar todo el día dibujando o escuchando música, también utilizaba ropa cómoda y holgada; unos jeans holgados, camiseta blanca, zapatillas deportivas y una chaqueta.

Yo no tenía muchos amigos, pero en estos momentos me encontraba feliz con Avani. Desde casi siempre habíamos sido amigas y ahora no estaríamos solas. Nos teníamos la una a la otra.

Estuvimos un rato conversando de nuestras vacaciones, hasta que escuche unas risas.

Por la puerta del salón entraron dos chicas, era demasiado parecidas, ambas muy bonitas. Pero quien capturo mi atención fue la más pequeña. La chica estaba alegre mientras reía por uno de los chistes de la otra chica, quien era más alta.

Nuestras miradas se encontraron por unos segundos. Yo me perdí en esos ojos chocolate tan profundos como el océano. <<Un océano de chocolate, por supuesto>>.

Tan pronto como empezó, acabo. Aparte la mirada y la morena hizo lo mismo, mientras se marchaba con su amiga a los asientos frente el pizarrón.

___ ¿Qué paso? ¿Encontraste a alguien conocido? ___pregunto Avani, levantando el rostro para buscar entre las personas. Negué.

___ No fue nada ___le sonreí a mi amiga. Cuando el profesor entro, comenzó la clase. Se presentó a los estudiantes y comenzó a dar un pequeño discurso. Nos indicó que por orden de mesa deberíamos ir al frente de la clase y presentarnos.

Yo no quería, siempre me entraban los nervios al hablar en público, por suerte me encontraba en la cuarta fila y tardarían un poco en llegar a mí.

Los chicos fueron pasando y yo me sorprendí cuando Avani fue sin problema y al volver me sonrío divertida. Por eso, me agradaba, siempre había admirado la seguridad que tenía en sí misma.

Comencé a hacer garabatos en mi cuaderno para distraerme. Iba muy bien, cuando llamaron a una chica. Vi a la morena levantarse. Se veía -muy- linda con sus jeans claros y un crop top. Caminaba con seguridad y confianza, mientras mostraba una sonrisa coqueta en sus rosados labios.

Se paró al frente de todos sin mirar a alguien en específico. Era muy femenina, o eso era lo que yo pensaba, por su estilo y su manera de caminar.

___ Me llamo María José, pero pueden decirme Poché. Un gusto. ___sonrió, pestañeando. De seguro la mitad del salón ya pensaba que era linda.

Yo aparte los ojos de la hermosa morena y volví a hacer garabatos. No me importaba.

Después de pasar unos minutos, era mi turno. Me levante, seguramente con el rostro pálido, y me dirigí hacia el frente. Algunos murmuraban y otros reían bajito.

Los ignore y seguí. Desde que estaba en primaria siempre era el centro de burlas, pero con el paso de los años aprendí a no darle importancia.

María José me miraba con interés, apoyaba la barbilla en su mano y mordía uno de sus dedos. Aun haciendo aquel gesto, se veía increíblemente guapa y por más que decir, femenina.

Intente por todos los medios no observarla, y al terminar fui como un rayo a sentarme en mi puesto. Solté un suspiro y mire como mi amiga alzaba los pulgares, en señal de ánimo. Después de dos horas, tenía que cambiar clase. Apresurada, recogí mis libros mientras mi amiga me apuraba.

___ ¡Calle, mueve el trasero! ___grito desde la puerta.

___ ¡Espera, Avani! ___le pedí, siguiéndola, ya que se había ido al pasillo.

Sentí como alguien me empujaba por el hombro y se me caían todos los libros. Había una chica de cabello rubio frente a mí, riéndose.

___ Ay, disculpa. No te había visto ___mintió, con ojos burlones. La mire mal y comencé a recoger mis libros.

A su lado paso otra chica, que pateo uno de mis libros en el suelo. Era otra de las amigas de María José, la castaña que tenía un parecido impresionante con ella, que resulto ser su hermana.

___ Estabas en mi camino excuso y se echó a reír con la otra chica. Fruncí el ceño y mire a María José, que apareció junto a ellas.

___ Chicas, no sean tan malas ___les dijo, aunque también sonreía y me miraba burlonamente en el piso___. Pobrecita, Alana.

María José se estaba burlando de mí y a pesar de eso, seguía pensando que era hermosa. Intente descubrir el porqué, pero no lo conseguí. Logre volver a mi misma cuando las tres chicas se fueron por el pasillo.

Avani llego hasta a mí, disculpándose por dejarme sola. Le reste importancia, pero pensando en si Madi Monroe, Alana y María José serían las idiotas que me harían la vida imposible el resto del año.

Puede que estuviera en lo correcto.