CAPITULO 1

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Capitulo 1

- Decididamente, tus padres te pusieron bien el nombre, ¡Blanca! No se puede ser más pura!

- No soy pura Alicia! Es que no me gustaba lo suficiente. Salimos a cenar, estuvo bien, pero... no, no había chispa.

- Pero si es el más guapo de todo el departamento!

- Y que hago? Me voy con él a los dos días de conocerlo, que además  trabaja en nuestra misma empresa, y luego me va a dar mucha pereza verle todos los días, lo sé, que me conozco.

- Desde que rompiste con el idiota de Pablo no te gusta ninguno!

- Ya sabes Alicia que estoy concentrada en mi trabajo. No tengo tiempo de nada más!. Mira qué triste que tengo que quedar solo con compañeros de trabajo, porque no hago casi vida social.

- Eres demasiado responsable. Una chica tan guapa y lista como tú, no puede ser así de responsable....

Blanca se rió ante el comentario de su amiga y compañera. Si la verdad es que no estaba nada mal. Tenía 29 años, era rubia con el pelo largo y tenía unos bonitos ojos azules. Nunca había tenido problemas a la hora de encontrar pareja y siempre había sido bastante admirada allí donde había ido.

La vida le iba muy bien en general. Trabajaba en una multinacional de conocido prestigio y llevaba una carrera muy prometedora, con 29 años ya era responsable de un departamento comercial y sus superiores confiaban en ella, debido a que era una persona muy constante y de gran confianza. Siempre conseguía aquello que se proponía, debido a su gran perseverancia. Nunca aflojaba ante los problemas, siempre se mantenía en su sitio y era una gran y dura negociadora. En ocasiones le decían sus amigos que era demasiado fría, que debía soltarse un poco la melena y desinhibirse un poco, pero Blanca tenía claros sus objetivos y no quería dar rienda suelta a su parte más desinhibida. Estaba siempre en todo momento controlada. Pensaba que regirse por sentimientos le haría salirse del camino que tan claro tenía respecto a su futuro.

Blanca había compartido su vida con Pablo los 3 años anteriores y tenía la ruptura reciente. Pablo y Blanca parecían la pareja perfecta. El era una persona seria y responsable, unos años mayor que ella, y eso hacía que él estuviera a la altura de ella con su sentido de la responsabilidad y de las cosas bien hechas. Se conocieron trabajando mientras Blanca cerraba una fusión entre dos compañías. Pablo era el director financiero de una de ellas, una persona muy brillante y tranquila. Pero incluso para él fue demasiada la presión de hacer siempre lo correcto y cometió un error. Acabo teniendo una aventura y Blanca con su carácter analítico acabó por descubrirlo y decidió terminar la relación sin casi recibir una explicación por parte de Pablo.  No se dejó, no quería escuchar y tentar a la suerte y quizás dejarse convencer. No quería dejar salir ningún sentimiento.

A partir de la ruptura Blanca se centró más que nunca en su trabajo y se traslado de la casa que compartía con Pablo a un ático en el centro. El único capricho que se dio fue aquel piso con una maravillosa terraza con vistas a la ciudad. Estaba cerca de la oficina, para tener fácil acceso a su trabajo, su única preocupación en estos momentos.

Tanto era así que habían pasado ya seis meses desde la ruptura y todavía no había terminado de deshacer las cajas. Aquel viernes se había propuesto ese fin de semana terminar de ordenar todas sus cosas.

-       Me voy ya Alicia- dijo riendo- me ves?? Me voy!!! A mi hora!!

-       Ay madre! Estas muriéndote!!- contesto Alicia riéndose

-       Jajaja Nooo, es que me he propuesto terminar con las cajas de la mudanza y hasta descansar un poco, que con el cierre del trato de Main Company esta semana ha sido muy dura.

ROMPIENDO REGLASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora