𝐙𝐎𝐌𝐁𝐈𝐄 ✘ 𝐋𝐄𝐄 𝐒𝐔𝐇𝐘𝐄𝐎𝐊

iii

Mi respiración estaba agitada, sentía muchas ganas de llorar, pero el miedo de que aquellas cosas me encontrarán no me permitían soltar mis lágrimas.

Suhyeok me rescató y de alguna u otra forma logró escondernos detrás de un muro, pero no se como saldremos de aquí con todos esos cosos rodeando el lugar.

— Suhyeok..

— shh, no hagas ruido. —murmuro agitado también, su pecho subía y bajaba erraticamente.

— ¿que son esas cosas?

El se quedó en silencio sin saber que responder.

— ¿ves ese otro callejón? —me pregunto en un susurro, yo asentí temblorosa. — vas a correr hasta ahí.

— ¿y tú?

— iré detrás de ti.

— pero...

— A la cuenta de tres irás hasta allá, cuando estés llegando a el patio el resto me lo dejas a mi.

Tragué en seco, aun habían muchos de esos monstruos cerca de nosotros, y aún con la agilidad y velocidad que he practicado durante años, vi a esas cosas correr y morder. Tienen un deseo de sangre muy grande, y son más veloces que flash.

Si es que así se llamaba el protagonista de aquella película.

— uno... dos..

Mordí mi labio inferior, y en cuanto él soltó la palabra "tres" empece a correr con todas mis fuerzas hacia donde el me indicó. Los monstruos empezaron a acumularse y correr detrás de nosotros, aquellos que se acercaban demasiado fueron pateados por Suhyeok.

Uno de ellos se acerco por delante hacia a mi, y en un movimiento rápido corri directamente hacia a él, y justo cuando estuvo apunto de agarrarme, yo me deslicé por debajo de sus piernas y segundos después Suhyeok lo derribó.

— pie sobre pie, pie delante pie, pie sobre pie, pie delante de pie..

Suhyeok empezó a correr más rápido y paso por delante de mi, acomodó una escalera justo a una ventana que daba a nuestra aula, subió y empezó a tocar desesperadamente en ella, rápidamente le abrieron.

— ¡Rápido Yena, rápido! —me grito cuando ya estuvo arriba.

— ¿Yena? ¿Mi hermana esta contigo? —logré escuchar la voz de Cheongsan.

— ¿Yena? ¡Yo voy ayudarla! —ese había sido gyesu.

— ¡La puerta idiota!

Subí lo más rápido que pude la escalera, y cuando estaba apunto de llegar a la ventana una de esas horribles cosas tomó mi pie.

— Suhyeok... —mis voz tembló y lo miré a los ojos, el tomo uno de mis brazos y empezó a jalar. — ¡Sueltame zombie de mierda!

Pateé la cara del monstruo y cayó llevándose con el una de mis zapatillas. Suhyeok junto a Cheongsan me ayudaron a subir rápidamente y yo me senté en el piso recostada a la pared.

Antes de que Suhyeok e incluso mi hermano llegarán a preguntar por mi estado, Gyeongsu se abalanzó sobre mi para inspeccionarme, cosa que aún en esta situación, me hizo soltar una risita.

— ¡Gyeongsu la puerta! —le gritó mi hermano a su mejor amigo, mientras Woojin iba a encargarse de la puerta.

— no regañes a gyesu, quien te crees. —le reclamé a mi mayor, y este torció los ojos.

— ¿estas bien? —me preguntó Gyeongsu y yo asentí con una sonrisa.

Alce mi mirada, y me percaté de que Suhyeok nos estaba mirando de una forma rara a Gyeongsu y a mi. Pero al ver que yo también lo miraba aparto su vista a otro lado.