Ruby Eyes ~(Diluc Ragnvindr x reader)~

Parte II

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~Al día siguiente~

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Después de maldecir a las campanas de la iglesia por despertarme justo a tiempo, me levanté para ir de nuevo a la sede de los caballeros.

Jean tenía una nueva misión para Kaeya y querían que yo le acompañara. Será fácil, supongo.

Ya estábamos de camino y ese peliazul no me quitaba el ojo de encima, queriendo sacar un tema de conversación.

Kaeya: bueno preciosa, que te parece Mondstadt de momento? Te he caído bien? No me hablas, pensé que eras más divertida.

___: este sitio es hermoso, sin duda hacía tiempo que no respiraba un aire tan puro. -por un segundo pude notar como despertaba la curiosidad del peliazul- y la verdad, pareces un pirata bastante divertido. Claro que me caes bien. Siento no haber hablado mucho contigo, no sabía que decirte.

El chico se quedó unos segundos en silencio mientras caminabamos, parecía estar analizándome.

Kaeya: así que dices que no eres tan aburrida eh? Seguro que alguien tan genial como tú sabrá como divertirme, cierto?

___: por supuesto, seguro que no te aburres.

Kaeya: hm... eso suena muy bien~

___: no se en que piensas, pero me suelen decir que es difícil aburrirse con mis locuras.

Kaeya: y quien te dice eso, tus amigos?

___: la gente a la que espanto sobre todo, aunque en su caso no creo que sea un cumplido.

Kaeya: jeje, podrías demostrarmelo esta noche. Quieres ir a la taberna? -me dijo, sonriendo pícaramente- a lo mejor te puedo demostrar porque me llaman "el mejor amante de Mondstadt".

___: dos cosas: allí te veo, pero solo es una excusa para beber, y la segunda, seguro que nadie te llama así.

Kaeya: por lo menos déjame intentar engañarte, pero a lo mejor puedo hacer que tu me llames así. Que me dices?

___: en serio? -dije mirándole a su ojo con una sonrisa de complicidad, era bastante divertido. Me respondió con una risa coqueta y seguí hablando- inténtalo si quieres, pero no eres mi tipo, capitán.

Kaeya: oohhhh... -comenzó a hacer pucheros- pero si quieres salir a beber conmigo verdad? -dijo sonriendo de oreja a oreja, a lo que accedí.

___: oye, sabes algo de un tipo encapuchado por las calles nocturnas de Mondstadt?

Kaeya: veo que ya has conocido al héroe nocturno de Mondstadt. Es un tipo misterioso que "protege" a los habitantes de Mondstadt, un peligro para los caballeros de Favonius.

___: peligro? No os está ahorrando trabajo?

Kaeya: así solo hace que duden de la eficiencia de los caballeros. Nos hace ver como inútiles.

___: entiendo... porque tenemos que ir allí?

Kaeya: estamos en busca de uno de los cristales de stormterror.

___: stormterror?

Kaeya: vives debajo de una piedra o que? Hace cuánto estás aquí?

___: acabo de llegar a Teyvat, lo siento.

Kaeya: oh! No te disculpes preciosa, pero cuanto menos sepas mejor.

___: si puedo ayudar en algo, por favor dímelo.

Kaeya: no querría que te metieras en eso, cuando llegue el momento te pediremos ayuda.

___: si así ayudo, de acuerdo.

Kaeya: no te desanimes, bonita -revolvió mi pelo y se adelantó- vamos rápido y así podrás invitarme a una copa.

Después de adentrarnos en el templo del Lobo, un mago del abismo sale de una columna de la sala y va a por Kaeya. Justo entonces unas llamas atraviesan al mago y Kaeya se encuentra cara a cara con un viejo conocido.

Kaeya: contaba con que vinieras, pero tu presencia hace las cosas más interesantes.

???: como siempre, los caballeros de Favonius tan ineficientes. -giró su cabeza, mirándome- no deberías arrastrar a otros a tus misiones.

Kaeya: vamos hermanito, solo quiere ayudar! Además hemos terminado por hoy, no es verdad, ___? -agarró con fuerza mi hombro

___: Kaeya me haces da– -me tapó la boca y salimos a rastras del templo.

Kaeya: menos mal que hemos salido de ahí, ahora me debes una copa.

___: pero si-

Kaeya: cual es tu bebida favorita? Seguro que tenemos en Mondstadt -dijo cambiando de tema, parecía que no quería hablar de esto- podemos emborracharnos juntos esta noche! Será divertido.

___: oye, quien era ese tipo? Lo he visto solo una vez pero no pregunté su nombre.

Kaeya: oh, solo una vez? Que suerte, puesto que acabas de estar ante Diluc Ragnvindr, el hombre más codiciado de todo Mondstadt y bla bla bla... Nadie importante la verdad -dijo con una media sonrisa.

___: Diluc? Pensé que era un barman sin más -de repente el peliazul empezó a reírse por mi comentario- además, parece que no le gustan los caballeros de Favonius.

Kaeya: si... es una larga historia. En fin, cual es tu bebida favorita? Dímelo de una vez!

___: creo que el jugo de gancho de lobo o la bebida de menta.

Kaeya: nada de alcohol? Que decepción.

Cuando llegamos a Mondstadt ya había anochecido, así que después de hablar con Jean literalmente me llevó a rastras a la taberna "Obsequio del Ángel", una de las más famosas en la ciudad.

Nada más llegar, me sorprendió ver a quién nos encontramos Kaeya y yo, apoyado junto a la barra.

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Fin de la parte II.

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