XIII

1.2K 86 99
                                    


XIII. Insegura

 Insegura

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Grace

Yeneviv habla y habla sin parar sobre arreglos florales y fragancias, centros de mesa y demás. No me deja hablar, nisiquiera puedo detenerla porque ella es la organizadora.

—Creo que las orquideas harían un gran contraste con...

—¡Basta! —exploto, me pongo de pié y tomo aire tres veces antes de soltar lo que tengo que decir—, no me gustan las orquideas Yen, no quiero arreglos de nada, no será una boda común. Sólo una... unión entre dos personas y no podemos arriesgarnos a traer hasta al mismísimo presidente de Serbia y todo su séquito porque no son buenas temporadas para mi familia. Hay un enfermo desquiciado que nos está cazando allá afuera y que intenta acorralarnos y tu ¿me hablas de hacer una fiesta como si Isabel II se fuera a casar de nuevo?

—Sí. —Jesucristo dame paciencia—. Ya sé que no son las circunstancias que te hubiesen gustando para tu matrimonio pero, Grace —toma mis manos postrandose frente a mi—, es tu boda. ¿Vas a permitir que el enfermo ese y su bola de puñales te quiten la satisfacción de bailar despreocupadamente con tu marido? ¿Atiborrarte de alcohol y esperar la noche de sexo alocado?

—¡Yen!

—¡Como sea! —rueda los ojos—, permitete un momento de felicidad mínimamente.

—Tiene razón, suelta las bragas y que se te resbale lo demás. Tienes una casa donde el servicio te llama "señora", un futuro marido más duro que Terminator, dos preciosos bebés que en algún momento me voy a robar y les voy a comprar un departamento de solteros en San Francisco —reímos—, dos perritos tan preciosos como mascotas...

—Son lobos —la interrumpe Yen—, lobos que descuellan gente.

—Los bebés solo están jugando. —rueda los ojos y se gira hacia mi—. Tienes una boda por delante.
Mira el lado bueno. Te lo mereces después de todo lo que ha pasado.

—Pero y si...

—¡Deja de pensar en los demás y concéntrate por una puñetera vez en ti! —miramos sorprendidas a Yeneviv quien se calla inmediatamente—, lo siento. Síndrome de la organizadora loca. —ríe nerviosa—. He batallado con novias que son imposibles, tenía que descargarme de alguna manera.

—Yen y yo nos encargaremos de lo demás, pero todo debe ser a tu gusto y eso Niall te lo dejó claro.

Era cierto. Esta mañana tuvo que ir a Bosnia con mi padre. Los asuntos de la organizacion han quedado a sus únicos cargos y por ello deben tratar personalmente ls recientes incidentes que surgieron tratando de ser discretos en pueblos pequeños pero en reuniones con magnates importantes.

Antes de irse me repitió que no importaba como ni donde fuera, me tenía que gustar a mi. Dijo que no debía pensar en el costo, por ello dejó una Black Card a cargo de Yen.

𝐃𝐎𝐌𝐈𝐍𝐈𝐎 #𝟐 |njh| ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora