—Bien, entonces vuelve a la normalidad— se burlo logrando hacerlo sonreir.

—Espera— pidió el castaño cuando su teléfono empezó a sonar.

¿Mama?— pregunto Can confundido.

Hola cariño, perdón la interrumpcion pero quería comentarte que tu papa y yo iremos a cenar a la casa de Eda y Serkan.

Okey... enviale mis saludos a los tios— contesto el castaño sin saber que mas decir.

No— rio Piril. —Te llamaba por eso, vamos a ir para festejar la llegada de Kiraz, nos encantaría que vienieras con nosotros mi vida. Ustedes hace años que no se ven, seria lindo que se pongan al dia- comento la pelirroja al otro lado del teléfono.

Em... yo, no creo que pueda ma— respondio Can mientras su amigo empezaba a arrugar su entrecejo. —Yo, ya tengo planes.

Pero

No te preocupes, no es como que no la vere en la oficina, ya tendremos tiempo de sobra para... ponernos al dia.

Can solo le estaba diciendo a su madre lo que quería oir, aunque no pensaba ir a aquella cena, no se sentía listo para verla aun.

Bueno, esta bien. Aunque si cambias de opinión, ya sabes donde estaremos— contesto Piril un poco desanimada.

Claro

—Eres un mentiroso— acuso Burak apenas su amigo corto la llamada.

—Ya lo se.


🍒🍒🍒


Kiraz había pasado la tarde del sábado con sus padres y con Alp, su hermanito había dejado ese fin de semana libre solo para estar con ella.

Los cuatro habían ido a pasear, y a pasar un tiempo en familia como cuando los niños eran pequeños y se daban esas pequeñas escapadas lejos de todos y de todo.

Aunque en cuanto llegaron a la casa Eda se puso a hablar con Engin y de ahí salio la organización de una cena, solo con los Sezgiz.

Kiraz había pensado mucho en su regreso, había pensado mucho en la vida que llevaría en Estambul, su plan de volver también había estado guiado por la nostalgia asi que claramente pensó en su viejo amigo, en Can. Ella tenia la idea de recuperar aquella vieja amistad, recuperar al que había sido si primer compañero en todo cuando eran niños. Y por eso ahora mismo tiraba todo lo que encontraba sobre la cama, estaba emocionada... emocionada de ver a Can.

—¿Te sudece algo?— le pregunto a sus espaldas Alp, viendo con expresión divertida todo el lio de su hermana mayor.

—No no, es solo que... no se que ponerme— respondio ella viéndolo rodar los ojos.

—Es una cena en casa Ki, puedes ponerte lo que quieras— respondio viendo que eso no la dejaba conforme. Alp podía ver los nervios de su hermana aunque aun no estaba seguro de porque estaba asi. —Con cualquier cosa te veras hermosa— dijo entonces haciéndola sonreir.

—Gracias. ¿Quieres ayudarme a elegir?— pregunto Kiraz haciéndolo reir.

—Creo que prefiero ayudar a papa a preparar la mesa— dijo entonces antes de escapar.

La castaña decidio calmarse a si misma, Can y ella se conocían desde siempre se decía a ella misma. Hasta que sus tios llegaron, ambos recibiéndola con un calido abrazo, pero sin Can.

—¿Y Can?— no pudo evitar preguntar ella.

—Oh, el no podía venir, tenia un compromiso previo— se disculpo Piril con pena.

TOCARAS A MI PUERTA?Where stories live. Discover now