La profecía.

Baile de primavera. I

-Jackson Hargreeves.-

¡Mal momento! Muy, muy, muy mal momento para que se me olvide mágicamente como atar una corbata. Hago esto todos los días para el uniforme de la escuela, ¿Cómo se me pudo olvidar ahora? Es ridículo.

Okey, con calma, sólo es respirar y hacerlo bien.

Suena fácil, ¿No? Bueno, lo es, cuando no estás muriéndote de los nervios.

Pasando con la corbata, más dudas aparecen cada vez que volteo a ver al espejo, ¿Estaba bien que mi cabello se viera así? Parezco Emily haciéndome estas preguntas, pero ahora de verdad lo veía necesario.

Iba a ir al baile; con la chica que ahora es mi novia, Julie. Y eso en verdad me emocionaba mucho.

Debido a mi constante indecisión, decido pedir refuerzos.

Salí de mi cuarto y solamente crucé el pasillo hasta dar con la puerta de la habitación de Emily, la cuál golpeé dos veces antes de que ella me dijera desde adentro que podía.

—Oye Em, ¿Que dices sobre..?— Cerré la boca cuando le puse más atención a mi hermana.—

Traía un vestido de color celeste de tirantes, ajustado hasta su cintura, para luego caer en una falda que llegaba hasta la mitad de sus muslos, con algunos bordados en la parte baja de la misma, y también algunos al rededor de la cintura. Creo recordar, que ya lo eh visto alguna vez en alguna fiesta en la academia o algo así.

—Está horrible, ¿No?— Preguntó Emily con tono de frustración.—

Negué con la cabeza de inmediato.— No, no, en lo absoluto, de echo es.. Muy bonito.—

—¿De verdad?— Preguntó incrédula, como si nunca le hubiese dicho cuando realmente se veía mal.—

—Definitivamente.— Ladeé la cabeza.— Aunque es algo extraño solo que tengas la mitad del rostro maquillada.— Solté una risita.—

—Me falta maquillarme el otro ojo, aún no terminé, y tampoco sé qué hacer con mi cabello.— Suspiró con frustración.—

—Suelto se ve bien; Hablando de eso, ¿Crees que mi cabello está bien así?— Señalé mi cabeza con las manos.—

—No, pareces un muñeco Ken, de los feos, ya sabes, con una mirada súper forzada y cabello de plástico lleno de laca.—

—Vaya, gracias.— Dije de forma irónica, bajando mis brazos.—

—No, en serio, arréglate eso, no sé, despéinate un poco.— Dijo acercándose a mi y sacudiendo un poco mi cabello.—

—¿Mejor?— Dije cuando dejó de mover mi cabello.—

—Hmm, si, así está mejor.—

Escuchamos unas voces en la sala, más de dos al parecer.

—Parece que Dominic ya llegó.— Comenté, ya que dudaba de que alguien más vendría hoy.—

—¿Puedes ir allá y decirles que me esperen?—

—¿Y yo que tengo que ver?—

—¡Por favor!— Suplicó.— Aún no termino de maquillarme.—

—Otra vez, ¿Yo que tengo que ver con eso?—

—¡Jackson, por favor!— Dice, casi empujándome de su cuarto hacia afuera.—

—Está bien, está bien, ya voy..— Cerró la puerta.— Gruñona.—

—¡Te escuché!— Gritó desde el otro lado de la puerta.—