Vinnie
Tarde.
Demasiado tarde.Me llamareis egoísta, idiota incluso. Pero he pasado una década detrás de ella, y justo cuando decido pensar en mi le da por confesarse. No. No me lo merezco.
- ¿sigues ahí?- pregunta Sam entrando al balcón encendiendo su cigarro.- no te entiendo.- Le miro confuso.- tú la rechazaste. Rechazaste a la chica de la que llevas enamorado tú y todo el barrio toda la vida.
- no voy a volver a poner a nadie antes a mi mismo. Ni siquiera a Nina.- acoto dándole una calada al mío.- diez años Sam. ¿Sabes lo que es pasar una puñetera década detrás de una chica que siempre, siempre, miraba a otro mientras tu la mirabas a ella?
- ¿y te das cuenta de que no la quieres justo cuando ella se da cuenta de que si te quiere a ti?
- ¿cuándo he dicho yo que no la quiera?- le miro soltándole el humo en la cara antes de que nos interrumpa Thomas.
- ya están aquí.- acota haciendo que dejemos los cigarros y entremos a la casa.
Ahí estaban.
Cuatro veinteañeros musculados y tatuados hasta el cuello alrededor de Mark, el hombre que me estaba dando problemas.- por fin.- habla el cuarentañero de pelo grisáceo con una sonrisa ladeada.
Katerina
Bajo mi cabeza a la mesa de madera oscura y absorbo con mis fosas nasales todo el polvo mágico, como le llamaría Thomas, que puedo.
Veintitrés días.
Veintitrés días sin verle desde aquella noche.
Hacía lo mismo que cada noche desde aquel día. Meterme a un bar en los suburbios y gastar todo mi dinero en algo que me hiciera sentir porque desde que el castaño se giró sin mirar atrás no sentía nada. Solo vacío.- ¿tienes algo más?- le pregunto al pelirrojo apoyándome en la pared del pasillo a su lado. Me mira de arriba a abajo frunciendo el ceño.
- eres la chica de Hacker...- acota haciéndome sentir un pinchazo.
- no soy la chica de nadie.- le quito el cigarro de la mano y sonríe levemente al verme darle una calada.
- ya...- parece algo incrédulo y acaba sacando una pastilla de su bolsillo.- ¿qué me das a cambio?
- tengo cinco pavos.- saco el billete.- y algunas monedas.
Tras unos segundos callado y mirándome como si estuviera diciendo algo súper estúpido, me da la pastilla y agarra el dinero antes de acercarse a mi.
- estas pastillas son caras así que me deberás algo.- susurra en mi oído haciendo que sienta todo mi cuerpo estremecerse pero acaba alejándose entre la multitud.
- ¿Katerina?- oigo al salir de la casa repleta de gente para tomarme lo que Fezco me había dado. Miro a un lado y le veo a él. Sonrío como una niña pequeña.- la pequeña Kat.
- Ethan.- digo antes de abrazarle a pesar de notar que los colores se me mezclaban y el suelo se me hacía demasiado ligero.- ¿cuánto hace? ¿Seis años?
- siete.- replica al separarnos.- acabo del llegar a la ciudad. Quería pasar a pillar algo por aquí, ya sabes, antes de ir a ver al hombretón.- hace una pausa.- me extraña que no esté contigo.
- ya no nos hablamos.- respondo seria esta vez. Parece sorprendido y es normal. Vinnie y yo jamás nos separábamos y las discusiones nos duraban dos horas contadas.
- sabía que acabaría cagándola. Sino no sería un Hacker. Nos viene en la sangre.- rueda los ojos sonriendo como Vi.
- oye guapa, Fez quiere verte.- nos interrumpe un moreno alto.
- ha sido genial verte. Me tengo que ir.- me despido del hermano del chico que me había roto el corazón antes de dirigirme a ver al pelirrojo con el mundo dándome vueltas.
Me mira algo extrañado pero acaba sonriendo calmado.
- ya se como puedes compensarme.- acota cuando entro al balcón. Le miro algo aterrada esperando que no fuera lo que estaba pensado.- no seas estúpida. ¿Katerina no?- asiento.- me acompañarás a la fiesta de Tenson. Mark Tenson.
- ¿yo? ¿Por qué?- pregunto burlona.
- porque necesito una chica guapa para la fiesta más importante del oeste. Deberías saberlo, vives con el camello más poderoso de este lado.
- te he dicho que no vivo con él.- niego de nuevo.
- si, ya.- asiente.- el sábado, a las ocho un coche pasará por ti ¿vale? No se para que pregunto si tampoco tienes otra opción.
La había cagado otra vez.

ESTÁS LEYENDO
Arcade; Vinnie Hacker
FanfictionKaterina Hotchner se entera de que su novio le ha sido infiel dejándola destruida. Lo que no sabe Kat es que su mejor amigo desde siempre, Vinnie, que a la vez es el camello más famoso de LA, está completamente enamorado de ella.