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El tan solo pensar de irse a dormir sabiendo que su amigo esta aun desaparecido le carcomía la conciencia. Sentía que él era el único que debía ayudar a su amigo, a su único amigo. Las manos le temblaban al agarrar el picaporte de la entrada, actuar como que todo estaba normal en casa a comparación de la realidad del exterior era la hipocresía más grande que tenía que vivir como detective.

Tomando una respiración profunda, Haechan cambio su cara de preocupación por la mejor sonrisa que podía tener en esos momentos. Acomodando sus zapatos al pie de la entrada, el olor a tomates y orégano llego a sus fosas nasales. Escuchando sonidos de la cocina decidió acercarse más a dónde provenía el ruido.

Mark estaba cocinando y al parecer una cena para los dos

Al parecer Mark percibió su mirada y volteó a verlo. Acomodando sus mangas junto a los pelos rebeldes de su frente. Lo recibió con una sonrisa, como lo extrañó hoy

-Llegaste- dijo Mark mientras llevaba dos platos de pasta a la mesa, la cual estaba levemente decorada.

Haechan asintió por su parte –No me esperaba esta sorpresa-decía tomando asiento

Mark rio mientras servía un poco de vino en la copa cercana a Haechan-Quería pasar tiempo de calidad contigo-dijo mientras se sentaba en su respectivo puesto-sé que últimamente como pareja hemos perdido conexión gracias a nuestras agendas- decía tomándole la mano a su esposo –así que te quería sorprender- sonrió

Haechan no pudo evitar sonrojarse. La comida se veía deliciosa, el vino también. Después de un día largo como hoy, que mejor que tu esposo te consienta de esta manera.

Empezaron a comer en silencio, un silencio tranquilo. Disfrutar un plato de comida junto con la persona que amas ayudaba a sanar. Tanto físico como mentalmente

Haechan dio su primer sorbo de vino. Sabía delicioso y se le hacía conocido el sabor. Al girar un poco la botella, logró mirar la etiqueta, dando dar conexión del por qué ese sabor tan familiar

Era el mismo vino que había tomado con Jaemin, el ultimo día que lo vio

Mark noto la vista curiosa de Haechan hacia la botella. Se veía la juventud reflejada en esos hermosos orbes que tenía como ojos. La brillante luz del comedor le hacía justicia a esos chocolatosos ojos. Ojos por los cuales pecaría por ver toda la vida y en sus siguientes

- ¿Qué tiene el vino? -pregunto por fin – es tu favorito ¿no? -Mark voltio la cabeza un poco a la derecha cual cachorro, que le sucedía a su querido esposo

Haechan al oírlo, salió de sus pensamientos negando lentamente –Es que me recuerda a Jaemin...-

- ¿No lo han encontrado aún? - preguntó curioso el Lee mayor

-No, fui a su apartamento y nada –suspiró-nunca volvió-

Mark en ese momento le tomó la mano, acariciando sus nudillos-Ey tranquilo, pronto lo encontraran-

Haechan poco a poco alejo su mano, que le dijeran que todo iba a estar bien no le trasmitía calma. Sentía que solo lo miraban con lastima por ser el amigo-compañero del desaparecido y posible ... difunto

¡Basta conciencia!

Jaemin está bien, yo lo sé

Yo lo sé ...

Haechan negó intentando borrar esos pensamientos pesimistas de su mente. Tomó un trago hondo a su copa

Al ver la botella, vio que estaba ya vacía. Decidió agarrarla e ir a la bodega a buscar más, sentía que tomarlo haría sentir a Jaemin con él. Se paró de la mesa en silencio para dirigirse a la bodega.

12:14|Markhyuck Donde viven las historias. Descúbrelo ahora