Capítulo 2

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Término de arreglar las ropas de su señora viéndose en el espejo más hermosa de lo que era con el toque de ser la esposa de un Conde famoso. Ambas bajaron al comedor donde se encontraba el resto de la familia Phantomhive esperando a la dama para dar inicio a su desayuno un poco más temprano de lo normal pues ese día vendría una visita especial para la señora Rachel.

(T/N) con cuidado levantó los trastes usados llevándolos a la cocina para limpiarlos sin romperlos, sintió un jalón en su vestido llamando su atención hacia el suelo topándose con la mascota de la Familia.

-¿Tanaka no te ha dado tu desayuno? - preguntó terminando de acomodar los platos comenzando acariciar el pelaje oscuro del perro siendo contestada por un ladrido- está bien, deja lo busco.

El perro lo que quería era jugar pero no sabía exactamente si hacerlo o no, veía como jugaban con Sebastian y ella siempre deseó un perro y nunca supo cómo tratarlos pero les tenía un gran cariño;fueron al patio de la mansión empezando a jugar con una pelotita pasando un buen rato divirtiéndose.

Llegó la hora del té y Evans llevaba los utensilios necesarios para ese momento, por andar metida en sus pensamientos chocó con alguien manchando las ropas de una dama de vestidos rojos.

-D-disculpe de verdad, no veía mi camino.

-No te preocupes jovencita solamente fueron unas manchas - La dama se empezó a reír por la actitud nerviosa de la contraria intentando limpiar su vestido - deja esto de lado puedo comprarme otro si quiero ¿no sabes donde se encuentran los Phantomhive?

-Sip, están en la terraza.

-¿Pues qué esperamos? Vamos de una vez - con toda la confianza del mundo la mujer de cabellos rojos jaló de la sirvienta en dirección a donde antes le dijo donde se encontraban el resto.

Por todo el camino (T/N) suplicaba con buenos modales que la soltara pues todo el té había sido desperdiciado y no quería llegar con las manos vacías o mejor dicho con la pura charola mientras que la mujer tenía una gran mancha del líquido. En la terraza la dama saludó a los presentes con una gran energía abrazando con alegría a Rachel.

-¿Me extrañaste hermana?

-Siempre te extraño, hermanita.

-Que bueno verte por aquí Angelina o debería decir Madame Red.

-Ay cuñado, me hace sentirme bien alegre por saber que soy bien recibida.

-¿Qué pasó con tus ropas hermana?

-Tuve un ligero problemita, estaba tan apresurada de verles que me tropecé con su querida sirvienta. - Madame Red abrazó de los hombros a (T/N) que se estaba muriendo de los nervios -¿Tu eres (T/N) Evans, no es así?

-Si mi señora, yo soy.

-Entonces ponte cómoda cariño y quédate con nosotros.

-P-pero tengo que ir a buscar el té y los bocadillos.

-Bien, bien pero apúrate porque tengo algo para ti.

Ella se retiró pidiendo disculpas pero antes de hacerlo del todo escuchó como su amo preguntaba "¿lo has traído?" siendo contestado por un sonido positivo de Angelina. No tardó mucho en volver con el té y los aperitivos acomodandolos en la mesa que se encontraba en la terraza, terminando su labor fue jalada de nuevo siendo sentada en las piernas de Madame Red.

-Me encanta tus cabellos rojos oscuros querida, nuestro estilo es algo difícil de ver en resto de las damas y eso nos hace únicas - acariciaba las cabelleras de la joven sintiendo los nervios a flote que transmitía la contraria-bueno no voy a ponerte más nerviosa querida, a lo que vengo.

Cheri Cheri Lady |Sebastian Michaelis X Lectora|Where stories live. Discover now