Capítulo 11 -Arrepentimiento-

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Narra Adler

Han pasado veintidós días, Candela no aparece, ya mandamos a buscarla, pero no la han ubicado, con las evidencias que tenemos, me temo que esté involucrada en drogas, eso me preocupa, sé que Ian no es el mejor padre para ella, pero estos últimos días, veo que se ha preocupado y desesperado por no tener noticias de ella.

Según su padre, Candela desde que regresó del internado donde culminó su bachillerato, ha estado inestable emocionalmente y que requiere de cuidado, que es una niña muy sensible y que puede cometer una locura, más aún lo que pasó en la fiesta de compromiso.

Pero yo no la veo de esa manera, sé que está mal emocionalmente, no sé si con mi regreso o desde hace tiempo, pero sus ojos expresan ausencia de cariño, tristeza, pero me gustaría que supiera que no está sola, que puede contar conmigo, sé que cometí la estupidez de no comunicarme con ella, pero ojalá me entienda que lo hice porque en ese momento era una maldita basura, estaba mal y no podía comunicarme con nadie ya que Alik, no me tenía confianza como ahora, sé que fui un imbécil con ella, pero ahora quiero que haya una oportunidad para los dos, la amo tanto, que el no saber de ella me está desesperando, la necesito para decirle que estoy para cuidarla que no está sola y que puede salir adelante y ser feliz y que haré todo para remediar lo que le hice.

La he llamado todos los días, pero no me responde, cada que pienso lo que su padre dice, me desespera, salgo todas las noches desesperado que no puedo dormir por pensar, preguntándome si ¿estará bien?, ¿si ya comió?, ¿si no tiene miedo?, ¿si está con alguien que la pueda ayudar? Lia y los chicos sé que la quieren y por eso me dijeron lo que sospechaban de ella, —Candela, ¿dónde estás? solo responde por favor.

Ya es de noche, veré que hay en la alacena para cenar, me están llamando de un numero desconocido, ¿será Candela?

—Candela, ah... ¿Cómo me encontraste?, ¿qué quieres?, no me interesa hablar contigo Alik Ferretti, me debes una maldita explicación, como es posible que me hayas ocultado algo tan importante de mi madre, ¿por qué no me dijiste que mi madre y tú se habían comprometido? — expreso con enfado.

—¿Cómo lo supiste?, hijo por favor déjame que te explique, además es un tema que no puedo discutir por teléfono contigo, supe por tu primo Vlad, que tienes problemas con una jovencita, ¿y quieres saber dónde está?, pues te tengo noticias de ella, pero la información te llegará mañana a través de tu primo. Lo de tu madre lo hablaremos en un momento oportuno, hijo por favor no te enfades conmigo. — pronuncia Alik Ferretti

—¿Dímelo ahora, para que intermediadores o me ocultas algo como lo hiciste con mi madre? — interpelo algo molesto.

—Prefiero que descanses hijo. —

—Si realmente alguna vez me quisiste como un hijo como tanto presumías, dime que sabes de Candela o sino no pierdas el tiempo llamándome.

—Está bien, según mis informantes ha estado en varios estados como Boston, Miami, con otras chicas, yéndose de compras, parece que se ha tomado unas vacaciones, no hay de que preocuparse, su fecha de vuelo de regreso es en unas semanas, hijo por favor no te preocupes, ella está bien, cuando peda viajaré para Nueva York lo más pronto posible para explicarte todo con respecto a Lara, tu madre, te quiero hijo, descansa.

Cuelgo, sin decirle nada, sigo enfadado con él por no decirme nada de mi madre, lo bueno es que Candela, está bien, es lo importante, enviare mis hombres en el aeropuerto para que la esperen y me informen cuando llegue y pueda hablar con ella.

Narra Candela

—Ya es tarde dormilona, — comenta Adria, entran las chicas a mi habitación, me levanto y me arreglo lo más rápido posible y bajamos para dirigirnos al lugar de la fiesta de compromiso.

Llegamos, hay mucha gente que no conozco, supongo que son amistades de Issey y Natasha, pensé que iba hacer una fiesta intima, pero por lo que veo no, hay varios tipos que los noto extraño, demasiado diría yo, por seguridad trataré de pasar lo más despistada posible, tengo una corazonada que hay gente posiblemente infiltrada, advierto a todos.

Me siento en un sillón, alejado de los invitados, cuando un tipo de aspecto como de infiltrado, se me acerca, preguntándome si puede acompañarme, me da una copa, la acepto, pero no la bebo.

Empieza a preguntarme sobre mi nombre, que hago en una fiesta como esta, le digo que unos amigos me dijeron que había una fiesta y que venimos de colados, me hace muchas preguntas como: ¿de dónde soy, cuantos años tengo?, si conozco quien es el anfitrión de la fiesta, ¿si puede conseguir la mejor mercancía acá? Ya que había rumores de que en este tipo de fiestas se vende lo mejor en estupefacientes.

Pero como soy experta en evadir tipos así, me libero del inmediatamente, a los treinta minutos se me acerca otro tipo haciéndome las mismas preguntas, esto ya es extraño lo evado simplemente, me retiro del lugar y me uno a unos extraños para que piensen que vine con ellos, despistar, hasta les hago creer que voy con ellos, cuando se lo que hago para despistar y no evidenciar a Issey, es su día y no por culpa de mis ansias de consumo la eche a perder su fiesta, me dirijo al hotel y le comento a Issey, para que investigue si son gente que conoce o no, sin ninguna novedad, termina la fiesta.

Ya es lunes, estamos nerviosos, pero a la vez emocionados por ser la última entrega el detalle es que, el desembolso será en uno de los clubs más exclusivos y famosos de las vegas y la cantidad es grande y de diferentes tipos de drogas, habrá una fiesta de gente importante, nos preocupa que haya infiltrados, es mi turno para entregarla, junto con Issey.

A Issey le llega un mensaje, diciendo que ayer en su fiesta había 6 infiltrados, de diferentes agencias de policía antidroga, pero había otros de otros bandos enemigos y alguien especial, que es gente del enemigo del jefe.

Eso me hace más ansiosa, por la entrega del día viernes. Pero, sé que estar nerviosa o ansiosa no me servirá de nada, mejor cambiar de plan, nos queda poco tiempo. Mientras planeamos que hacer, ya es de noche, descansamos para recargar energía para los demás días que serán de arduo trabajo.

Ya es jueves y cada día que pasa mis ganas de consumir son mayores, los nervios, mi ansiedad me está volviendo loca. —Malas noticias, — dice Issey, maldigo para mis adentros, —¿ahora qué? — pregunto, estamos a unas malditas horas de la entrega, lo que menos quiero es terminar en la cárcel, cuando he anhelado mi libertad, largarme a otro país, ya compré los boletos para largarnos solo después de la fiesta de Hank.

—¿ahora qué pasa Issey? — pregunto con curiosidad.

—Según los informantes del jefe, la policía tiene preparada una emboscada, para atraparnos, quieren mi cabeza. — indica.

Maldita sea, eso no puede ser, le indico a Nate lo que tiene que hacer para mañana en la noche y como debemos de actuar, no permitiré que los policías me arresten mañana.

Voy directo a mi habitación a esnifar una pequeña cantidad de coca, la necesito, me tranquiliza, me ayuda a relajarme.

Siento como me transporta a la tranquilidad y a callar las voces en mi cabeza, Issey justo entra y me descubre que estoy consumiendo y discutimos por eso, piensa que con lo que acabo de hacer puedo arruinar la misión que tenemos.

Trato de explicarle que no será así, si se dejara guiar por mí, mañana estaremos volando de regreso a Nueva York y a celebrar en el departamento nuevo y entregar el dinero al jefe.

Él duda de mi capacidad más por lo que vio que acabo de hacer, trato de que entre en razón, pero es tan terco que ya me está desesperando, veo que no nos está llevando a nada esta discusión.

Trato de calmarme y solo dejar que hable, antes que me arrepienta y esto termine mal. Las chicas y su novia Natasha tratan de calmarlo y que acepte la propuesta que le hago. mejor voy a dormir, lo necesito.

SUEÑOS EN LA REALIDADWhere stories live. Discover now