Le hago una seña a Riley de que se vaya. Pero él sigue ahí, parado...mirándome confundido.


-Jódete acosador -suelto nuevamente, Dean ríe.


-Me encantas, Grrr -hace un sonido, sin poder evitarlo me río- Woah, sabes reír.


-Cabrón -me muerdo el labio para no reír- Adiós.


- ¡No, no cuelgues! -súplica- ¡ANNIE ME ENCANTAS!


Mi ceño se frunce. ¿Qué demonios?


-Perdón, tenía que decirlo, nena.


-Basta Dean, no me acostaré contigo.


Sin darme cuenta, Riley está a mi lado y me quita el teléfono.


- ¿Quién demonios te crees que eres? ¡No jodas hijo de puta! Anna es mía, no te acerques.


Me quedé boquiabierta, ¿Él dijo...él?


Me levanté enfurecida y le quité el teléfono de la mano, Haley seguía tirando del cabello de Riley.


- ¡Pues te jodes, si yo quiero a Anna...la voy a tener -seguía diciendo Dean.


- ¿Dean? -pregunté, se quedó mudo- Te hablo luego.


Colgué, y miré a Riley enfadada.


- ¿Quien te crees que eres para quitarme el teléfono de esa manera? -gruñí- ¿Y por qué le dices que soy tuya?


Riley parecía sorprendido y confundido.


-Anna yo...


- ¡No Riley, no! -grité, Haley me miró asustada. Mierda, mierda, mierda. Sonreí para tranquilizarla, ella miró a Riley, y luego a mí.


- ¿Papi? -preguntó, Riley le besó la frente haciéndola reír.


-Luego hablaremos de esto Riley, ahora vete.


Me di media vuelta y me encerré en el baño.


Me molestaba que Riley fuera tan territorial cuando en estas dos semanas ni me notaba, me enfurece que me traten como un objeto de su propiedad.


Pero no sólo me molestaba, me dolía...y ya no soportaría nada más de esto.


Me desperté por el sonido de la puerta y la risa de Haley. Me senté en la cama mirando la hora en mi teléfono.


Annabeth RoweWhere stories live. Discover now