Una Palabra Complicada

Capitulo 41: Mi nueva experiencia.

POV Jinora.

-¿Cómo dices que fue?- Pregunte intrigada por lo que Korra me había contado.

-Ella...me beso- Dijo ella.

-Eso si lo tengo claro, me refiero a la cita- Dije preguntando por detalles que seguro había tenido durante su cita.

-¡NO SABIA QUE ESO ERA UNA CITA!- Dijo ella exasperada.

-No hace falta gritar, ¿Por qué no el preguntamos a mi abuelo?- Propuse, el abuelo siempre tenia las respuestas a casi todas las dudas que teníamos.

-¿Él sabe qué consejo dar cuando una chica te ha besado?- Pregunto Korra.

-Es muy sabio, pero no sé si lo será tanto como para esto- Pensé un poco, es decir el ha viajado por muchos lugares y quizás ya sabe como reaccionar o que decir ante situaciones.

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POV Korra.

-¿Por qué yo?- Dijo Jinora mientras estábamos frente a la puerta de Aang.

-Creo que soy muy chica como para preguntar eso- Dije ya que no sabia como empezar si quiera la platica o como articular pregunta.

-Si, pero eres la mas inteligente, puede que sepas mejorar las palabras- Dije tratando de que ella hablara con Aang.

-¿Qué pasa niñas?- Aang abrió la puerta.

-Este....Korra tiene que decir algo, nos vemos- Jinora aborto la misión y se fue rápidamente, mire rápidamente a donde Aang quien sonrió a su nieta y luego su mirada se centró en mí.

-¿Qué paso?- Pregunto este.

-Yo...creo que me gusta alguien- Dije nerviosa, ¿Cómo se supone que iba a empezar a preguntar esto? Mejor dicho ¿Qué rayos se supone que debo decir?

-Oh, cosas de amor- Aang hizo que bajáramos a la cocina y preparo algo de té, no sé por qué pero alguien debió pegarle aquella manía, pero el té que preparaba era muy bueno.

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-Cuéntame, ¿De quién se trata?- Aang tomo asiento y dio un sorbo a su té.

-La cosa es que, pues...es una chica- Dije mientras evitaba verlos a los ojos, mirando solo mi taza.

-Ya veo, ¿Ella te gusta?- Aprete la taza con nervios, no sabía que decir, después de todo, las cosas habían sucedido de manera rápida y no había tenido tiempo como para asimilar las cosas.

-No sabría decirlo, es decir no me disgusto pero es algo nuevo para mi y la verdad me siento confundida, es decir, soy una chica y salir con una chica seria algo raro, no se que dirá la gente y más importante...- El rio levemente, aquello me puso nerviosa, sin embargo el miro su taza con un semblante tranquilo.

-Lo que diga la gente no es algo que deba importarte, mientras tu seas feliz las personas que te acepten y te quieran apoyaran tus decisiones siempre y cuando estes conforme con ellas- Aquellas palabras sonaban bien, ayudaban mucho al problema en mi cabeza, pero la cuestión es que quizás solo las decía por decir, quería en verdad entender a la persona frente a mí.

-Yo...- Trate de hablar pero mi voz no daba.

-¿Cuál es tu preocupación?- Pregunto Aang.

-Bueno...técnicamente eres como un padre para mí, digo casi pasaste la mitad de tu vida buscándome y aunque no lo quieras admitir o decir, te debo mucho y si estoy estudiando y tratando de ser mejor porque siento culpa por lo que hice en el pasado, por haber huido y dejarte con una preocupación...- No sé si mi explicación era buena, al menos para mi tenia que serlo porque en verdad tenia dudas acerca de lo que debía hacer, ¿gustarme una chica? No suena descabellado pero, Aang tiene razón la cosa es que la única persona que quiero que me diga si aceptaría algo como eso es él.

-...-

-Yo, siento que tengo mucho que pagar y trato de ser alguien mejor pero no se si ahora tengo el derecho de serlo, no se si esto que siento es algo real o es algo...- Confese todas mis inseguridades a Aang, el debía darme alguna respuesta o quizás le exigía mucho o quería mucho mas de este, que otra cosa podría pedir o hacer siendo que el me crio hace tiempo, ahora que he crecido podría aceptar sus palabras de tristeza viendo en lo que me he convertido, sin embargo nada de lo que he hecho ha dado resultado.

-Korra...-

-¿Qué?- Dije alterada.

-Estas confundida, has estado manteniendo muchos problemas en tu cabeza y eso te esta afectado, no me debes nada, no estas encadenada a mis deseos o expectativas, eres libre de elegir- Aquellas palabras fueron buenas, pero no ayudaban.

-¡PERO NO QUIERO ESO!- Grite molesta.

-...-

-Yo, siempre he hecho lo que quise y nada de eso me ha llevado a nada bueno, caí en la bebida, pase de fiesta en fiesta y sepa dios con quien he estado, necesito control pero no puedo ser yo quien dirija mi vida, si lo hago solo acabare perdida como estuve todo este tiempo- Explique con un tono quebrado y a punto de llorar, el me abrazo, en verdad lo necesitaba.

-No controlare tu vida, pero te ayudare a guiarla- Esas palabras fueron las que en verdad ayudaron a que al fin pudiera sentirme algo segura.