La señoraoigausted me invitó a dormir, Bruno dijo que aceptará porque es más fácil, ella mando a Bruno a dormir con Luna y tuve toda la habitación de él para mi. Es más divertido así.
En la mañana me desperté y tenían listo el desayuno, a decir verdad me gustaría aprender a cocinar aunque creo que no le falta nada a la carne yo también quiero cocinar para ellos.
—¡Bruno!, sírvele a tu maestro.
—Él sabe servirse.
Su mamá le dio un golpe en la cabeza.
—No se preocupe señora oiga...—Bruno me miro mal, ya que explicó que son tres palabras diferentes pero no puedo dejar de juntarlas aún así.—Yo iré a servirme.
En eso Luna bajó, tenía una pinta de no haber dormido muy bien, se asustó al verme y se regresó de inmediato, después de unos minutos ya bajo peinada y arreglada.
Me confundió su acción pero lo ignoré.
Su mamá se alejó un poco ya que atendió una llamada. Luna suspiro y me dijo:
—¿Puedes olvidar lo que sucedió ayer?
Bruno abrió los ojos confundido.
—Fue solo una noche...—completó—pero no sucederá más.
—¿Emm?, está bien.
—Por favor no le cuentes a nadie—se levantó y se marcho. La mirada del humano sobre mí era penetrante, ambos también nos marchamos él a la escuela y yo a trabajar. Tuve que explicarle lo de su hermana por qué él pensaba ...no sé que cosas pensaba.
Esta tarde me mantuve analizando.
¿Dan amaba a alguien más? ¿Por eso ella lloraba? ¿Le dolía verlo con alguien más? ¿Eso es el amor como las películas que aveces vemos en la tele?
Finalice mi trabajo, me había vuelto más rápido a excepción de hoy que estuve tan pensativo que no me concentre, pero fue mi día de paga por lo cual estaba contento. Ya de regreso por Bruno note a su hermana triste, cuando llegamos a su casa, ella seguía igual, Bruno entró rápidamente porque tenía que ir al baño pero ella seguía a paso lento, no era la misma de siempre ni hablaba o se enojaba como siempre.
—Luna...
—¿Eh?—dijo saliendo de sus pensamientos.
—¿Quieres...—luego saque poquito mi dinero del bolsillo contándolo.—¿Quieres ir a comer carne conmigo? Siempre voy este día ya que me pagan.
—¿Carne?
—Sí, hay un restaurante buenísimo. Podríamos ir.
—Mm no lo sé, no tengo humor...
—¡Vamos!—dije tomando su mano.—Te hará bien.—ella se sorprendió por la acción. Él humano se mantenía oculto él la puerta mientras hacía un me gusta con su mano y me felicitaba con señas, después de todo él había estado recordándome nuestra promesa a cada rato que hicimos en prision.
Fuimos a comer y después ella sugirió ir a una pista de hielo. ¿Tienen idea de qué es eso? ¡Es una cosa mortal! Caí horriblemente, no tuve el control de mis pies, ni dudaría que se tratara de brujería o algo así, además, Luna se cayó e intenté ir por ella y también caí, ¡es fatal!, ¡casi lo odie por completo! Pero Luna reía tanto que se me pasaba.
Ella trataba de enseñarme a patinar, ¡pero ni ella sabía!, mencionó que le daba miedo desde que que se resbaló fuertemente a los 15 años. Dijo que tenía una cicatriz en su pompi, quería mostrarla pero huí, no quería verla. Al final ella dijo que era un hombre respetuoso pero yo solo no quería ver heridas en piel humana.

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El mounstro que se enamoró de la humana.
Fantasy"La vida de un mounstro del 1500 se ve interferida cuando por accidente despierta en el 2018 con el cuerpo de un humano. Teniendo que lidiar con las tragedias de la vida cotidiana, en su destino conoce a Bruno un humano de 14 años que pretende ayuda...