▹ 𝒔𝒑𝒐𝒊𝒍𝒆𝒅 ¹'¹

10.1K 760 47
                                    

» Nunca creí que pedirían tanto una continuación de este cap jajdj espero lo disfruten :D

•••

Él estaba enojado y tú, haciendo el intento por reprimir una risa que probablemente empeoraría todo. No es como si Yoongi fuese un chico tóxico, es más, suele tener muy buen sentido del humor y a veces se ríe hasta de sí mismo, sin embargo, cuando se molesta, realmente repudia que no lo tomen en serio.

—Yah, Yoongi —Te acercaste a apretarle su mejilla, haciéndole arrugar la nariz. Él no se levantó del sitio en donde estaba, permaneció acostado en el sofá de tu departamento—. ¿Sigues enojado conmigo? ¿De verdad?

Me dejaste solo en la práctica mientras tú te ibas a comer una salchicha —respondió, manteniendo sus ojos cerrados y el ceño levemente fruncido.

—No quería que te pusieras dramático de nuevo. Los chicos querían aprovechar el ensayo —explicaste con tranquilidad, pero sin conseguir que él suavizara su expresión.

—¿Dramático? ¿Crees que soy dramático? De verdad me estaba doliendo la rodilla —se excusó, provocando que tú rodaras los ojos.

—Bueno, si tú lo dices —dijiste, para después dar un ligero suspiro—. Entonces... ¿No quieres cenar conmigo? —Él abrió los ojos un poco y te miró. No pudiste evitar reír y apretar su mejilla una vez más—. Anda, bebé, ¿No tienes hambre?

No quiero levantarme —protestó—. Si me cargas...

—Ni lo pienses, Yoongi —le interrumpiste, haciendo que él soltara un pequeño gruñido.

—Entonces un beso —pidió, haciendo un ligero puchero que apenas abultaba sus labios. Tú te acercaste, pero besaste su mejilla—. ¡Oye!

—Se va a enfriar la comida, Yoon —le dijiste con una sonrisa mientras ibas hacia la cocina. Le escuchaste caminar, hasta quedar detrás tuyo—. ¿Qué pasa? ¿Ahora te has vuelto a enojar? —le cuestionaste, sin dejar de darle la espalda, pues estabas sirviendo los platos.

—No estés jugando conmigo, jagi. Me hieres —expresó, acercándose hasta recargar su frente en tu nuca.

Sin duda, era increíble que el mismo chico que en sus canciones puede poner "tienes un palo en el culo", también sea capaz de quejarse por no recibir tus mimos. Estás segura de que si fuera un gato, no pararía de ronronear.

—¿Me darás un beso?

—¿No estás contento con el que te di? —reíste ligeramente.

—Joder... —se quejó—. Uno en los labios —dijo, mientras abultaba éstos ligeramente. Esa imagen era muy adorable, pero ya que tu mimado novio estaba tan pegajoso el día de hoy, no ibas a dejar pasar la oportunidad de molestarlo un poco más, así que tomaste un poco de salsa de la comida con tu dedo y la pusiste en sus labios en lugar del beso que tanto estaba esperando—. ¡____! —exclamó.

—¿Qué? ¿No está bueno? —le preguntaste, intentando aguantar tu risa.

—Me voy a deprimir y tú vas a ser la culpable —lloriqueó de forma fingida, en otro intento de recibir atención tuya.

—Bebé... —le hablaste mirándolo fijamente, haciéndole abrir sus pequeños ojos, expectante—. Ven aquí.

Tomaste sus mejillas con tus manos y acercaste su rostro al tuyo, hasta que sus labios se rozaron y ahí, dejaste un corto beso para separarte de inmediato, dejando a Yoongi con sus ojos cerrados, esperando por más.

—Hay que cenar, Yoongi —le dijiste, tomando ambos platos para llevarlos a la mesa.

Una vez más, él soltó un pequeño gruñido que indicaba que no estaba satisfecho. Fue detrás de ti y esperó a que dejaras los platos en la mesa para acercarse y robarte un beso. No pudiste contener una corta carjacada, lo que provocó que Yoongi volviera a plantar otro beso en tus labios. Y así, durante varios minutos, estuvo dándote pequeños besos, sin dejar que te soltaras de él. Terminó esa sesión de mimos con unos cuantos besos en tu cuello, provocándote otra risa.

—¿Ahora sí estás feliz? —le preguntaste, pero no obtuviste respuesta, sólo viste a Yoongi sentarse para comenzar a comer.

—A comer —dijo antes de tomar los palillos, evadiendo tu pregunta. Por un momento, fijó su mirada en el plato de comida y se quedó estático.

¿Qué pasa? ¿Ahora quieres que te dé de comer en la boca? —cuestionaste en forma de burla, mientras tú tomabas un bocado.

—¿Por qué no?

Definitivamente, no había duda de que Yoongi, además de ser un rapero que podía maldecir a medio mundo, también era una adorable —y mimada— bolita de masa que haría cualquier cosa para conseguir tu atención y de la forma que él quisiera.

Definitivamente, no había duda de que Yoongi, además de ser un rapero que podía maldecir a medio mundo, también era una adorable —y mimada— bolita de masa que haría cualquier cosa para conseguir tu atención y de la forma que él quisiera

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐑𝐄𝐀𝐂𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒 ▹ Min Yoon Gi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora