Capítulo 13: Un secreto.

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Capítulo 13: Un secreto.

En la fría y gris habitación, las ventanas estaban cerradas y el ambiente inundado de humo. Era de madrugada, un chico de cabello color miel estaba sentado en el sofá de cuero de su pequeño departamento. Tenía una remera blanca con mangas largas, un viejo y suelto pantalón color azul opacado que le llegaba hasta sus descalzos talones. Entre su dedo índice y mayor había una bala que te asesina lentamente, un cigarro. Aunque siendo honestos, a él no le hace daño alguno.

–Ah, Merianne. – suspiro mientras soltaba humo de su boca, como un dragón. –Te extraño querida, extraño tu piel y tu frialdad, extraño ver como te atormentas por mí. – acto seguido se coloco el cigarrillo en sus labios, esa arma mortal solo se deshacía, como fuego arrasando un campo de flores. Una idea cruzo su mente, sonrío maliciosamente y tiro el cigarro ya apagado al suelo donde acompañaría a otros más hasta que se le ocurriera limpiar el piso. Comenzó a vestirse, cambio su remera por una camisa negra, sus pantalones viejos por joggings blancos desgastados en las rodillas. –Me pregunto… si me estarás esperando. – ríe pícaramente mientras se pone unas botas oscuras. En un abrir y cerrar de ojos desapareció del sofá.

 <<Simplemente estoy ansioso de verla. >> Me dije mentalmente mientras esquivaba cada edificio, techo o chimenea de la ciudad. Casi tres veces me choque contra un rascacielos. Hasta que al fin llegue al hospital, me fije en la ventana que había entrado anteriormente a la habitación de Mery, me coloque arriba de un poste de luz que estaba cerca y salte hacía la ventana. Unas camas después visualice a Merianne. La habitación estaba oscura y no veía nada, simplemente no me importo, pero, estaba bastante negro el lugar. << ¿Pero que mierda esta pasando aquí? >> Me pregunte. Decidí apretar el interruptor de la luz. Cuando vi… algo completamente…

Odioso.

– ¿Quién eres? ¿¡Qué le haces a Merianne!? – le pregunte a esa figura. El camisón de mi pelinegra estaba completamente levantado, haciendo notar sus pechos, un hilo de saliva unía sus pezones con la boca de una bestia. Mi furia aumentaba con cada cosa que observaba. Él encima de Merianne sin camisa y el pantalón desabrochado; y las piernas de Mery alrededor de su cintura. Era odioso. Más cuando empezó a reír.

–Ja,ja… Con que tú eres la “bestia”… – ignoro mis preguntas. Y al decir la palabra bestia doblo sus dedos haciendo comillas. –Tú eres la bestia que quiere arrebatarme a Mery. – a mi solo se me escapo un “¿Eh?”. – ¿No te han hablado de mi? – pregunto casi indignado.

–Si creo que creo quien eres te matare aquí mismo. – le advertí, mis ojos me ardían, seguramente estarían haciéndose rojos a causa de la ira.

– ¿Conoces a un tal… Christopher? – mis ojos se abrieron como sartenes y empecé a perder conciencia. – Soy yo… – se señalo así mismo. – ¿Sorprendido, querido vampiro? – ahora él que ríe maliciosamente soy yo. – ¿Qué? … ¿Ahora tu perdiste la cabeza? –

–No. – lo miro fijamente, mis colmillos empiezan a crecer y mis ojos me arden. Rojos de enojo. –Yo… – cierro los ojos y sonrío con la cabeza gacha. –No soy como tu. – lo observo con los ojos bien abiertos, imitándolo, aunque no mentalmente.

–Oh, ¿Quieres pelear? – me pregunto. Luego de eso, provocándome lamio el delicado y pálido cuello de Mery.

– ¡MALDITO HIJO DE PUTA! – fue lo único que grite antes de lanzarme sobre él. Ambos caímos al suelo con la intención de demacrarnos. Pero… se escucho una voz de una mujer. Bastante desesperada, cuando me di cuenta… el maldito psicópata había desaparecido. <<Malditas ventajas de ser un demonio… >> dije apretando mis dientes y mis puños con fuerza. Luego mi vista se fijo en Merianne, con su camisón completamente levantado, las piernas abiertas y sus brazos doblados hacía arriba. Me mordí el labio y sentí un chorro de sangre salir, lo lamí rápidamente. Mis ojos se fijaban en su cabello que se derramaba como vino sobre sus pechos, también observe su pálida piel, seguí descendiendo hasta llegar a su ombligo, iba a bajar más pero… empecé a sentir un “pequeño” bulto en mi pantalón.

Vampiro. [CON TREMENDO HIATUS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora