empty skies

Capítulo 1. Primera Etapa: Olvido

"Estamos actualmente cuarenta y siete minutos tarde debido a las fuertes nevadas," una voz amable resonó a través del vagón. "La siguiente parada es Luton."

Harry levantó una ceja y miró por la ventana hacia la noche oscura, sólo iluminada por los copos de nieve brillantes y pesados cayendo del cielo. Se apegaban a la ventana, cubriendo el paisaje pasando lentamente en una sábana blanca y limpia.

"¿Disculpa?"

Harry giró la cabeza, mirando a una chica de su edad de pie en el pasillo. Sostenía un bolso de color rosa brillante y su cabello naranja era cubierto por un sombrero de Mickey Mouse, desplegado sobre una bufanda rosa de lana a juego. Su abrigo era negro y abotonado hasta el cuello.

"¿Está este asiento ocupado?" preguntó, señalando hacia la funda de guitarra ocupando el asiento al lado de Harry.

Harry escaneó automáticamente el vagón, notando que se había llenado repentinamente con gente. Cuando había llegado al tren, todavía estaba casi vacío. Él le sonrió a la chica ahora, agarrando su funda de guitarra. "Ocupado, sí, pero creo que en realidad está destinado para que la gente se siente, así que..." se detuvo, encogiéndose de hombros.

La chica sonrió también, dando un paso atrás para dejar espacio cuando Harry se levantó a toda prisa para levantar la funda de guitarra y almacenarla en el estante encima de sus cabezas.

Divisó una maleta junto a ella y señaló. "¿Quieres una mano con eso?"

"Eso sería agradable. Gracias." Ella sonrió de nuevo, dando un paso a un lado para dejar que Harry recoja su maleta.

Una vez que Harry se había instalado de nuevo en su asiento, ella se dejó caer al lado de él, soltando un suspiro cansado. Harry le echó un vistazo, y ella lo atrapó, una sonrisa extendiéndose por su rostro, los ojos azules brillantes.

"No soy realmente gorda," dijo. "El abrigo solamente me hace parecerlo."

Harry frunció el ceño. ¿Él la había mirado demasiado escéptico? "Yo no estaba pensando que eres gorda."

Dándole una mirada de complicidad, ella se desabrochó el abrigo y lo deslizó por sus hombros. Debajo, llevaba un jersey verde dos tallas más grandes que ella, tragándose sus manos.

"Bueno," comentó Harry. "Tal vez sea porque tu ropa son todas unas pocas tallas más grandes en ti."

"Nah," contestó ella. "El look del novio. Es considerado lindo."

"¿Es ese el jumper de tu novio, entonces?" Preguntó Harry.

"¿Estás no-tan-sutilmente tratando de coquetear conmigo?" replicó ella. Su cabello anaranjado brillaba bajo la tenue luz del vagón.

Harry resopló, sacudiendo la cabeza. "¿Hay una manera de responder esto sin parecer un idiota?"

Ella sonrió de nuevo, extendiendo su mano. "Soy Perrie, y me temo que tengo novio."

Harry no dudó en sacudir su mano. "Harry," añade. "Y me temo que no tengo novio."

"Tienes una guitarra, sin embargo," señaló Perrie.

"Siempre demostró ser la opción más sabia," Harry estuvo de acuerdo. "Mi guitarra es siempre fiel a mí."

Cruzando sus piernas, Perrie le dirigió una mirada curiosa. "Debe ser un poco aburrido, sin embargo."

Harry inclinó la cabeza en cuestión.

"Como, sólo puede decir lo que tú hagas que diga." Ella se encogió de hombros. "Eso es aburrido, ¿no es así?"