Recuerdo de un Reino - Link x Apaya - TLOZ Breath Of The Wild +18

2. Malas noticias

Pasó bastante tiempo desde la llegada de Terry al campamento; varios del grupo se lo llevaron a una tienda y comenzaron a atender su estado, realmente se veía muy mal, me preocupaba bastante. Por otro lado, en lo que nos concernía a nosotros, nos tocó esperar al anochecer para saber cuáles eran las noticias de Inogg, el enviado Yiga.

Cayó la noche, recuerdo bien ese momento. Apaya y yo nos encontrábamos caminando hacia el lugar donde se reunía todo el campamento, con ella sujetando mi brazo; para esa hora podía ver cómo ya casi todos estaban caminando de un lado para otro, atendiendo sus asuntos de mayor importancia, algunos hablando entre ellos o caminando a la junta como nosotros.

Como la temperatura bajaba, Apaya se cerró un poco su abrigo.

-Gracias a la Diosa que Terry pudo llegar. -me dijo Apaya mirando a algunos del campamento.

-Sí. Ya todos se ven más tranquilos con el agua presente... -dije yo un poco en voz baja.

Apaya me miró con preocupación luego de escucharme.

-Sí, pero no seas duro con ellos. Ya se nos estaba acabando. -me dijo ella.

-Espero que aprecien los esfuerzos de Terry, es por él que podremos salir adelante. -dije con cierta preocupación.

-Estoy segura de que lo aprecian como no tienes idea. -me dijo siendo positiva.

-Está bien. Solo me preocupa Terry, es todo.

-A todos nos preocupa... El páramo fue hostil con él. -dijo volviendo a mirar enfrente.

-No solo el páramo. -dije abruptamente.

Y era cierto, quizá me preocupaba más el hecho de que Zelda le hizo algo en Hyrule, o alguien en nombre de ella, aun no sabíamos mucho del tema, pues Terry aun no estaba en condiciones de hablar; pero pronto lo sabríamos.

Hubo un pequeño momento de silencio entre Apaya y yo mientras caminábamos, creo que la referencia a Zelda puso algo de tensión, no quería recordársela así, ella sufrió mucho cuando fue su sierva.

-Sabes, estuve hablando con Sorelia. -me dijo ella más animada.

-¿Ah, sí?

-Sí. Resulta que la ropa de colores oscuros no son muy buenos para el calor. -me dijo curiosa.

-Ah... ¿Cómo es eso? -pregunté confundido.

-Bueno, pues la tela con colores como el negro absorben más el calor del sol y calienta más lo que esté dentro. Es por eso que la mayoría de tiendas son de colores claros. -me dijo con mucho interés.

-¿Todo eso solo por los colores? -dije impresionado.

-¡Sí!

Estaba bastante sorprendido, cada que hablaba con ella me contaba algo nuevo que desconocía, todo ello producto de sus pláticas con los intelectuales y varios del campamento; de igual forma, aquello me hacía preguntarme si habría alguna relación entre los colores de la tela y las armas elementales... Definitivamente hay alguna relación.

Luego de un buen rato caminando, llegamos al centro de reunión del grupo; había algunas lámparas encendidas al rededor para poder ver, pues a veces las noches en el desierto eran bastante oscuras. Apaya y yo nos sentamos cerca del centro del círculo, junto con algunos conocidos, ahí esperamos a que el resto llegaran.

-Oye, ¿estás bien? -escuché decir a Apaya con preocupación.

Yo me giré en su dirección, ahí vi lo que sucedía. Se trataba de Nirman, ese hombre rubio de cabello redondo; su nariz estaba sangrando y trataba de detener la hemorragia con su mano.