Extra 4 - Algodón

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Octubre llegó con varias sorpresas, entre ellas, el embarazo de Sogo, quien había cumplido cuatro meses un poco antes de que Tenn comenzará labor de parto. 

La noche antes de Halloween, se encontraban cenando. En la sala habían algunos arreglos y bolsas de caramelos, se preparaban para una pequeña reunión con los demás miembros de sus ex-agrupaciones. Todo iba bien hasta que los dolores comenzaron, Terminaron en urgencias aquella noche. 

Los doctores recomendaban a los omegas una cesárea, todo para evitarse el dolor del parto, el cual era más laborioso y largo que el de una fémina. Tenn se negó a esta opción, sólo accedería a ella si surgían complicaciones. 

Iori se encontraba visiblemente nervioso, lo dejaron en la sala de espera mientras se autorizaba su estadía en la sala de parto. 

— ¿Cómo va todo? —su hermano mayor se presentó por la mañana en el hospital con su marido, apoyando en lo que podía—. 

— No me han avisado nada.

Tras 15 horas, le dejaron entrar con el mayor, este se encontraba exhausto, su cabello se pegaba en su rostro debido al sudor. 

— Solo falta poco, cariño —la partera levantó la voz, dándole ánimos—. 

— ¡Te tardaste! —Tenn le reclamó mientras pujaba—. 

El azabache se acercó rápidamente, colocándose a su lado y tomando su mano derecha, sintiendo la fuerza que estaba poniendo para terminar la labor. 

— Perdón, no me dejaban entrar —un beso fue dejado en la frente ajena—. 

Tras quince minutos más, el llanto de un bebe se escuchó y el cuerpo del mayor se relajó. Iori le besó en ese momento, mientras veían como la partera cortaba el cordón umbilical y enrollaba al bebé en una cobija blanca que rápidamente se llenaba de sangre y rastros del líquido amniótico. 

— Es una niña —la mujer se acercó a la pareja con la bebé en brazos— cárguenla. 

Tenn tomó a la niña entre sus brazos, le sonrió mientras lloraba, sentía como Iori les abrazaba, dándole un beso en los labios. Le vio con notable orgullo. 

— Se parece a ti —el mayor comentó, al ver como algunos pequeños cabellos azabaches sobresalían en su pequeña cabeza—.

Iori fue nuevamente sacado de la sala, donde sin dudarlo fue directo con su hermano, se sorprendió cuando encontró a Gaku y Ryuunosuke en el lugar. 

— ¿Cómo está el pequeño demonio? —el albino le pregunto rápidamente— 

— Está bien, tuvimos una niña —el menor lo dijo de forma robótica, no muy diferente a su voz habitual—. 

Ryuunosuke se acercó y fue cuando vio las lágrimas caer, su preocupación floreció, así como su felicidad. 

Fue abrazado por su hermano, quien acariciaba su espalda para que se tranquilizara. 

— Ya pasaste la etapa difícil —el castaño comentó, sonriendo en el acto— espera para que te dejen entrar a verlo. 

Tras una hora y media le dejaron entrar al cuarto donde estaría su esposo. Tenn estaba esperándolo con la niña en brazos. Tomó asiento a un lado de la cama, acercándose para besar a su pareja. 

— Mañana podemos irnos a casa —un tenue beso fue depositado en la frente ajena—. 

— También nos darán el resultado preliminar de su género secundario —la sonrisa de ambos se esfumó, estaban preocupados por este resultado—  espero que sea beta.

— Si es Omega, no permitiré que le pase nada —la voz de Iori denotaba seguridad— es mi princesa, la protegeré, al igual que a ti. 

Pasaron la noche en el hospital. Al día siguiente, se dirigieron a su hogar. No querían abrir los resultados hasta llegar a su sala, pero debieron abrir el sobre en su auto, debido a que sus compañeros organizaron una pequeña reunión. 

— Ni siquiera saben disimular —el mayor se quejó, riendo en el acto—. 

Tenn suspiró de alegría cuando vio que su pequeña era Beta, el resultado era un 97% confiable, pero raramente se equivocaba. 

Iori lo ayudó cuando se dispuso a bajar, además, fue él también el que llevó las maletas y abrió la puerta. Fueron recibidos por su madre, quien les felicitó llorando. 

Solo estaba el antiguo equipo de TRIGGER, y Pythagoras por parte de IDOLISH7. Tamaki no se separaba de Sogo en absoluto, mientras que Riku tenía agenda llena. En cambio, Momo y Yuki mandaron arreglos florales, ya que, debido a que se encontraban grabando, no pudieron asistir. 

— ¿Al final como se llamará? —Yamato vio de reojo a la pareja, ambos estaban exhaustos, pero denotaba felicidad y tranquilidad—. 

— Izumi Kotono* —Respondieron al unísono—. 

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El nombre Kotono proviene de un instrumento Japonés, parecido al arpa, pero en otra traducción en el mundo se refiere al algodón

Caramelo. [IoTenn/IDOLISH7] Izumi Iori x Kujo TennDonde viven las historias. Descúbrelo ahora